18.

10.7K 1.2K 812
                                    

Taehyung

Jungkook lleva una cara de querer ser tragado por la tierra y ser escupido en el otro lado del mundo mientras que el recién llegado mira la situación con una sonrisa en su rostro.

Yo sólo analizo la escena.

No es como si fuera la primera vez que estoy en medio de una situación asi. Recuerdo a la dulce Jane, una modelo europea con descendencia asiática, me la ligué en una noche y ambos terminamos rompiendo el catre en su casa, hasta que su esposo apareció...un lio ¿eh? Salir escapando por la ventana, mientras el desalmado me prometía cortarme el pene. En mi defensa, jamás supe que ella era casada, aunque tampoco era un motivo muy fuerte para hacerme de lado, que va. Aún estoy esperando que ese gorila me corte la polla, y de eso ya han pasado tres años.

Aunque en realidad esto si es distinto. De partida el paliducho no es esposo de Jungkook, ni siquiera es su novio. Segundo, soy su jefe, eso quiere decir que Kook debe hacerme caso...en resumen, el tal Yoongi está en desventaja.

- Hola, soy Min Yoongi – extendió su mano hacia mi – amigo de Jungkook. Ya que pareciera que él no dirá nada, supongo que debemos presentarnos nosotros mismos.

Este chico me está probando, es obvio, está analizando mi fiereza de macho alfa. Sostuve su mano y la estreché sonriendo.

- Soy Kim Taehyung, el je...-

- ¡Es mi casero! – intervino Jungkook de la nada.

- ¿Casero? – preguntamos juntos con Yoongi.

¿En serio dijo casero? Al menos pudo haber dicho amigo, crush, el hombre más sensual del mundo ¿O que tal jefe? Eso es lo que realmente soy después de todo. Joder, me siento ofendido.

- Sí...el señor Kim me deja quedarme en su casa...

- ¿Te deja quedarte? ¿Y tú le pagas con sexo? ¿Es tu Sugar Daddy o algo? – el tono de Yoongi era extremadamente divertido, no sé si está siendo sarcástico o habla en serio, pero el hecho de que me diga Sugar Daddy me hace sentir pedófilo y viejo. Y no es así.

- Claro que no, hyung – se sonrojó Jungkook.

- Tranquilo, que el sexo va porque él quiere, no por pagar una plaza en casa, bro.

- Tienes razón, sólo bromeaba, sé que Jungkook no se prestaría para eso, lo conozco más que a nadie en ese aspecto.

- ¡Yah, hyung!

- ¿Qué?

Mi mandíbula se tensó al escuchar al estúpido paliducho. Acaba de sacarme en cara que lo ha hecho con Jungkook, y probablemente muchas más veces que yo. Lo ha tenido entre sus brazos, bajo suyo, ha escuchado sus gemidos...joder.

- Jungkook, vámonos – ordené mientras me encaminaba a la puerta– vístete y vamos a casa.

Me siento amenazado, me siento inquieto ¿Por qué será?

Al no escuchar ningún ruido que me indicara que Jungkook se estaba moviendo, me volteé para mirarlo. Seguía de pie en el mismo sitio, no se había movido ni un centímetro y me miraba apenado.

- ¿Por qué no te has movido?

- Tae...yo...

- Tranquilo, casero. Déjalo aquí, yo lo llevo a casa luego.

- No. Jungkook vámonos.

Pero el simplemente no respondía, y nervioso comenzó a jugar con sus dedos. Su mirada me frustraba, delataba que quería quedarse...pero no quiero aceptarlo, no puedo. Él debe venir conmigo porque...tan solo hace 40 minutos atrás estábamos teniendo sexo...

MI CHOFER QUIERE SEDUCIRME | TAEKOOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora