MI CHOFER QUIERE SEDUCIRME | TAEKOOK

35.

Jungkook

¿Él acaba de decir que me ama?

-¿Q-qué?

- Que te amo, maldita sea – Entonces algunas lagrimitas comenzaron a caer de sus ojos. No puedo creer que esté llorando, no Kim Taehyung – y-yo me enamoré estúpidamente de un hombre, de ti... y cuando quise... cuando quise intentarlo, tú y Min Yoongi...

No...

- Señor Kim...

- Lo siento por confundirte. Pero ya no aguanto. No aguanto tenerte a mi lado sin poder besarte, no aguanto que duermas bajo mi techo y no sea en mi cama, junto a mi... odio que cada vez que intento alejarme de ti ocurra algo que me de una pequeña esperanza de tenerte conmigo y tú sólo ... tú sólo no lo ves, no ves mis sentimientos y te vas con ese idiota de Min Yoongi.

- Espera, Tae...

- Lo siento por tomar cualquier estúpido pretexto que se me presente para acercarme a ti, pero es que no hay otra forma, yo... du- duele mucho - cubrió su rostro con ambas manos y comenzó a sollozar.

Me vi atrapado por la sensación de "no se que carajos hacer ahora" y simplemente actúe de la manera que mi corazón dictó.

Lo abracé fuertemente, atrayendo su cabeza a mi hombro y acaricié suavemente su espalda.

- Lo siento, Tae. En serio, lo siento. Jamás pensé que llegarías a tener esos sentimientos por mi...

- ¿Por qué? - Preguntó tímido sin apartarse de mi agarre.

- Porque más de 30 veces te llevé a moteles con distintas chicas, para mi eras sólo un hetero curioso que decidió experimentar conmigo...

- Para mi jamás serías un experimento, Kook. Además, tú no parabas de seducirme - comentó entre sollozos.

Sonreí al escuchar eso. Jamás fue de esa manera, siempre al revés.

Él jefe seducía al chofer y lo escondía creando un escenario completamente opuesto.

Fui consiente del alivio que comencé a sentir luego de la confesión de Tae. Sus palabras aumentaron mi ritmo cardíaco y aquella molestia dulce nacía en mis entrañas.

Debo dejar de engañarme a mi mismo, así quizás deje de lastimar a otros.

- Tae, no mentiré diciendo que no me causas nada - comencé a decir aún abrazándolo - Es verdad que mi cuerpo reacciona a ti, pero no es sólo eso. Me gusta... estar contigo. Me gusta cuando me enseñas cosas, cuando me felicitas, cuando me animas a seguir adelante. Me gusta cuando te me quedas mirando y yo finjo que no me doy cuenta. Amo tener tu atención puesta en mi... lo amo tanto como amo estar atento a ti, a tus expresiones, la manera en que trabajas y resulelves todo. Lo amo tanto como odio cuando miras a otras personas. Me gustas...- Dije ya bajando el tono de mi voz. Decirlo en voz alta es mucho más vergonzoso y culposo que sólo pensarlo - pero...

Taehyung no me dejó terminar ya que se separó de mi.

- ¡Hasta que al fin admitiste que te gusto! - soltó con una sonrisa altanera. Esperen ¿Y sus lágrimas donde quedaron? - pensar que tuve que llegar a esto para que por fin lo confesaras. Tan testarudo~

Se acercó para besarme, pero me alejé.

- Espera un minuto, llorón fake - Fruncí mi ceño y crucé mis brazos- ¿Fueron lágrimas de cocodrilo?

- Claro que no, en serio salió agua de mis ojitos.

- Pero... ¿Y los sollozos? ¿Y ese llanto desesperado?