Catrina.
—Alguien vino a buscarte. —fruncí el ceño.
—¿Quien? —pregunté peinando mi cabello mojado.
—Uno de tus amantes. —Anna disfrutaba burlarse de mi.
—¿Cómo luce? —pregunté esperanzada de que no fuera quien yo creía.
—Guapísimo y ojos muy verdes. —rodé los ojos.
—Hazlo pasar. —pedí y ella asintió saliendo de la habitación. Al momento apareció quien no creía que volvería a ver.
—Catrina. —saludó con timidez. Lo miré a través del espejo. ¿Por qué estaba tan guapo?
—Paul. —dije seca aún intentando desenredar mi cabello. Él avanzó hasta donde mi y me quitó el cepillo de las manos.
—¿Qué haces? —pregunté al darme cuenta de que me estaba peinando.
—Tienes un nudo que no alcanzas a ver, déjame ayudarte. —dijo con serenidad y yo bufé resignada. Sus manos peinaban mi cabello con destreza y excesiva delicadeza.
Temía hacerme daño. Patético.
—¿Qué haces aquí? —pregunté desesperada.
—Necesitaba verte y que habláramos.
—No vamos a ser novios. ¿Por qué no entiendes eso? —pregunté exasperada.
—Lo sé. —dijo conservando la tranquilidad.
—¿Entonces por qué insistes? —pregunté intentando no moverme. Él seguía peinando mi cabello.
—Estoy enamorado de ti. ¿De verdad crees que voy a dejar de insistir? —quería darle una buena patada para que se le quitara lo idiota.
Me giré con brusquedad y le arrebaté el cepillo.
—¿Qué es lo que quieres? ¿Una relación? —pregunté impaciente—. ¡Vale!
»Desde este puto momento somos novios, entonces prepárate para el jodido infierno que te voy a hacer pasar. Vas a querer salir corriendo. —añadí en modo de advertencia.
Tenía un plan para que finalmente dejara de molestarme y desapareciera de mi vida.
—A tu lado nada puede ser el infierno. —estúpidas frases cursis y pasadas de moda.
Me puse la chaqueta y salí de la habitación.
—¡Vamos que me vas a llevar al trabajo! —grité furiosa y él me siguió sin replicar el hecho de que mi trabajo estuviera a la vuelta del edificio.
¿De verdad era tan idiota?
Saqué mis llaves y salí del apartamento con rapidez con el idiota de Paul detrás. Llegamos a su auto y evité que me abriera la puerta del copiloto como de costumbre.
—Esos actos caballerosos y sosos puedes ahórratelos si vas a ser mi novio. —ordené y él seguía guardando silencio. Me subí furiosa y al rato se subió él.
—Hueles delicioso. —sonrió. ¡Qué terco!
—Muévete que voy tarde. —dije de mal genio revisando mi celular. Durante el corto trayecto lo ignoré.
—¿Quieres que te recoja? —preguntó con amabilidad y yo fruncí el ceño.
—Es obvio que tienes que hacerlo y no te demores porque no me gusta esperar. —dije bajándome del coche. Tiré la puerta de su costoso coche lo más fuerte que pude.
No iba a aguantar más de una semana.
Cuando iba a entrar al bar alguien me detuvo.
—No importa que tan difícil te empeñes en hacerlo. —me besó sin previo aviso. Me quedé perpleja sin poder decir nada.
No podía entenderlo.
—Dejemos este jueguito de una vez. —pedí agotada de tratarlo mal.
—Sé que puedo ganarme tu cariño y mientras lo hago aguantaré tus malos tratos. Cada vez que me grites o me fulmines con la mirada imaginaré que es todo lo contrario. —sus ojos estaban encendidos.
¿Por qué estaba tan seguro?
—Te lo advertí. —dije antes de entrar al bar.
No iba a enamorarme de él ni de nadie y eso era un hecho. Lastimosamente él no podía entenderlo por las buenas.
Sería por las malas entonces.
NUEVAMENTE HOLA.
Dos capítulos en un mismo día para que después no digan que no pienso en ustedes. Espero les guste.✅ VOTEN Y COMENTEN.
🚫 PROHIBIDO LOS LECTORES FANTASMAS.
⚠️ Si veo muchos votos y comentarios, me animo a subir un tercero. 👀P/D: ¿Qué opinan de Paul? ¿Creen que Catrina se enamorará de él?
Kiss. ❤️