capitulo 5

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2 meses despues

La estabamos pasando de puta madre, si claro, una puta mierda eso era lo que estabamos disfrutando.

Venga hay que irnos ya- dijo hierro apresurando a altagracia, yo los esperaba en el coche.

Asi era como habiamos estado viviendo estos 2 meses de hotel en hotel, pero esta vez habiamos alquilado una pequeña cabaña en el bosque lejos de la gente.

Ya, cabron- altagracia se subio molesta al coche, y yo simplemente me rei, estos dos eran unos niñatos- mora, ve por carretera.

Rode los ojos prendi la radio y sonaba una cancion de la pantoja. Hierro se sento en el asiento del copiloto.

Ni lo pienses eh?- dije dandole un manotazo, al ver que intentaba bajarle volumen al radio- que hoy, es un dia para celebrar, al fin seremos una familia disfuncional en una pequeña cabaña.

Si si, ustedes los papitos y yo su niña- se reia a carcajadas la frijolita, yo la mire por el retrovisor y arranque de golpe el coche provocando que esta, se golpee la frente con el asiento.

Estuve dos horas manejando por carretera hasta que llegue a un camino de tierra que llevaba a la cabaña, hierro se habia quedado dormido, y altagracia miraba por la ventana revisando el perimetro y que nadie nos hubiera seguido o visto llegar.

Senti nauseas mientras conducia este bosque me daba mal rollo, parecia sacado de una puta pelicula de terror, a lo lejos pude ver la cabaña era vieja, tenia moho en el tejado y unos sillones afuera, estacione la furgo y me baje del coche tirando la puerta fuertemente detras mio para que hierro se despierte.

No me dijiste que viviriamos en la cabaña del demonio- dije mirando con asco la cabaña, altagracia me ignoro y llamo al dueño del lugar para decirle que ya estabamos instalados- buenos dias bella durmiente - mire a hierro que bostezaba.

El portazo que habia dado zulema me desperto de un susto, porque siempre tenia que ser tan tosca, las cosas entre nosotros no iban bien, cada vez nos alejabamos mas, bueno con esto de andar huyendo de hotel en hotel cada 3 noches por dos meses tampoco ayudaba, yo me sentia enfermo, inutil, triste, estaba enamorado de ella, y ella no lo estaba de mi, un escorpion enamorado de su presa, si claro.

Que es broma joder- me miro, esperando alguna respuesta de mi parte, no estaba de humor para sus bromitas ahora mismo- venga coño te ayudo a bajar las cosas.

Metimos todo en la cabaña, altagracia se habia quedado hablando con el dueño de este lugar.

Esta todo arreglado- dijo entrando, nos miro extrañada y se fue a alguno de los cuartos con su maleta en mano, eran cuatro cuartos pequeños, un matrimonial dos dormitorios normales y uno de huespedes.

Yo me quedo con el matrimonial- altagracia se tiro en la cama- que les pasa?- señalo a zulema que se habia ido con su maleta a otro dormitorio.

No se, estoy cansado mañana hablamos- le di un abrazo a la mexicana, en este tiempo nos habiamos echo cercanos, le habia agarrado cariño a la mexicana -que descanses.

Tu tambien- cerro su puerta y yo fui a escoger uno de los 2 cuartos que quedaban, entre a uno que tenia una ventana grande, y cortinas gruesas, coloque mi maleta en el suelo y me acoste en la cama, cerrando los ojos.

Hierro- dijo zulema desde la puerta, abri mis ojos, llevaba una camiseta larga hasta sus muslos, se sento en la cama y me miro fijamente- vaya cara traes - sonrio al verme, estaba rara.

Que quieres zulema- dije cerrando los ojos nuevamente, senti que se acostaba a mi lado y se metia debajo de las sabanas, abri mis ojos y me gire a mirarla extrañado.

ZULIERRODonde viven las historias. Descúbrelo ahora