25/04/19

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Esta vez me gustaría empezar con una pregunta: ¿está mal enfadarse o sentirse feliz? Así es, mi pregunta es ¿está mal tener sentimientos?

Lo más probable es que todos los que lean esto van a decir que en efecto no está mal ¿pero realmente creen eso cuando tienen que aguantarse a alguien quejarse o cuando cuentan esas pequeñas cosas que los hacen felices? La verdad es que en esos momentos la mayoría diría que en realidad es un fastidio, en especial cuando están ocupados ¿pensarían lo mismo si fuera alguien realmente cercano? La respuesta es si y aún más cuando se tratan de esas minimidades.

Puede sonar cruel pero es la verdad en muchos casos, yo misma lo he confirmado. Esto va sonar súper egocéntrico y todo pero como entiendo esto trato de ser comprensiva. Es decir, si alguien acude a mi con quejas trato de dar consejos por más de que esté en desacuerdo con su forma de hacer las cosas y si alguien quiere contarme esas bobadas que los hacen felices trato de escucharlos y compartir su felicidad aunque la verdad no entienda de lo que están hablando. Sin embargo, inevitablemente hay casos en que no lo hago. Por ejemplo como tengo mi propia ideología por más que quiera hay veces que me da piedra la razón de su quejadera y como no quieren parar al final exploto, generalmente antes de que pase trato de acabar con la conversación o simplemente cortar el tema. Otro ejemplo es que soy naturalmente distraída, es más, psicológicamente hablando mi atención es un poco más bajo de lo normal, y por ello a veces no oigo lo que me están diciendo (realmente no lo oigo, ni siquiera lo digiero) y por eso pregunto de nuevo lo que me dijeron y se enojan conmigo diciendo que no les presto atención pero la verdad es que trato de hacerlo pero simplemente hay veces en que no puedo.

Pero trato de hacerlo al fin y al cabo a si sea respondiendo con una sonrisa o con una expresión. Y esta parte es la que más me duele: que los más cercanos a mi no me escuchan, ellos pueden decir lo que quieran pero la verdad es que no lo hacen. A pesar de estar en contra de subordinarme ante nadie cuando aquellos a los que quiero están estresados o cansados trato de cumplir con lo que me piden mostrando mi mejor disposición por más que me moleste o me enoje. Pero cuando yo lo estoy, por la mínima cosa que haga termino siendo regañada. Cuando estoy emocionada por algo pequeño que me paso en el día y lo cuento me responden con un inexpresivo y desinteresado "ya". Cuando estoy triste ni les cuento por que se que están ocupados y se que no le van a prestar atención así como tampoco quiero preocuparlos. Pero claro... cuando estallo ahí si dicen que por que no les conté antes, que cuando quiera contarles algo me escucharán... ¿no les parece un poco hipócrita? Pero quien los culpa, así son todas las personas.

Pero si ni siquiera me van a escuchar ni a tratar de entender por lo menos ignórenme en todo el sentido de la palabra, claro que me sentiré mal pero no tanto como cuando en respuesta me hacen una cara de fastidio o me dicen "se me está agotando la paciencia" o  cuando su actitud dice "ya te aguantamos demasiado". Así si me ignoran me voy a alejar emocionalmente lastimada pero no voy a terminar tan herida por aquellos que quiero, es mejor de esa forma me alejaré pero no sufriré.

Creo que es porque con las personas que quiero no les puedo contar nada que con personas conocidas o no tan cercanas termino diciendo todo lo que siento aunque sea en un momento no oportuno, por eso soy tan espontánea y hablo tanto de mi. Creo que por eso cuando estoy feliz o emocionada por algo así sea estúpido termino botando enormes cantidades de energía. Por eso todos piensan que soy rara y hasta de pronto tengo algo suelto en la cabeza. Pero simplemente me expreso porque después es posible que no lo pueda hacer.

Desafortunadamente si le dices algo como eso a una persona no tan cercana a ti no lo va a entender y entonces se perderá el propósito de decirlo y, sin embargo, sigue siendo mejor que nunca decirlo y dejar la sensación de soledad y aislamiento del mundo.

Lo peor es que soy de esas personas que no olvidan algo hasta que lo dicen porque la idea de decir la idea se te queda en la cabeza a menos que la digas, y eso hace todo peor, es precisamente porque esas cosas que les quiero decir a mis seres queridos no las puedo decir que nunca he olvidado ninguno de los dolores, sufrimientos e iras más importantes que he tenido. Y eso al fin y al cabo ha formado mi carácter y mi personalidad haciéndome de una u otra manera una "rara" y una aislada social.

Muchos dirán que debería acudir a un psicólogo o alguien que me apoye, de hecho lo he tratado de hacer y tanto ellos como yo llegamos a la misma conclusión: no hay otra que aguantarse. Creo que es por eso que se formó este diario de pensamientos, como auto tratamiento psicológico para no volverme loca.

Y por eso mismo descubrí que por más que los que me rodean cambiaran su actitud o su forma de pensar nadie jamás va a ser capaz de entenderme ni comprenderme del todo (creo que mi pensamiento esta tan deformado que es anormal) y por ello llegué a la brillante conclusión que la única que puede ayudarme y entenderme soy solamente yo misma. Por eso llegué a la conclusión de que expresar como me siento no sirve de nada porque al final la única que me va entender soy yo. Por eso si yo no hago algo por mi nadie lo hará. Por eso tengo que tener el suficiente carácter para sobrevivir en esta soledad, para sostenerme a mi misma y para responderme a mi misma mis preguntas porque de lo contrario me quebraré y desmoronaré hasta que no quede nada de mi en el la realidad.

Pensamientos desbordadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora