Capítulo 34: Dos Espías Sin Límite

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-Tienes razón, quedémonos a dormir aquí y registremos el sótano.

-Sabía que podía confiar en tí—sonríe —. Ahora vamos, no levantemos sospechas y tomemos algo.

Salimos de la habitación y bajamos las escaleras, en estas, sobre las paredes habían varias fotos. Parecía una familia perfecta, Mamá, papá, hermano y hermana. Era en beige con negro y las demás fotos eran iguales o con solo un miembro de esa familia.

-Tomen asiento, pronto estará el té ¿o prefieren café?

-Por mí el té está perfecto. Amo el olor de las hierbas - Habla Felipe con los ojos cerrados mientras sonríe.

-Un café, si no es mucha molestia Claro - digo algo intimidada por la señora y ella voltea hacia mí sonriendo mientras niega.

-No es una molestia querida. ¿Cargado o con leche?

-Con leche por favor.

La señora nos sirvió a ambos la comanda y se sentó en frente de ambos tomando ella también un café. Sorbia la bebida y nos miraba a ambos.

-¿Acaso ustedes son pareja? -Yo no sé quién se atragantó peor con la bebida., Si Felipe o yo. Ambos empezamos a toser y luego la miramos, nos miramos con horror y luego a ella otra vez.

-Nuestros sentimientos son sólo de amistad.

-Tipo hermandad.

-Exacto - la señora nos vé y ríe por nuestra escena. -Aparte de eso, tengo una pareja.

-Y es mi jefe, si nos vé flirteando no solo me va a despedir. Me va a matar, revivir y matar de nuevo.

-¡Ezarel no haría eso! Es tierno..

- Ezarel es demasiado celoso.

-Que no.

-Que sí.

-Que no.

-¡Pero bueno! Ya está bien. Solo lo pregunté porque no se parecen para ser hermanos y llegaron juntos. No hay necesidad de discutir.

-¡Ella empezó -decimos ambos mientras nos miramos indignados y nos sacamos la lengua infantilmente.

-Me recuerdan a mis nietos -ríe

-¿Dónde están ellos? -pregunta Felipe y la señora hace una cara de melancolía.

-En eld.. En otro país, hace mucho no los veo y mi pequeña Gardien... Esa linda niña murió en un incendio por mi culpa -Se le veía arrepentida.

-¿Hablaba de Eldarya? -le digo y la señora nos mira con asombro.

-No somos pertenecientes de Eldarya, pero vivimos ahí.

-¿Cómo lo..?

-Un círculo de hechicería en ambos casos.

-Sorprendente

-Lamentamos la pregunta pero ¿no habrá visto a un elfo con el pelo azul y más cuidado que el de Rapunzel?

-Me temo que no he visto a ningún elfo -niega - ¿es ese tu novio, linda?

-Yo.. Sí, le quiero mucho y estoy preocupada por el -me sonrojo y Felipe me pica en el estómago.

-A lo mejor se lo han robado - dice de manera pensativa. -A él pobre lo deben de estar torturando puesto que...un elfo no es normal en la tierra -Nos miró se fue de la cocina.

-Esto es raro -susurro

-Lo sé - Se levantó y fuimos a las habitaciones. Estábamos en la de la niña ideando un plan con las crayolas de la pequeña.

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