Capítulo 31

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Kael

Después de una gran caminata con los camellos, detengo a mi animal y me bajo de este. Observo el collar de Jaelyne, el cual me entregó Rebecca, por lo que dijo es "transportador", sirve para guiarte a través de un lugar a otro, aunque este es pequeño en realidad.

—¿Qué significará todo esto? —expreso pensativo —Espero que Jaelyne se encuentre a salvo.

—Las runas que trajeron a la chica de cabellos dorados tienen la respuesta —opina Endek —. Pero no creo que sea esa ¿De verdad va a confiar en Rebecca?

—Rebecca sabe más de lo que dice pero... —Suspiro —se notó en su gesto la preocupación por Jaelyne —Lo observo directo a los ojos —¿Por qué no confiar?

—Porque es diferente.

—Jacky también lo es —Frunzo el ceño.

—Es un mal controlable.

—No me gustan tus acotaciones despectivas contra ellas.

—Soy su consejero, siempre voy a decirle lo negativo de sus relaciones o acciones, usted es el que elige si confiar en mi juicio o no.

—Pues creo que te equivocas.

—Como usted diga —Hace una reverencia, deja de inclinarse y me mira —¿Cómo funciona el collar?

—Rebecca dijo que la runa me llevará a donde debo si estoy en el lugar correcto —Alzo la vista mirando el cielo, este debería ser el punto exacto donde el reino flota sobre nosotros —¿Ves algo?

—No mucho —Baja la vista luego de contestarme —. Su alteza...

Observo a donde mira, el objeto brilla, así que sonrío.

—Eso era.

—Tenga cuidado —recomienda.

Asiento y noto a una velocidad descomunal como aparezco en otro sitio, es una sala grande, hay una pileta llena de sanguijuelas negras. Me sobresalto cuando veo una mano allí, la tomo y la saco rápido de ahí, al empujarla la veo, es Jaelyne. Los bichos se separan de ella, entonces se choca con mi torso. Alza la vista y me encuentro con sus ojos llenos de lágrimas, lo que me parte el corazón.

—Viniste por mí —confiesa con la voz temblorosa.

—Yo iría por ti a cualquier parte.

No responde a mi acotación, entonces me abraza y se queda temblando. Alzo la vista, entonces visualizo a una mujer en el nivel alto, nos observa con odio. Acto seguido llegan muchos guardias a detenerme. Toco mi espada y me preparo para lo que sea.

Belleza del Desierto #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora