Capítulo 36

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Jaelyne

Iba a seguir interrogando a Rebecca, pero nunca me esperé esto. Teniendo en cuenta que yo le aconsejé a Kael darle una oportunidad a ella ¿Por qué estoy enfadada? Sé que él me atrae, pero esto es absurdo.

Camino en círculos en frente de ese gran dragón rojo que me ama. Me detengo a mirarlo y hablarle, hasta parece que me entiende porque mueve la cabeza.

—¿Celosa? ¿Yo? —Miro al animal —¡Ni hablar! Kael puede hacer lo que quiera.

—Hablas con un dragón, veo —Visualizo a Fared venir —. Viendo que estamos en buenos términos, quería avisarte.

Cierto, le hice creer que confío en él.

—¿Qué sucede?

—Supe que te secuestraron del reino de los cielos, deberías saber que mandaron a verificar los acuerdos de paz, así que supongo que volveremos a ver a sus habitantes.

Espero que sea Askar.

—Gracias por advertirme —expreso sin una pizca de interés en el rostro —. La última vez me dijiste algo parecido, debería escucharte más —Finjo empatía con él.

Se ríe.

—No hay necesidad, siento que me porté muy descortés contigo. Al tratarse de la concubina de mi primo, no supe separar.

—¿A quién le importa Kael? —Ruedo los ojos recordando la escena entre Rebecca y él.

—Pero él te ayuda, ¿no?

—Pues sí —Hago puchero.

—¿Se pelearon?

—¿Acaso importa? —Alzo una ceja.

—A mí me interesa.

—¿Por qué? ¿Para refregárselo en su cara de idiota? —expreso enfadada y se carcajea.

—Sí qué estás enojada con él.

—No, no lo estoy —Miro hacia un costado.

—No me cuentes si no quieres. Es tu asunto, no tengo razón para inmiscuirme. Ya me retiro —Hace una reverencia a modo de saludo —. Si me necesitas, estaré en la sala principal, recibiendo a nuestros invitados del cielo.

—Te acompaño —digo directo.

Sonríe.

—Claro.

Belleza del Desierto #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora