Aprender a Quererte!

Cap 85.

Narra Pilar

He discutido con mama y desde que
abandone mi casa no he podido dejar de pensar en eso, papa incluso ha mostrado enfado con ella y se que es duro para él porque me consta lo unidos que son, no quiero que por culpa mia suceda algo que los perjudique, pero no puedo creer que se atreviera a decírselo, es mas, por un momento crei que fue un simple comentario, pero con sus palabras me dejo en claro que ella lo hizo apropósito.
Me consta que Purre no es el chico perfecto, que esta lejos de serlo, pero
tampoco es como si se tratara del peor
chico con el que me ha visto.

Supongo que mama esta acostumbrada a novios como Lucas después de todo es la relación mas larga que he tenido y aun cuando tuve salida con chicos anteriores. todos absolutamente todos son diferentes a Purre, pero estoy cansada de eso, de buscar la perfección de seguir los pasos de mama y encontrar alguien como papa, ella tuvo suerte porque él es maravilloso, pero yo solo me he cruzado con tipos como Lucas o con personas que solo les importa las apariencias, no quiero seguir siendo así y no quiero alcanzar la perfección las cosas vacias no me interesan y realmente quisiera que ella haga un esfuerzo como lo esta haciendo papa y le de una oportunidad a Purre.
No soy la misma de antes y no me importa lo que pueda opinar los demás de nosotros, solo quiero estar con él y quiero que las personas que quiero puedan entenderlo.
Ahora estoy aqui, esperando que Purre me responda y con el corazón acelerado entonces no lo hace y me da pase para poder entrar.
Escucho que cierra la puerta y se gira hacia mí.
- Purre..yo. Empiezo y tengo sus ojos fijos en mi. - Lo siento, se que debí decírtelo, lo se, y tienes razón al decir que tuve miedo, es la verdad, pero no es cierto que di por hecho que tu no lo aceptarias, tal vez tenia la duda clavada en mi, pero yo realmente esperaba que aceptaras.. Intento tomar aire. - Realmente queria decirlo, cuando me entere fuiste la primera persona con la que quise compartir esto, porque eres él único que realmente esperaba que acepte.
- Pili..
Niega.
Siento mis ojos llenarse de lagrimas
- Y yo te amo, Purre. Intento controlar mis lagrimas, pero cada vez siento mi voz apagarse. -  Se que estas enojado ahora y que quizá no quieres verme, lo entiendo, pero yo solo necesitaba que me escucharas decirlo. Niego. - Tampoco es la forma como yo queria que te enterarás y esperaba decírtelo al finalizar el dia, pero supongo que aún tengo que luchar con mis miedos internos, quiero hacerlo y confio en ti, se que parece contradictorio lo que digo, pero yo lo hago y solo queria que lo escucharas de mí.
Siento mi garganta seca, me muerdo los lábios.
- Yo solo... Cierro los ojos. - Purre..yo..
Antes de poder continuar atrapa mi rostro entre sus manos y me besa tomándome desprevenida, mis manos se forman puños en su piel desnuda las lagrimas se derraman por mis mejillas cuando me doy cuenta de que no esta todo perdido, me dejo caer respondiendo a su beso mientras sus dedos se clavan en mi mejillas y abro la boca para recibir su lengua, dejo que encuentre la mia y el roce causa que mi cuerpo tiemble con intensidad.
Se aparta sin soltar mis mejillas.
- Lo se, bien, lo siento, princesa..
Un sollozo se escapa de mis labios.
Niego.
- No sigues enojado conmigo?
- Dios no, Pili, ahora mismo estaba punto de ir a buscarte.
Muerdo mi labio y una sonrisa se me
escapa.
- Si, ayer realmente estaba enojado, pero , joder, te amo demasiado como para que el enojo me venza y necesitaba tiempo para pensar, fueron demasiadas cosas y yo quería dec...
Sonrío y le rodeo el cuello antes de unir nuestros labios me sonríe a mitad del beso como siempre suele hacerlo y se rie chocando nuestras bocas nuevamente.
- Aún somos Pilurre?
Interrogo, para luego escucharlo reír.
- Esto te dice lo contrario?
Me pregunta elevando una ceja. Mi interrogante es respondida cuando mis pies dejan el suelo y me obliga a rodear su cintura con mis piernas.
- Te quiero , Pili.
Jadea, sus ojos llenos de deseo me queman.
Y que hay de malo con el sexo de
reconciliación? Quiero hacerlo y quiero sentirlo dentro de mi, duro y fuerte
Dios, desde cuando pienso asi?
