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Narra Pilar
- Creo que estamos embarazados. De acuerdo no es la manera correcta de confesarle a tu novio que quizás estés embarazada, menos cuando esta comiendo. - Que? Los ojos de Purre parpadean, sus ojos muestran confusión. Muerdo mi labio. - Tengo un retraso. Respondo y alargo mi sonrisa. - Creo que estoy embarazada. - Princesa. Parpadea repetidas veces.- Que? - Creo que estoy embarazada, Purre. Una debil sonrisa crece en sus labios. - Pili, estas.. Traga despacio mientras mira mis ojos. - Estas segura? - Tengo los sintomas, así que. Me encojo de hombros y sonrío. - Creo que si, aunque para estar seguros tal vez debamos ir con un doctor, pero. Alargo mi sonrisa. Esta sin palabras y solo me sonríe. - Se que quizá se adelanto, pero.. - No importa. Sus manos acarician las mias. - Estoy feliz! En el transcurso hasta el hospital estoy nerviosa. - Tranquila. Purre aprieta mi mano.-Saldrá todo bien. Le sonrío y asiento, enseguida sale una enfermera a los pasillos y me pide acompañarla mientras mantiene la puerta del consultorio abierta. - Ya regreso. - Estaré aqui, amor.
Y su sonrisa llena de ilusion es lo ultimo que veo antes de que las puertas se cierren.
~*.
- No estoy embarazada? Pregunto confundida y con la decepción cayendo en picada, el doctor niega. - No, creo que fue una falsa alarma. Se dirige a Purre. - Esas cosas suelen ocurrir. - Pero.. y los sintomas? - Es posible que descuidaras tus hábitos alimenticios. O quizás algo me cayo mal, dios, soy una idiota. El doctor se dirige a mi.- Me alegra que viniera a asegurarse en lugar de dar por hecho algo. Genial, con solo esas palabras ha logrado que me sienta mal. - Pero no se preocupen, son jóvenes, habrá más oportunidades. Lo siguiente que escucho son algunas recomendaciones del medico, pero ya no presto atención, cuando Purre y yo salimos del consultorio el doctor me pide quedarme unos minutos para recomendarme un nutricionista le pido a Purre que me espere en la sala de espera y al salir me doy con la sorpresa de que no esta, llamo a su numero y al escuchar su timbre noto que esta cerca, camino doblado unos pasillos hasta dar con él y si, grande fue mi sorpresa antes mas lo fue cuando lo encontre junto a la ventana de recen nacidos observando a los bebes. Entonces me senti peor que antes mas culpable y con muchas ganas de llorar, que tuve que tragármelas. - Hola.. Pronuncio cuando me detengo junto a él. Me regala una calida sonrisa. - Terminaste? Solo asiento. Nos dirigimos a afueras del hospital en el transcurso que caminamos por los pasillos no logro despejar mi mente mientras cada vez me siento mas culpable, ni siquiera se que decir después de esto, yo realmente pense que estaba embarazada. Eres una estupida, Pilar. Al salir del hospital, Purre saca las llaves de su bolsillo delantero y camina hacia el coche mientras yo me quedo arriba de los escalones observándolo, Purre no luce enojado ni con alguna expresion que se le parezca, esta tranquilo, sin embargo, no puedo quitarme de la cabeza la expresión que tenia en su rostro cuando lo vi frente a la sala de recién nacidos. Purre se detiene al darse cuenta que no lo sigo y regresa a mi lado. - Ocurre algo, princesa? Entonces solo lo digo porque ademas de sentirme mal, quedamos en que no habria mas secretos. - Estas decepcionado? Parpadea registrando mi pregunta. - Que? Una sonrisa de lado aparece. Bajo los escalones hasta llegar casi a su altura. - Decepcionado. Repito. - Estas decepcionado de mi? - Pilar.. Niega con una sonrisa de lado Me estoy aguantando las ganas de llorar, de verdad no queria ilusionarlo, solo me deje llevar con las pocas pruebas que creia tener, cometí el error al decirlo tan apresuradamente. Me siento tan culpable por lograr que se sienta mal. - Te vi, Purre, vi como mirabas a los bebes en la sala... yo.. Bajo la mirada. Sus manos no tardan en sujetar mis mejillas, obligandome a mirarlo. - De acuerdo, ahora estas actuando como una tonta. Por primera vez no tengo objeciones a ese apelativo hoy me comporte como toda una tonta sin medir las consecuencias, estuve tan emocionada por creer que era verdad que solo lo ilusione. - Lo siento, Purre...yo.. Sus manos jalan de mis mejillas. - Ouch! Me quejo. - No estoy decepcionado de ti, princesita, cometiste un error, le pasa a cualquiera. Me dice, pero no suena muy honesto - Purre.. - Deberíamos ir a casa.
Solo acepto porque no se que mas que hacer.
~*.
