- ¡Me vas a decir todo! -Exclamé, tan pronto como puse mis ojos en Deborah en la mañana del lunes. Su sonrisa de oreja a oreja denunciaban que las cosas con David excedieron expectativas, lo que sólo me rasgaba mi cara en una sonrisa igual o incluso mayor que la suya.
- Claro que lo haré, ¿crees que aguante guardar todo sólo para mí? - se rio, abrazándome cuando llegué cerca de ella. - ¡Creo que nunca estuve tan feliz!
- ¡Cómo es bueno oír eso! - sonreí sincera, correspondiendo su abrazo. - Sé muy bien cuán molestos ustedes se quedaron cuando tuvieron que separarse.
- ¡Qué no va a suceder de nuevo tan pronto! - dijo, deshaciendo el abrazo y mirándome con una enorme sonrisa. - Él me dijo que su familia va a volver a Miami, parece que necesitan más de su padre en la sucursal de aquí, por ser mucho mayor que la de NY y todo lo demás... Resumiendo, todo volverá a ser como era antes!
- Entonces vuelve, ¿es eso? - pregunté, antes de celebrar y ella asintió, apenas consiguiendo sostener el tamaño de felicidad.
- ¡Él incluso va a pasar aquí hoy a la salida para llevarme a conocer su apartamento nuevo! - Deborah gritó, cuando la abracé otra vez. - Y dijo que se está muriendo de nostalgia de ti también.
- ¡Ah, qué bueno que el bandido no se olvidó de mí! - me reí, alejándome y recibiendo un pellizco de ella, pero luego mi sonrisa se deshizo cuando mis ojos encontraron un abrigo verde musgo llegando a la escuela. Mi corazón se aceleró dentro del pecho, mi estómago se retorció de nervios, mi respiración falló, todo al mismo tiempo. Además de todos aquellos sentimientos que su llamada me causó la noche pasada, volviendo con el triple de intensidad, había otro pulsando con ellos. Mucha nostalgia.
- Por lo visto, ella ya volvió a la normalidad. - Deborah comentó, acompañándola con la mirada también conforme se acercaba cada vez más. -Es decir, por lo menos ya no está más rosa.
- Sí. -Respondí vagamente, sonriendo tan pronto como los ojos castaños de ella encontraron los míos, y me contuve mucho para no correr hacia ella y enterrarme en su abrazo. Probablemente, para llorar hasta deshidratarme, si pudiera.
- Muy buen día, chicas! - Esmeralda dijo, pasando por nosotras y extendiendo aún más su sonrisa al acercarse. - ¿Te veo en el descanso, Valdés?
- Claro. - murmuré, sonriendo débilmente, y ella asistió discretamente antes de entrar en el edificio.
- Pervertidas. - Deborah se rio, y no le di un golpe en el brazo porque estaba demasiado perturbada. - Están intercambiando sus miraditas delante de mí.
Suspiré, luchando para volver a mi estado controlado, y tragué toda la marea de sentimientos que me había llenado.
- Cállate. - dije, fingiendo indiferencia y pensando en cualquier cosa para cambiar de asunto. - ¿Quieres que mencione el día en que ayude a David a cumplir su fantasía de Beyoncé para conmemorar los dos años de noviazgo?
Ella siempre se quedaba morada de vergüenza y desistió inmediatamente de burlarse de mí cada vez que hablaba de ese hecho. Y fue precisamente por eso que lo dije.
- ¡Idiota! - una voz enfurecida gritó, venida de la sala de los profesores, y nos volvimos rápidamente, así como el resto de los alumnos en el patio, para ver lo que estaba pasando. No sé por qué me sorprendió ver a Lucho golpeando con su mochila a Valentina, y siguiendo a medida que caminaba tranquilamente hasta la entrada del bloque, pareciendo ajena a cualquier agresión. - Me las vas a pagar por esto, ¿escuchaste bien? - él se rompió, rojo de rabia y con los ojos a punto de saltar de sus órbitas. - Voy a hacer que te arrepentirás de haber nacido, ¡imbécil! ¡Te odio! ¡No me gustas!
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MY BIOLOGY 1 Y 2 (Adaptación Juliantina)
Teen Fiction¿Qué haces cuando te vez envuelta con tu profesora de biología, pero te sientes terriblemente atraída por tu insoportable profesora de laboratorio?. Juliana no esperaba los cambios de su último año en el colegio y ni que sus pensamientos serían tom...