Cuando creo que me llevara a la habitación, no lo hace y mi cuerpo cae sobre el mueble para luego sentir el suyo presionar el mio, su beso se vuelve posesivo, demandante y con desesperación mientras sus manos vagan y aprietan buscando cada parte de mi piel, Purre ya se encuentra en boxer y sigo preguntándome porque se encuentra vestido de esa forma cuando no esta lejos de ser las dos de la tarde, supongo que anoche no durmió mucho y lo intuyo por el sabor agridulce en sus labios, quizá estuvo con Facundo y Santiago, pero no quiero alargar esto con preguntas porque realmente necesito de él ahora.
Purre empuja su lengua en mi boca y tanto su peso, su aroma y sus besos me dan calor, siento cada vez mas intensa la humedad entre mis piernas y aprieto las caderas por un impulso logrando que el bulto escondido dentro de su boxer roce mi entrepierna y nos haga jadear a ambos.
- Mierda, princesa.
Gruñe y su tacto me persigue bajando cada vez mas hasta levantar mi falda y deslizar la mano debajo de la seda de mis bragas.
Gimo cuando rompe nuestro beso y se dedica a tocarme su mirada lleno de deseo me perfora y me pregunto si tengo esos mismos ojos llenos de excitación en este instante, no me importa y no necesito pensar en ello porque solo me dedico a disfrutarlo cuando continua acariciandome sus dedos me llenan y su boca se dirige a mi cuello repartiendo besos hasta llegar a mi oreja.
- Estas tan lista. mi amor. Murmura antes de llenarme con otro beso hambriento. - Joder, me pone mucho cada vez que te encuentro así.
El placer se triplica dentro de mi y estoy deseado sentirlo dentro quiero pedirle que lo haga porque el parece incluso mas desesperado que yo entonces solo me baja las bragas y continua desvistiendose hasta que finalmente estoy desnuda frente a el, vuelvo a encontrarme con su mirada, le sonrío, y Purre coloca ambas manos en cada lado del boxer hasta apartarse de él presiona su cuerpo sobre el mio una vez mas, comienza a depositar besos alrededor de mi ombligo y mi estomago se contrae, respiro con fuerza cuando comienza a subir y se que es lo que se propone, no lo detengo, sus dedos palpan levemente y muerdo mi labio deseado que continue, su boca no demora mucho en tomar uno de mis pechos, mordisquea y juguetea con los
pezones llevandome a un placer aun mayor, mi espalda se arquea y siento que mi columna desaparece, no se porque esta tardando tanto, pero tampoco puedo quejarme, estoy deseado que continue con esos movimientos, finalmente deja ir mis pechos y sus manos viajan hasta llegar a mi trasero, me atrae hacia él y su ereccion esta vez expuesta me rosa haciéndome jadear.
- Dios.. Purre.
- Lo se princesa, lo sé.
Me levanta las caderas y se acomoda, mis piernas reaccionan rodeandolo y se desliza dentro de mi llenándome de una, gimo y mis manos recorren su espalda sujetándome mientras comienza a penetrarme con vehemencia, muevo mis caderas recibiéndolo y un grunido se escapa de sus labios, una sensación maravillosa me atraviesa cuando se mueve con mas intensidad y el calor se impregna intensificándose en cada parte de mi cuerpo, solo me deleito de la sensación de sentirme llena y me dejo llevar uniendome a él hasta que encontramos una postura lo suficientemente placentera para los dos, una de sus manos viaja y se sostiene de los acolchados cojines y la otra se clava fuertemente en mi cadera para lograr mas friccion entre los dos no deja un solo espacio libre y se retira para empujar mas profundo golpeando sus caderas y meciéndose sobre mi.
Incluso hoy, se siente mas intenso que antes y tal vez sea por el lugar, es un jodido mueble, dios.
Me besa  duro y sus movimientos comienzan a bajar, entonces siento que el momento se acerca, bajo mis manos y aprieto los musculo de sus brazos el sudor de su frente me choca cuando la presiona frente a mi y solo dejo que el orgasmo me golpee con mucha fuerza
- Dios te amo tanto.
Dice con voz agitada.
Segundos despues lo siento venirse
dentro de mi y respirar con dificultad cerca de mI cuello, me percato que los musculo le sudan y no es el único todo mi cuerpo esta en llamas y también me cuesta un tiempo recuperar mi respiración, cuando finalmente ambos lo logramos Purre  se mueve despacio y se recuesta a mi lado rodeándome con los brazos.
- Lo sabia.
Susurra.
Me vuelvo hacia él con confusión. Sus manos acarician mis mejillas.
- El sexo. Responde mirándome a los ojos.- No hay forma que sea mas
maravilloso si no es contigo.
- Purre?
Él solo me sonríe con dulzura.
- Te amo, Pili.
- Ultimamente son muchos te amo.
- Preferirias que no fuera asi?
Me pregunta elevando una ceja, sonrió y niego, seguido presiono mi boca sobre la suya.
- Así es perfecto.

