Llegaron a un campamento al anochecer, en el lugar estaba parte del ejercito del Rey, esparcidos por todo el campo, algunos bebiendo, otros comiendo y algunos sólo se calentaban cerca de las fogatas. Yoongi no prestó mucha atención a ellos, simplemente dirigió al caballo a su tienda.Jimin por otro lado estaba realmente temeroso, más con la mirada curiosa de los hombres que se acercaron ante su llegada.
Al final del caminó había una gran tienda roja y supuso que estaría seguro en ese lugar, con Dahyun, pero el caballo en el que ella venía fue tomado de las riendas por un soldado y desviado del camino.
—¡Detente!— No pretendía gritar, pero no midió el volumen de su voz y tanto el hombre que había desviado a Dahyun como el propio Rey se detuvieron.—¿A dónde la llevas?
El soldado vio la espalda de su Rey y después puso la vista en el joven pelinegro. —La llevo con la servidumbre.
—Ella vino para estar conmigo.— Dijo, demasiado seguro de sus palabras que se sorprendió. —Para servirme a mí.
—Y así es joven pero…
—Cuando este contigo, ella no puede estar.— Fueron las únicas palabras que mencionó el Rey e hizo que el caballo volviese a caminar. Jimin le dio una última mirada a Dahyun y ella le sonrió de forma tranquila, entonces el hombre la dirigió hacia otra parte.
Park podría no saber con exactitud las intenciones del Rey Min, pero tampoco era tonto, sabía que no sólo sería un adorno.
Tuvo que bajarse solo del enorme animal porque el Rey simplemente entró a la tienda luego de tocar el piso y siendo un hombre que carecía de buena estatura prácticamente tuvo que saltar, no sabía si debía entrar, caminar hacia otra tienda o simplemente esperar órdenes como lo había hecho toda su vida.
—Príncipe Park. — Escuchó a sus espaldas y el corazón casi se le sale del pecho debido al susto, no había visto a nadie más cerca.—Oh, lamento haberlo asustado.
Jimin tragó en seco pero asintió, girándose para ver a la persona y gracias a las antorchas a los lados de la tienda pudo verlo bien. Un joven más o menos de la edad del Rey, tenía hombros anchos, cabello azabache y labios grandes.
—Le ofrezco una disculpa, no me he presentado.—Él hizo una reverencia y Jimin lo observó totalmente extrañado. —Mi nombre es Kim Seokjin, general del ejército del Rey.
Jimin ni siquiera pudo contestar porque el Rey salió de la tienda, con otra ropa y el pelinegro se agradeció mentalmente por no haber entrado, de lo contrario probablemente habría visto algo que no le gustaría ver.
—Dile a mis hombres que partiremos mañana al amanecer y que el reino Kim dejó de ser una amenaza para el norte.—Ordenó y el general asintió, hizo una reverencia hacia él y otra de nuevo hacia Jimin para después irse, Yoongi le murmuró.—Entra.
El joven pelinegro respiró hondo antes de entrar a la tienda, pero no sabía cómo actuar, ni que decir o incluso si debía hablar. ¿Cómo es que actuaban los Príncipes? Taehyung solía ser bastante amable y seguro de sí mismo, sus hermanos menores lo eran también pero a diferencia de Tae, ellos si lo trataban como un sirviente.
—Desnúdate.—Le ordenó, mientras dejaba en libertad su perfecto cabello rubio. Jimin tragó en seco y no se movió, entonces el Rey se giró para verlo y arqueó una ceja.—¿No escuchaste?
Jimin asintió pero evitando mirarlo a los ojos.—Lo escuché, Rey Min.
Yoongi prendió un incienso pero su mirada nunca abandonó el cuerpo del nervioso del que creía era un Príncipe, uno que ahora le pertenecía y le encantó el tono rosado que subió a sus mejillas. Park se deshizo de la parte de arriba y sus manos temblaron cuando tocaron la cintura del pantalón blanco.
—No voy a tomarte esta noche.— Yoongi se acercó con una prenda en sus manos y el mismo le bajo los pantalones, afortunadamente sus interiores se mantuvieron en su lugar.—Cuando lo haga vas a temblar, pero de placer.
Sus ojos se encontraron y Jimin se sonrojó aún más. Tomó la prenda que le fue ofrecida, era roja y suave, como la ropa que Taehyung usaba para dormir. Y joder, no había pasado ni siquiera un día y ya lo extrañaba.
—Ven a la cama.— Le dijo el mayor, mientras se hacía paso entre las mantas y poco pudo disfrutar de la vista porque el joven Príncipe se puso el camisón en tiempo record.
Park se armó de valor porque de el dependía el bienestar del reino Kim. Se dijo a sí mismo que debía ser fuerte y sacrificarse por lo que amaba.
Una vez metido en la cama, la mano del Rey fue directamente a su mentón e hizo que girará el rostro, ambos se miraron fijamente y al pelinegro se le aceleró el corazón, la cicatriz en su ojo lejos de verse desagradable, lo hacía verse más imponente y poderoso, resaltando la oscuridad de su mirada.
—Tu boca...— Susurró grave el rubio, acercándose.—Es mía.
Jimin retuvo la respiración unos segundos, sintió como sus labios eran tocados por otros y aunque Taehyung lo había besado una vez cuando eran más jóvenes, él no sabía exactamente qué debía hacer. Lentamente fue puesto sobre la superficie de la improvisada cama sobre el suelo del campo, su labio inferior fue mordido y no pudo evitar soltar un jadeo, uno que hizo que todo el cuerpo del Rey se tensara.
—Abre.— Ordenó, separándose un segundo y Jimin entreabio tímidamente sus esponjosos labios.—Y no te contengas.
Su boca fue tomada de nuevo, pero esta vez el pelinegro sintió una extraña calidez que se abrió paso hasta tocar su lengua y posteriormente entrelazarse, fue hasta ese momento que correspondió torpemente pero fue suficiente para hacer que el Rey se sintiese satisfecho, Jimin paso las manos por los hombros fuertes del rubio y en un movimiento inconsciente lo atrajo más, el beso se volvió más fuerte y ruidoso, haciendo que el frío que envolvía el ambiente se volviera nada.
Pero Yoongi se detuvo cuando fue prudente, dejando un último beso en aquellos labios color cereza, de lo contrario lo tomaría allí mismo y no era algo que quisiera. Nunca tomó a sus concubinas el primer día y Jimin no sería la excepción, pero resultaba bastante jodido que no fuese un hombre que besará a menudo, porque no era algo que le diera demasiada satisfacción pero los labios de ese Príncipe realmente lo habían tentando, tal vez sólo le daría una excepción.
Sólo una.
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heyyy.💗 espero les guste, voten y comenten.
¿ustedes si se desvelaron para esperar el fm yoonmin? yo no pude): pero adore sus selcas.
blue.
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The king of the north; yoonmin.
Fanfic❝Jimin era un fiel sirviente del reino bajo las montañas, admirado por la realeza debido a su belleza y tratado de una manera más amable por la misma razón. Tenía una amistad con el Príncipe Taehyung que creció con los años y cuando el Rey no se enc...