La hija del merodeador

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—Bien, tengo otra idea, a la de tres voy a salir corriendo hacia el bosque de nuevo y tu corres todo lo rápido que puedas hasta la casa —dice y se levanta, tiro de su brazo y lo siento e nuevo

—No Fred, o volvemos a casa los dos juntos o ninguno —digo y me mira

—Alba, no quiero que te haga daño, por favor corre hasta dentro de la casa, yo ahora voy —se vuelve a levantar y lo vuelvo a sentrar

—Mira, no voy a dejar que te arriesgues y te haga algo para que yo llegue a la casa, además ya estás herido —digo y me levanto

—Alba, no me importa que me dañe, solo quiero que no te dañe a tí, eres mi amiga y no voy a dejar que te haga nada —lo miro y me agacho

—Por eso vamos a correr los dos a casa Fred —digo y el se levanta mirándome

—¿Qué vas a hacer? —pregunta y me quito el zapato, lo tiro todo lo lejos que puedo y veo al Occamy ir a por el, agarro a Fred de la mano y corremos

Entramos a la casa, nos apoyamos en la puerta y todos vienen corriendo, respiramos con normalidad y vemos a todos mirándonos y a Ron con Scabbers en brazos.

—¿Qué ha pasado? ¿Estáis bien los dos? —pregunta Molly y Fred asiente

—No, Fred está sangrando —digo y ando hasta el sofá

—¿Y tú zapato? —me pregunta George

—Hay un... Occamy fuera —digo y todos los adultos se alarman, Fred se sienta a mi lado y veo a Arthur llamando al ministerio

—Gracias... Por tirar el zapato —me dice mirándome y después su brazo

—Gracias a ti por querer arriesgarte por mí —digo y lo abrazo, el me lo devuelve con una mueca de dolor

—Fred tu brazo —digo apartandome y sonríe

Pov. Fred

—Fred tu brazo —dice

*Ha valido la pena* pienso y sonrío