Mientras Sobrevivo √

Capítulo 11

Luego de que se fue Derek me puse a revisar mis redes sociales, solo tenía una foto mía, lo que más publicaba eran algunos dibujos y frases de los libros que frecuento leer, cuando entro en facebook tenía una solicitud de amistad, era de Daniell Morgan, ese apellido me sonaba mucho, pero realmente no recuerdo de dónde, miré bien su foto de perfil y vi esos ojos azules intensos que son inconfundibles, es el chico que me ayudó, y pues, le acepté la solicitud.

Apenas eran las diez de la mañana y no tenia ganas de comer nada, no tenia nada de apetito, así que me bañé y me acomodé para ir a comprar algunas cosas muy saludables...

Llegué a un mini súper y compré algunos Doritos, chocolates, ruffles y galletas... Y como última parada la  heladería, y fui casi corriendo a mi casa para que no se derritiera el helado, pero antes de sólo pensar en comer todo eso me decidí en almorzar, si, se hizo el mediodía, ya que no tenia auto disponible, el mini súper me queda retirado, al menos la heladería no.

A esta hora se supone que hay receso de almuerzo en la universidad, debí haber ido hoy, no se, pero cuando no se va a la universidad siempre pasa algo interesante, ah, pero cuando voy hasta me caigo.

Me sonó la notificación del facebook que me había llegado un mensaje, cuando veo era nada mas ni nada menos que Daniell.

- Hola Emily

-Hola

-No te vi en la uni ¿estas bien?

- Si lo estoy, gracias por preguntar, ah, y gracias por lo de ayer, por ayudarme y todo eso.

-No hay de qué, ehm, sé que sonaré muy directo y rápido, pero si no lo hago ahora dudo que tenga el valor de hacerlo luego ¿quieres algún día salir conmigo?

-No lo se Daniell.

- Solo como amigos ¿quieres?

-Esta bien, como amigos.

-Hecho, luego te digo cuando, es que no pensé que me dirías que si.

- Oh ¿tan amargada me veo?

- No, es que no pensé que una chica tan linda como tú me diría que si.

Ok, que bien que sólo escribimos porque en serio me sonroje, esto esta muy raro, un día era ignorada y ahora le parezco linda a un chico, muy atractivo por cierto, y también tengo un hermoso dios griego por novio falso.

- Ehm, creo que gracias.

-Crees?

- Ehm si.

Iba a responderme algo cuando entró una llamada y pues tuve que contestar, un número desconocido.

- Emily.

Me quedé quieta, solo se oía mi respiración y lo acelerado que estaba mi corazón, reconocía esa voz, y muy bien.

-Camila.

- No me digas así,soy tu madre.

-No, tu no eres nada para mi, tu no existes.

- Si no existiera no te pudiera llamar, Emily- dijo seca y fría como siempre.

- Sólo dejame en paz.

- Sólo quería decirte que hay cosas que tu no sabes, tu padre te esta ocultando varias cosas.

-¿Ya? ¿Eso es todo lo que tenías por decirme?

- No te hagas la madura Emily, sabes que eso es algo que no se supera de un día a otro, eso siempre será parte de ti, de tu conciencia y no podrás escapar fácilmente de eso.