✅| Primer libro de la saga Demons completa.
Sinopsis
━─━──── ༺ ༻ ────━─━
"Tú sabes quién lo hizo. Eres consciente de mi muerte y serás el peón que se moverá primero a la hora de mi venganza".
En un mundo oscuro como el nuestro, nos es inevitable...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Es mentira. Todo lo que sale de su horrenda boca y mente son solo puras mentiras.
Porque es imposible que él sepa acerca de lo sucedido, ¿verdad?
No puedo evitar plantar la duda en mi cabeza, sé que no puedo creer en las palabras que suelta Austin, pero, aún así, la duda permanece en mí. Taladrando mi conciencia sin frenos ni compasión.
—Púdrete.
Enviado a las 8:32
Mando el mensaje; de inmediato, siento cómo unos ojos se clavan en mí. Austin me sonríe abiertamente; sentado con comodidad en su silla, abre la boca y dice algo en silencio. Remarcando demasiado las palabras con sus labios abiertos, se ve más estúpido de lo normal. Espérame, es lo que logro entender.
Sin evidenciar ninguna emoción, le muestro mi dedo del medio y de inmediato me volteo para prestarle atención a la clase. Mi cerebro martilla sin cesar y me obliga a dejar de lado la clase para poder prestarle atención al mensaje de Austin. Los músculos ya empiezan a dolerme de lo tensos que están, por más que encuentro una justificación, no me cierra la idea.
«Solo Adam y yo conocemos la inexistencia de Jeremy...».
Me recuerdo, pero de inmediato descarto esa idea, ya que hay dos personas más que lo saben, solo que ellos no se encuentran aquí.
El sonido de la campana invade mis oídos; sin esperar nada y con toda la velocidad que puedo tener, salgo de la clase. Camino con pasos rápidos por los pasillos e intento calmar mi corazón. No suelo ser tan emocional en público, pero ya siento mis ojos picar y mi pecho contraerse por el dolor. Pensar en Jeremy es una manera muy cruel de abrir todas mis heridas. Un suspiro tembloroso sale de mí mientras que pestañeo varias veces al notar una neblina en mis ojos.
Entro a la cafetería y busco a Isabella entre todas las personas. La encuentro sentada sola, lejos de los amigos de Caín, de Teo y del simio de Sofía. No muy extrañamente, veo cómo remueve su plato sin probar bocado. Decido ignorarla y volver a salir de la cafetería. No me siento de humor por sus miradas de cachorro.
Camino fuera del lugar, mi clase de gimnasia era la siguiente, necesitaba ir a preparar mi ropa deportiva y guardar mis libros. Siento que el tiempo pasa más rápido cuando estoy nerviosa y hoy mis nervios están en su máximo nivel.
—Te dije que me esperaras, Beth, eres pésima acatando órdenes, ¿te lo han dicho? —Austin aparece mágicamente a mi lado y pone mi estado emocional en alerta.
—Muchas veces. Adiós. —Apresuro mi paso intentando deshacerme de él. Ciertamente, una tarea imposible. Bufo con molestia al ver que apresura su paso.
—Ya que salimos a la misma hora, ¿te gustaría ir a tomar algo conmigo? —Me atrapa el brazo y me obliga a frenar mi paso—. Es tu día de suerte, yo que tú no lo desperdicio.
