La hija del merodeador

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Llegó mi esperado dos de mayo y me encontraba detrás de unos arbustos en el lago negro.

—Amato Animo Animato Animagus —susurro y bebo la poción

Siento un gran dolor en el pecho y sigo las instrucciones del libro "piensa en tu animal interior" eso hago y apoyo las manos en el suelo, poco a poco siento unos leves dolores en las articulaciones y cara, caigo al suelo y al levantarme ando a cuatro patas, al ser de noche y estar lloviendo como llueve no hay gente, ando hasta el lago y me asomo, por los rayos y la leve luz de la luna me veo reflejada.
Soy un perro negro, con las puntas de las patas blanco grisáceo, los truenos retumban en mis oidos así que me recuerdo de forma humana de nuevo para transformarme.

—¡LO CONSEGUÍ! —grito y me tapo la boca, aunque dudo que me hayan oído por los truenos

Vuelvo a la Sala Común y me siento un poco a mirar el fuego y pensar, oigo la puerta abrirse y luego risas y murmuros.

—¿Alba? —preguntan detrás mío

—Hola Weasleys, ¿venis de una broma? —pregunto y asienten

—¿Por qué estás empapada? —me pregunta Fred y se sientan a mis lados

—Nada, salí a dar un paseo y... —me vuelve a interrumpir

—Hay tormenta eléctrica Alba, ¿sabes lo que te podía haber pasado? —me pregunta Fred y ambos me miran preocupados

—Si, pero no es para tanto, solo me... Gusta pasear bajo la lluvia —los miro sonriendo

Nos quedamos hablando un rato hasta que George bosteza y se va.

—¿Tienes frío? —me pregunta Fred con tono preocupado y niego

—¿Enserio? —me pregunra

—Enserio Fred... —sonrío y el igual

—¿Vamos a dormir? —pregunta y asiento

—Hasta mañana Lupin —

—Hasta mañana Weasley —