Capítulo 69.
Manuel.
Lo que acabo de presenciar en el salón de clase entre Harry y victoria, me ha llenado de coraje. Tuve que hacer mi mayor esfuerzo por no tomar a Harry y molerlo a golpe. Salgo rápido para evitar que el enoja se apodere de mí.
Puedo notar que victoria también sale enojada y se dirige al elevador, pero este esta lleno y se dirige a si las escaleras. Me apresuro a seguirla y la tomo del brazo.
- Harry te dije que me dejes en paz.
- No soy Harry.
- Perdón profesor.
- Tu y yo, tenemos que hablar.
- Si, pero me puedes soltar el brazo.
Suelto su brazo y le pido que me siga a un salón que esta desocupada.
- Bueno, que quieres hablar conmigo.
- Porque te portaste de esa forma el sábado, que es lo que pasa con el mediquito ese, y por último Harry porque hizo eso.
- Primero que todo una pregunta a la vez, segundo no es un mediquito se llama Rodrigo y tercero Harry es un sin neurona que le gusta molestar.
- A y lo defiendes.
- Pues es mi amigo y no está para defenderse.
- Porque no comprendes que no soporto que alguien te toca y mucho menos estar lejos de ti. Te deseo como a nadie en el mundo.
La voy llevando hasta recostarla contra la pared y que solo quedan unos milímetros de distancia entre los dos. Me queda mirando fijamente con esos ojos café. Que me da ese impulso de corto la distancia que hay entre los dos y Darle ese beso que he anhelado todas estas semanas que no la he podido tener.
Victoria.
Manuel me tiene acorralada es una distancia muy diminuta la que nos separa, que puedo sentir su respiración acelerada y los latidos de su corazón. Lo quedo mirando fijamente, cuando de pronto corta toda distancia que nos separa y me da ese beso que he deseado hace mucho, es tan intenso que siento que se me va a ir la vida, sigo sincronizando mi beso y me aprisiona mas a la pared, tomando mis piernas y haciendo que las envuelva en sus caderas. Y en cuestión de segundo él está tratando de quitar, mi ropa que cubre mis senos y yo desabotonando su camisa.
Cuando de repente sentimos que la puerta se abre. Haciéndonos cobrar la cordura. Dios quiero que me trague la tierra.
Era una persona del servicio que venia hacerle aseo al aula de clase.
- Perdón yo regreso después.
- No espera. Victoria sal yo arreglo esto.
Me acomodo la ropa y mi cabello y salgo si mirar a el señor que viene hacer el aseo, estoy tan avergonzada como no pensé que estamos en la universidad, por suerte es el y no fue un profesor o el mismo decano. Victoria tienes que controlar esos impulsos cuando tengas a Manuel al frente y tan cerca. Dios ojalá pueda solucionar todo.
Con lo que acaba de pasar se me paso el hambre y voy 20 minutos tarde a clase. Pido permiso tomo mi asiento y solo me limito a escuchar la clase sin participar y solo pienso si Manuel arreglo todo con ese tipo. Y también en ese beso.
- Tierra, llamando a victoria.
- Hola mi amor, porque no viniste antes.
- Me toco hacer ir al banco. Que te pasa que estas en otro mundo
- Si te contara.
- Tengo todo el tiempo.
Le cuento a mi amigo Cristian lo que ha pasado y ese queda boquiabierta, y feliz porque arreglamos todo.
Manuel.
Victoria sale avergonzada y la entiendo. Y todo es mi culpa y esas ganas de poseerla cuando la tengo cerca. Soy adicto a ella, a sus besos, a todo lo que ella me transmite, estoy locamente enamorado de ella.
- Como te llamas.
- Camilo, profe, pero no se preocupe ya estoy acostumbrado a ver esto.
- No, pero ella es diferente a las demás.
- No se preocupe profe. Ya le dije estoy acostumbrado a ver, estas escenas entre alumnas y profesor.
- Te estoy diciendo que ella no es como las demás alumnas.
- Me puede soltar.
- Espero contar con tu discreción, porque si no hago que te corran de tu trabajo.
Lo suelto y le doy 100 mil pesos, para callar su discreción y salgo del lugar. Busco a victoria, pero seguro ya esta en clase. Le mando un mensaje.
- No te preocupes mi reina ya solucioné todo. quiero verte.
Minutos después me contesta el mensaje.
- Me viene el alma al cuerpo, y con respecto a verte igual, pero.
Contesto de inmediato.
- Pero, qué mi reina
- Tengo un compromiso con Angela.
- Angela la ves todos los días.
- Si, pero anoche le hice una broma y quiero reivindicarme con ella. Y le prometí una tarde de chicas.
- Mmmmm. ☹☹☹ ósea que prefieres a tu amiga que a tu novio
- Esto me suena a chantaje. Amor, ya me comprometí con mi amiga.
- Tranquila, yo te entiendo.
- Cuando llegue a mi casa te aviso y me visitas
- Ok, acepto con tal de verte.
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amor prohibido.
Novela JuvenilVictoria es una chica de 19 años. Que estudia leyes. Tranquilamente, hasta que llega su nuevo profesor. Y la hace comenzar una relación prohibida llena de lujuria, pasión y locura.