Capítulo 16

2.4K 175 20
                                    

- Hola, Andy. -Lo saludé, tan pronto como llegué al mostrador de recepción del edificio a las tres de la tarde.

- Hola Juliana. -Respondió vagamente, concentrándose en sus palabras cruzadas. - Su tía le pidió que subiera pronto, parece que tiene un poco de prisa hoy.

- Ah... OK. -Grité, conteniendo una sonrisa mientras le daba la espalda a Andy y caminaba hacia las escaleras. Nunca me acostumbraría al falso status de sobrina de Esmeralda. Comencé a subir los escalones rápidamente, oyendo algunos ruidos de llaves y trancas, y ni siquiera llegué al primer piso cuando Esmeralda ya estaba a mi lado, arreglando apresuradamente una mochila en la espalda.

- Puntual. - se burló, dándome un beso rápido y luego tirándome de vuelta a la planta baja. Incluso estando totalmente confundida con su prisa, me dejé llevar por su mano, cuyos dedos estaban entrelazados en los míos antes de que me diera cuenta.

- ¿Por qué tanta prisa? -Le pregunté, frunciendo el ceño, y Esmeralda rodó los ojos, como si la respuesta fuera obvia.

- Todo el tiempo que tengo contigo este fin de semana está cronometrado. -Explicó bajito, mientras llegábamos a la planta baja. - Quiero aprovechar al máximo cada minuto.

Esmeralda me sonrió, entusiasmada, y luego vi su sonrisa reflejada en mi cara involuntariamente. Esa sonrisa tenía poderes sobrenaturales, siempre lo supe.

Pasamos rápidamente por Andy, que nos saludó con un movimiento distraído de cabeza, y luego llegamos al auto. Dejamos nuestras mochilas en el asiento trasero y con la misma prisa de antes, entramos al vehículo, que no tardó en arrancar. Esmeralda aún tenía una sonrisa, aún más grande que el anterior, y me estaba empezando a poner ansiosa de verdad. ¿Qué estaba planeando?

- Está es la última oportunidad para que acabes con mi ansiedad y me cuentes a dónde vamos. - suspiré lentamente, después de unos metros recorridos en silencio. Ella levantó una ceja, sin mirarme, y una sonrisita comenzó a pronunciarse en sus labios. Parecía que mi poder de persuasión no adelantaría nada. – De acuerdo. - volví a hablar, cuando vi que no respondería. - Este viaje podría ser más... Divertido, pero ya que no cooperas... No haremos nada.

Esmeralda amplió su sonrisa divertida, negando con la cabeza en un falso tono de desaprobación.

- ¿Entonces es así que crees que me vas a convencer? - preguntó, finalmente mirándome de una manera coqueta. - ¿Crees que no he venido preparada para resistir a tus chantajes?

Confieso que con aquella mirada me dejó un poco fuera de lugar. Ya me había mirado varias veces de esa manera. Pero en ninguna de las otras veces, los ojos que vi en ella parecían pertenecer a otra persona como en aquel momento. Sentí que mi cuerpo se estremeció entero, a pesar de mi resistencia.

- Te odio. - rodé los ojos lo más aburrida que pude, me encogí en el asiento del carro y haciendo reír a Esmeralda. Siempre se reía de todo lo que hacía, factor que siempre usaba como ventaja en momentos en los que necesitaba disimular algo.

Continuamos nuestro viaje, hablando de vez en cuando, tarareando las canciones reproducidas en la radio y hacer las cosas agradables que se pueden hacer en un coche (nada de esas cosas que deben de estar pensando). Sabía que estábamos en Miami, pero como desconocía los caminos hacia las otras ciudades, incluso las más cercanas, ni traté de localizarme. Por el contrario, después de una hora riendo como una loca de las tonterías que Esmeralda hablaba, acabé quedando medio somnolienta y me quedé dormida. Me desperté alrededor de una hora después, cuando el sol ya empezaba a desaparecer en el este.

MY BIOLOGY 1 Y 2 (Adaptación Juliantina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora