Por favor, acepta

Capitulo 13

Aunque habia optado por no hablar en toda la noche, a los chicos parecia no incomodarles, mi hermana estaba indiferente, August no dejaba de coquetear con Samantha, Pegie simplemente estaba recortada en el costado de mi mejor amigo, Nathan estaba sentado a un lado de Dalha y Venus, Venus ni siquiera me habia volteado a ver en toda la noche. 

Luego de que hubieramos recogido el desastre de botellas en la terraza, cada quien se fue a su habitacion. Venus se fue directo al baño cuando entramos, sabia que seguia molesta por la manera en la que habia tratado a Nathan, pero, vamos  no me culpen. 

Luego de unos largos minutos Venus salio con lo que era un simple camison de ceda, le llegaba hasta la mitad de los muslos y marcaba sus senos a traves de la delgada tela.

- ¿No piensas hablarme? - pregunte. 

- ¿Por que lo has hecho? - pregunto luego de unos segundos pensando en que responderia, decidi hacer como si no supiera de que estaba hablando aunque sabia perfectamente de que hablaba.

- ¿Hacer que? - pregunte, quitandome la camisa. 

- No te hagas el olvidadizo ahora - su mandibula se tenso - ¿Porque has tratado a Nathan de esa manera? - pregunto.

- Parece que te importa mucho por como estas tan molesta - murmure.

- ¡Demonios Damian, si me importa, es mi amigo joder! - exclamo, lanzando una de las almohadas de la cama, la atrape antes de que me diera en la cara - No tienes derecho a tratar asi a cada persona que simplemente no es de tu agrado, ya te explique lo que realmente sucedio y aun sigues empeñado en creer que algo que no existe - tenia el ceño fruncido, su rostro estaba comenzando a ponerse un poco rojo y hacia ese gesto con la nariz cuando no le agradaba alguna situacion. 

- Yo no defiendo ni a Graciela ni a Elizabeth de tus comentarios sarcasticos o tus miradas asesinas - proteste y supe que fue un grave erros apenas las palabras salieron de mi boca - cariño  yo...

- ¿Te atreves siquiera a comparar? - exploto - ¿Es en serio lo que me estas diciendo? - pregunto, Dios, esto esta peor de lo que imagine - Elizabeth y Graciela solamente te quieren llevar a la cama si es que ya no las llevaste en un pasado - grito - no puedo creer que seas tan cínico de decirme o reclamarme sobre mi actitud hacia ellas dos cuando sabes perfectamente cuales son sus inteciones - cerre los ojos, lo habia arruinado, otra vez, presione el puente de mi nariz e hice varias repeticiones de respiraciones. Cuando los abri, Venus me miraba con cara de pocos amigos, me levante de la cama y me acerque a ella.

- Lo siento - murmure, esperaba que se alejara de mi, pero en cambio rodeo mi cintura con sus brazos - no fue mi intencion decir eso, supe que estuvo mal apenas salio de mi boca, ni siquiera pense lo que decia hasta que lo dije - hable - nunca te reclamaria por la manera en que tratas a esas dos, nunca las defenderia de ti y se que no es lo mismo - apoye mi menton en su cabeza - te creo cuando me dices que es tu amigo y se que sus intenciones no son acostarse contigo, es solo que... Me cuesta superar lo que sucedio esa noche - dije, soltando el aire que tenia en los pulmones - y saber que el estuvo implicado simplemente se me hace mas dificil tratarlo con normalidad - Venus no decia nada, solo descansaba su cabeza en mi pecho - lo siento - repeti y bese su coronilla.

- No me gusta pelear contigo - la escuche decir, metida aun entre mis brazos.

- A mi tampoco pequeña - dije, acariciando su cabello, tome su barbilla y la obligue a me mirara - te prometo llevarme mejor con el, hare mi mejor esfuerzo en no parecer que quiero asesinarlo - ella rio ante mi comentario y era justo lo que queria, sonrei, me inclique sobre ella y caricie su nariz con la mia, deje un suave y delicado beso en ella y luego tome sus labios, la escuche jadear y eso me emocione, mi manos bajaron por su espalda, hasta llegar al borde de su camizon, mis dedos acariciaron su suave piel y la esuche gemir contra mis labios.

Amaba la sensacion de su piel bajo la mia, me encantaba sentir lo suave que era y mi cuerpo siempre habia reaccionado a ella, a su cercania, a su aroma, a su voz, desde el primero momento en aquel ascensor, mi cuerpo entero habia reaccionado a ella, y habia caido a sus pies desde el primer dia.

