Epilogo.

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*SAMANTHA*

August y yo estábamos recostados en la cama, mirando algunas películas que pasaban por la television. 

Hoy era Domingo y había decidió pasar un día juntos luego de tanto trabajo que hubo en la semana. 

- ¿Te he dicho cuanto te amo? - me pregunta, apegando mas mi cuerpo a el de el, descanso la cabeza en su pecho y levanto la mirada para toparme con la suya, le sonrío.

- Si, y también te he dicho cuanto te amo yo a ti. 

Teníamos dos años de relación, el tiempo había pasado tan rápido que no me había dado cuenta hasta que me vi sentada en la sala con un calendario en las manos y contando los meses.

- ¿Te casarías conmigo? - de detrás de el, saco su brazo y en su mano había un cuadrada cajita de terciopelo con un hermoso anillo en ella, lo mire por unos segundos, intentando descifrar si era alguna broma lo que me estaba jugando.

- ¿Que?

- ¿Te gustaría pasar el resto de  tu vida a mi lado? - pregunto y casi de inmediato salte sobre el y cubrí sus labios con los míos, la emoción me gano y mas lagrimas se mezclaron en nuestro beso.

***

*DALHA*

Creo que me iba a dar un infarto, estaba sentada en la habitación con los resultados del examen en mis manos.

Había dado positivo. 

Tendría un hijo con Nathan. 

Estaba tan sorprendida que no me había dado cuenta cuando Nathan entro en la habitación dejo caer el saco de su traje sobre uno de los sillones a los pies de la cama.

Rápidamente doble el papel del examen y lo guarde en mi bolsillo trasero. 

- ¿Como te fue hoy cariño? - pregunto, acercándose a mi y dándome un beso en los labios.

- Bien - trato de sonreír - eso creo al menos.

- ¿Que sucede?

- Que sucede de que...

- Tienes los ojos por toda la habitación menos en mi, eso lo haces cuando estas nerviosa - sonríe tiernamente. Maldición, me conocía tan bien.

- Tienes razón - suspire - digamos que estoy un poco nerviosa.

- Y... ¿se podría saber el porque? 

Sabia que no era nada bueno ocultando secretos, así que o se daría cuenta por el mismo o se lo diría yo en algún momento y que mejor momento que ahora, cuando la noticia estaba fresca.

- Tengo algo que decirte - hable luego de pensarlo por unos segundos.

- Genial, porque yo también tengo algo que decirte - sonrió, se sentó frente a mi al borde de la cama y tomo mis manos.

- ¿Te parece si lo decimos los dos a la vez? - pregunto, en un intento de calmar mis nervios.

- Me parece - asiente.

- Bueno, a la cuenta de tres - es solo asiente - uno... dos...- maldición no podía creer lo que estaba a punto de decir - tres.

- Estoy embarazada.

- ¿Te quieres casar conmigo? - dijimos los dos al mismo tiempo, a su vez, Nathan sacaba una caja de los bolsillos de su pantalón y mostraba ante mi un hermoso anillo de compromiso.

- ¿Estas que?

- ¿Que yo quiero que? - dijimos al unísono.

***

*VENUS*

Estábamos todos reunidos en la casa de campo en Nashville.

Habíamos venido todos juntos para las vacaciones de veranos y para nuestra suerte la remodelación de la casa estaba lista para este entonces. 

- Lucas y Aurora dejen de correr, se van a caer - hable, bajando por las escaleras de afuera mientras que me acercaba a la mesa donde todos estaban sentados y dejaba el pastel que mi madre había hecho. 

- Déjalos jugar cariño - Damian beso mi sien, justo antes de sentarse en la mesa. 

- Tu y tu hermano eran cien veces peor - articulo mi madre. Voltee los ojos para luego sonreír -¿como va esa barriga? - pregunto, esta vez dirigiéndose a Dalha.

Como Pegie, lucia hermosa con su barriguita y su vestido.

- Esta de maravillas - sonríe, mientras que la acaricia con sus manos - nacerá para finales del verano - anuncia. 

- ¿Ya tienes fecha? - pregunte, mirándola con asombro y con una sonrisa en mi rostro.

- La doctora nos dio la fecha aproximada hace unas semanas.

- Que emoción, ya quiero que nazca - anuncio Sam. 

- Solo faltas tu - bromeo mi hermano.

- Por ahora August y yo nos alegramos con ser los tíos favoritos sin hijos - dijo mi amiga. 

- Tu no eres la tía favorita - Artemis la miro con el ceño fruncido a lo que todos reímos.

- ¿Ah no? Lucas, Aurora, vengan aquí - los niños llegaron corriendo hasta donde su tía, estaban creciendo demasiado rápido para mi gusto, Lucas ya tenia 4 años y Aurora los cumpliría en unos meses - ¿quienes son sus tíos favoritos? - pregunto mi amiga. 

- Ustedes tía.

- Ustedes titos - respondieron ambos al mismo tiempo mientras que Lucas señalaba a Sam y a August, mi amiga les guiño el ojo y les dejo un beso en la frente antes de que volvieran a su carrera de antes - ¿lo ves? - Artemis estaba con la boca abierta, se llevo una mano al pecho con gesto de indignación.

- Ese niño no es mi hijo y ella mucho menos mi sobrina - Pegie y yo le pegamos al mismo tiempo por la cabeza.

- Cambiando el tema - hablo mi padre - ¿a que se debe tanta comida? - me miró - ¿estamos celebrando algo en particular?

- Bueno, primero que estamos todos en familia - sonreí, con mi mejor sonrisa de inocente y segundo que debo comer doble - mire rápidamente a Damian a mi lado justo en el momento en el que alzaba la mirada - y por partida doble - le sonreí a mi padre.

- ¿Me estas jodiendo? - hablo Pegie. Tome un trozo del pastel de mi madre y lo lleve a mi boca, levantando los hombros a la vez que lo comenzaba a masticar, saque un sobre que había ocultado en mi espalda y lo puse sobre la mesa.

Damian lo agarro tan rápido que creo ni toco la mesa y lo abrió, dentro había dos fotos de un eco, en ambos se veía claramente la manchita negra, solo que a diferencia de mi primer eco cuando me entere que estaba embarazada, habían dos manchitas negras. 

Gemelos, partida doble significaba gemelos.


FIN.

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