The weird / ALBALIA

XVI

Me separé de ella aún queriendo quedarme allí abrazada para siempre, me miraba con inocencia y de una forma tierna. Y yo quería comérmela a besos y mimos.

-Vamos a dormir? -pregunté sonriendo

-Tus padres no tendrán ningún problema, creo que no saben que me he colado aquí -se preocupó

-No, mi padre llegará tarde como siempre y mi madre lleva dormida ya un rato. -abrí la cama para dormir

-Como siempre? -se interesó ayudándome y abriendo el otro lado de la cama

-Si, no pisa mucho la casa -me encogí se hombros, mi padre era un gran hombre, humilde y buena persona. El problema era que trabajaba muchas horas y cuando no lo hacía en su oficina lo hacía desde casa encerrado en su despacho. -Quieres algo más cómodo para dormir? -pregunté al verla con su ropa de vestir

-No hace falta -dijo quitándose la sudadera y quedándose en una camiseta negra de tirantes, me di cuenta de que en su muñeca había un tatuaje de algo que parecía una flor. Se sentó al otro lado de la cama

-Tienes un tattoo...-dije emocionada, me acerqué y aproveché el momento para rozarle suavemente con las yemas de los dedos su piel tintada. -Te dolió? -ella solo me observaba desde arriba

-No mucho, pero...elegí un momento inadecuado para hacérmelo -no entendía que quería decir

-A que te refieres? -me senté como un indio y ella se quitó los playeros antes de hacer lo mismo

-Lo hice en un momento de furia, digamos que...me dió una venada -se explicó

-Te explicas fatal -bromeé haciéndola sonreír

-Quizas tú no entiendes mis explicaciones de alto nivel -dijo acomodándose en el colchón y mirándome divertida

-Las de historia si, luego...las de la vida real, creo que se me atragantan un pelín más -me metí en mi lado

-Al final...amarás historia -dijo, voltee los ojos

-Ni en el mejor de mis sueños amaría historia -en el mejor de mis sueños probablemente estés tú, pensé para mí misma.

-Lo mismo digo con matemáticas -dijo mentiendose en su lado esta vez y mirando al techo, inconscientemente yo hice lo mismo

-Para algo tienes a la mejor profesora del país no? -bromeé haciéndome la chula

-Y la más humilde también no? -me encantaba verla así, verla feliz.

-Bueno, está feo que yo lo diga pero...si, efectivamente -por el rabillo del ojo la vi sonreír. -El interruptor de la lámpara está a tu derecha -miró a dónde la había indicado y apagó la luz, yo apagué la mía.

Aunque aún se veía algo por la luz de la luna que se colaba por la ventana.

-Buenas noches -dijo girándose quedando cara a cara

-Buenas noches -eres lo más lindo del universo, pensaba viéndola cerrar los ojos.

Instituto-Lunes 3 de Diciembre-8:10

-Me estás diciendo, que Natalia dormió en tu casa? -no podía creerse Marta mientras le contaba

-Si, durmió en mi casa. Entre otras cosas, porque tú eres una cabrona y la dijiste que viniese -me quité la chaqueta y la dejé en mi silla

-Ni que te hubiese hecho la mayor putada del mundo chica -se rió Marta

-No, claro que no. Pero ella estaba preocupada