Caminamos sin despegar nuestras labios hasta que senti el borde de la cama y me sente en ella, tome a Venus por la cintura y en un movimiento la puse encima de mi, sus piernas apretaron mis costados y sus dedos se enredaron en mi cabello, jalandolo ligeramente como siempre hacia, mi boca dejo la suya y baje hasta su cuello, mordiendolo y presionando mi lengua en la misma zona, mis manos acariciaban la piel desnuda de sus piernas subiendo lentamente por ellas hasta que llegue a su camizon.

Deborando su cuello segui subiendo mis manos esperando enconrtarme son su ropa interior, subi mis manos hasta que las pase por sus caderas, notando que no traia nada debajo, la mire.

- ¿No llevas nada? - mi voz estaba ronca. Ella solo me sonrio.

- Pensaba dormir comoda y ligera- sonrio con malicia y aquello me excito, sentia la presion en mi pantalon y sin responder la tome en mis brazos y me voltee, dejandole acostada a lo largo de la cama y arrastrandome hasta estar encima de ella por completo. 

Mis labios tomaron los suyos y un gemido escapo de su garganta, acaricie con mis dedos la parte interna de sus muslos hasta que llegue a su entrepierna, gruñi cuando senti lo mojada que ya estaba para mi, esta mujer me volvia loco, en un abrir y cerrar de ojos su camizon quedo tirado en el piso, y ella estuvo completamente desnudo ante mi, admire su cuerpo, como siempre lo hacia, sus perfectas curvas me volvia loco, deje un camino humedo de besos a lo largo de su cuello, bajando por su pecho y deteniendome por unos minutos para jugar con sus pezones, Venus gemio cuando mordi uno de ellos mientras que hacia pequeños circulos con la mano en el otro, me encantaba oirla gemir, pidiendome mas.

Segui bajando mis labios por su abdomen hasta que llegue al borde de su vientre, mordi sus caderas y su cuerpo se arqueo debajo de mi, gruñi, cuando llegue a su entrepiernas ya Venus estaba jadeando, sus manos agarraron mi cabello, mientras que las mias abrian mas sus piernas para mi, montandolas encima de mis hombros. 

Mirara desde este punto siempre fue excitante, se estaba mordiendo el labio y tenia los ojos cerrados, acerque mis labios a su zona mojada y solo sople, vi como abrio la boca un gemino salio de ella, sonrei. No le di tiempo a recuperarse cuando volvi a atacar, esta vez con mi lengua y los gemidos de Venus comenzaban a llenar toda la habitacion. 

Su sabor esa extasiante, delicioso, como toda ella, mordia, succionaba y mordia su entrepierna mientras que metia uno de mis dedos en ella, adentro y afuera, una, dos, tres veces, la vea revolcarse bajo mi boca, desabroche mi pantalon con la otra mano, la presion en mi entrepierna comenzaba a dolerme y si no lo liberaba dentro de poco me iba a arrepentir, meti un segundo dedo y los mantuve en moviemiento mientras mi boca jugaba con ella, jadeaba, gemia mi nombre, apretaba en puños las sabanas de la cama y supe por el temblor en sus piernas que se iba a correr, baje rapidamente mis pantalones y ropa interior y en un movimiento rapido estuve dentro de ella. 

Joder, me quede intacto por unos segundos, sintiendo lo estrecha y apretada que estaba, sus gemidos llegaban a mis oidos cuando comence a moverme, adentro, afuera, adentro afuera.

Aprete la mandibula y la sujete por la parte trasera del cuello cuando enterre mi rostro en su cuello, cada penetrada me arrancaba un gruñido, me aleje para mirarla en cuanto acabara, y levante su rostro, poniendo mi pulgar en su menton y levantandolo.

- Mirame - exigi, sus ojos se quedaron fijos en los mios mientras que modia su labio, una, dos, tres, cuatro... cerro los ojos - mirame - volvi a exigir, cuando los abrio senti como ambos explotabamos al mismo tiempo, gruñi, y senti como todas las energias de mi cuerpo fueron arrebatadas, me deje caer sobre ella, mientras que ella envolvia mi cuerpo con sus brazos. Escucuhe su corazon acelerado y nuestros cuerpos estaban sudados por la actividad reciente. 

De todas, esta era mi parte favorita, cuando simplemente nos abrazabamos uno al otro y controlabamos nuestras respiraciones.

- ¿Estas bien? - pregunte, la sento sonreir, y lo comprobe cuando levante la mirada y la vi.

- Estoy mas que bien.