Lo es, realmente es.

~*.

- Como es posible extrañar tanto a
alguien despues de un dia?
Pregunto mientras tengo mi cabeza
recostada sobre su pecho.
Se la respuesta, pero solo senti que
debía decirlo.
Aún estamos en el mueble, senti frio y Purre se levanto a traer un par de cobijas y algunas sabanas, también junto los demas muebles uniendolo a los demas y es donde estamos ahora convirtió todo en una cama y solo decirlo me hace reir, ahora estamos aqui mientras el acaricia mi cabello con sus manos.  
- Oh dios, eso es muy cursi.
Digo y me levanto a observarlo.
Me mira con ternura.
Muerdo mi labio y dejo las sabanas de lado y sin importarme subo encima
presionando mis piernas en su regazo
me mira sin rastro de burla y es extraño, la verdad es que él esta muy extraño hoy aunque no le doy mucha importancia a eso, Purre coloca ambas manos en mi mejillas y yo le rodeo el cuello con los brazos antes de presionar mi boca con la suya.
Tira de mi labio y sonrie antes de bajar las manos por mi espalda desnuda y presionar mas nuestros cuerpos, me rio y él también lo hace.
Se separa para mirarme.
- Ahora ya lo sabes.
Me responde contestando mi pregunta anterior.
Vuelvo a unir nuestras bocas.
- Realmente te extrañe, Purre. Susurro sobre su boca. - Por un momento creí que..
- Shh. Me detiene - Ahora estamos juntos, no?
Asiento y vuelvo a besarlo, podria pasarme todo el dia besando a Purre y aun terminando con los labios rojos
y hinchados, ni así dejaría de besarlo. Me acomodo mejor buscando una postura mas comoda y gimo en sus labios, escucho un gruñido de parte y sonrío a mitad del beso antes de bajar mis manos por su espalda.  Paso los dedos por las marcas en su espalda.
Siento el cuerpo de Purre tensarse
repentinamente y tal vez es por el dolor que estoy ocasionandole al tocarlo ahi, pero nunca crei que mis uñas podían dejar esas marcas.
- Creo que necesitare cortar mis unas.
- No lo hagas. Detiene mi mano y la lleva a sus labios, besa mis nudillos y sus ojos me observan. - Me gusta que lo ha hagas, las marcas que me dejas son las unicas que quiero tener en mi cuerpo.
Una sonrisa se cruza por mis labios.
- Esa es una clase de permiso para que yo también permita que lo hagas?
- Dejaras que lo haga, princesita?
- No lo se..
Sonríe.
- Te amo, Pili. Pronuncia mirándome, traga duro sin apartar esa mirada de mi. - Jamas olvides.
- Lo se, tonto. Mi boca presiona la suya y me rodea con el brazo atrayéndome mas hacia él. - Yo también te amo.
Siento sus manos en mi rostro.
Muerdo mi labio.
- Estaba pensando.. Me mira con confusión. - En la respuesta que llego dice que debo ir la primera semana de noviembre.
Eleva una ceja.
- Eso es la semana que viene.
Es increible lo rápido que pasa el tiempo.
- Si y mama y papa estarán ocupados. Continuo y sigue confundido. - Estaba pensando en que puedes ir conmigo. Trago duro antes de atreverme a descubrir su reacción.  - Ir a ver la universidad, los dos.
- Quieres que vaya contigo?
- Si puedes aguantar horas de viaje. Sonrío. - Si, quiero que vayas conmigo, Purre, antes de...
Frunce el ceño.
- Antes de que pueda tomar una decisión.
Continuo.
Él guarda silencio.
- Ire contigo.  Suspira. - Y cualquier decisión que tomes estará bien para mi, la aceptare.
Mis ojos se abren más.
- De verdad?
- Lo hare, princesa.
Alarga su sonrisa.
- Ademas, solo debo llenar mis maletas y seguirte, no?

Mis ojos se llenan de lagrimas y lo único que hago es rodearlo con los brazos y repetir muchas veces "Gracias", pero no solo a él, sino a quien sea que haya colocado a Purre en vida.