Purre no dice nada hasta que llegamos a casa, solo me da un beso en la frente antes de dirigirse a tomar una ducha mientras yo me recuesto dentro de la cama, es tarde y a sido un dia horrible, solo quiero dormir, pero por mas que quiera no puedo cuando mis pensamientos comienzan a atacar mi cabeza, estoy decepcionada de mi misma, tengo ganas de llorar y aunque me aguante aún asi dejo que las lagrimas caigan, pasan unos minutos antes de que lo escuche cerrar la llave de la ducha me apresuro en limpiar cada rastro de lagrimas y pienso en la opción de hacerme la dormida, pero lo descarto cuando el me toma desprevenida al sentir su lado de la cama hundirse. - Estas despierta? Besa el lóbulo de mi oreja. Muevo la cabeza como respuesta. Al no escucharme, toma de mi brazo y me gira para poder encontrarme con su rostro, sus ojos avellanas me observan. - Que sucede? Pregunta y acerca sus manos a las esquinas de mi ojos.- Estas llorando. - No estoy llorando, solo estoy decepcionada de mi. Admito. - Pilar.. - Debí hacerme una prueba y no ilusionarte como lo hice, de verdad, lo siento tanto. Me muerdo el labio para evitar llorar y enseguida siento sus labios sobre los mios. - Lo haremos juntos, está bien? Dice y se aparta para mirarme. - Solo ha sido un pequeño error. - Sigues enojado conmigo? Quizás él penso que me había convencido con esa respuesta y que no estaba enojado, pero al hacer esta pregunta noto en su rostro que lo entiende y por eso opta por decirme la verdad. - No, ya no...en realidad nunca lo estuve, solo.. - Te decepcione. Guarda silencio mientras me observa. - Me decepcione yo mismo, lo haremos juntos la proxima vez, de acuerdo? Asiento y sus brazos me rodean. - Ya no llores amor, esta bien? Le rodeo la espalda desnuda con mis brazos y lo aprieto en un abrazo. - Tal vez no era el momento, es todo.. pero, si.. Sus ojos me observan.- Si te sigues sintiendo mal por eso aún podemos solucionarlo ahora. Entiendo muy bien esas palabras. - Ahora? - Porque no? Su sonrisa se alarga. - Hagamos un bebe - Ahora? Vuelvo a preguntar. - Si, ahora. Muerdo mi labio y me mantengo mirando sus ojos no se cuanto tiempo me mantengo en silencio, pero es largo. - Tal vez tienes razón. Finalmente digo.- Es muy pronto para adelantarse. Purre me sonrie como respuesta y yo por fin lo he entendido, parece que el hizo todo esto para que yo entendiera. - Lo ves, princesita. Sí, quizás todavia es pronto para traer al primer príncipe de nuestras vidas, aún sigo en la universidad y primero debemos casamos, también tenemos muchas cosas que hacer como el de dar ese paso y instalarnos oficialmente en la que sera nuestra casa. Si, hay muchas cosas para hacer. - Si, lo se Vuelve a apartar las lagrimas de mis ojos. - Me alegra, pero.. Elevo una ceja. - Pero? - Pero si necesito follarte ahora mismo. - Que? Sonrío. - El baño no te ayudo para nada? Niega con una mueca. - Si, pero esta posición no ayuda. Siento su ereccion en mi cadena y me sonrojo. - Oh.. - Eso es un si? Pregunta ilusionado. - Si, es un si. Me toma la palabra y comienza a desvestirme.
A la mañana siguiente el sonido del timbre me despierta, soy la primera en abrir los ojos mientras Purre los mantiene cerrados quejandose, no es hasta que tocan cinco veces mas que sus ojos se abren y se mueve incomodo en la cama. - Quien coño toca tan fuerte? Mientras el se queja yo espero que no sea nada grave, me levanto y recuerdo que estoy desnuda asi que solo estro mi mano hacia la primera ropa que alcance doy con una camiseta de Purre y no dudo en colocármela antes de salir de la habitación. Vuelven a tocar el timbre. - Piedad, es domingo! Se queja mi novio haciéndome reír, se cubre con la almohada y yo salgo de la habitación. Vuelven a tocar otra vez y estoy empezando a preocuparme. - Ya voy. Finalmente dejan de tocar y la sorpresa cae como un balde de agua fria cuando abro la puerta, lo primero que veo son los ojos furioso de mi padre y luego me doy cuenta que solo traigo una camiseta encima. - Pilar. Trago despacio. - Papa. Me dirijo a mama, ella no luce enojada. - Que están haciendo aqui? - Pilar, cariño, tienes que darme muchas explicaciones, Señorita. Me dice papa. - Ahora donde esta tu novio? - Que? Papa.. - Yo voy a buscarlo. Papa entra sin avisar y temo por la seguridad de Purre, me vuelvo hacia mama en busca de respuestas. - Renata me llamo. Y solo eso necesito para saber que esta pasando aquí, Renata no puede mantener la boca cerrada. Por dios! - Pilar, por algo te di los condones. Condones? Papa? Renata, juro que voy a matarte. - No, yo..es un malentendido.
Me mira como si no me creyera, entonces cabo en cuenta de lo que puede pasar.
