Árbol de navidad

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Harry se sentía mal, ya que Blake se había ido y no sabía si se encontraba bien; por lo que vió, su padre no le daba importancia a su hija y estaba cegado por el amor a esa mujer, Alana.
Estaba por salir de su recamara e ir con Sirius al despacho, cuando entra una pequeña lechuza negra despeinada con un sobre en el pico.
Harry tomó el sobre y con mucho cuidado, decidió abrirlo y ver que contenía en su interior.

Harry...:)
En caso de que te preguntes ¿donde rayos esta Blake? Estoy bien, de hecho,  me estoy divirtiendo bastante, mi abuela se ofreció a cuidarme, esta muy enojada con mi padre y la bruja de Alana, ya que le conté lo que me hizo h espero que me deje ir a Grimnauld Place pronto, per tal vez no para navidad. Espero que estes bien y que no e diga nada el inútil de Ron.
Después de que nos fuimos, me aseguré de darle los caramelos de Fred y George, se puso ¡horrible! Pero de milagro no me hecho la culpa mi padre a mi, ya que decía Vogue en vez de Sortilegios Weasley, fue divertidísimo. Estaba tan enojada que no se los di en navidad, pero la otra mitad dejare debajo del árbol para que la tonta de mi "prima" Rose, piense que son de Santa Claus y se los coma todos.  Pasa una feliz navidad Harry, incluso sin mi (como si me extrañaras) solo bromeo, nos vemos pronto.
Blake :) P.D: revisa debajo de tu cama <:

Harry solo sonrió al ver la carta y quizo escribirle de vuelta, pero Fred y George entran molestos.
–¿Qué ocurre?
–La perfecta llegó–dijo Fred.
–¿Cómo?
–Ajá, creo que será una navidad muy interesante ¿verdad Harry?–dijo George burlón.
–Pero...
–¡Harry que bueno verte!–exclamó Hermione entrando y sentándose en la cama de Harry.
Harry no le dijo nada y Hermione se hizo la ofendida.
–Por Merlín, Harry, te he saludado.
–¿Y?
–Tienes que...
–Aquí no es Hogwarts Hermione, no me puedes decir que hacer–dijo Harry.
Hermione se levanto indignada y luego se fue dando un portazo.
–Se cree que manda en todos lados por ser la perfecta de Gryffindor–dice George.
Harry sonríe burlón y luego toma el pergamino.
–¿Blake?
–Ajá.
–¿Le pasó algo?–preguntó Fred.
–No.
–Que bueno, esa señora era una bruja-dijo Fred con alivio.
Harry sonríe y toma la pluma y comienza a escribir:

Blake:
Que bueno que estes bien, estábamos preocupados por ti, Remus pensó en ir por ti varias veces, de hecho lo iba a hacer, pero la señora Weasley dijo que mejor no. Hubieras visto a Sirius, estaba muy enojado de que la bruja de Alana te tratara de esa manera.
¿Segura que estas bien?
Hermione acaba de llegar, justo antes de que te escribiera esta carta, llegó y piensa que puede controlar todo como siempre como si fuera Hogwarts, pero es obvio que no. Así que tendré una navidad bastante solitaria. Espero vernos pronto.
;) Harry.

Cerró la carta y se la entregó a la lechuza quién salió volando de inmediato al tenerla en su pico.
Harry tomo aire y luego bajo a ver a Sirius que estaba muy raro, más de lo normal.
Al llegar a du despacho, entró y en verdad que Sirius tenía algo, estaba con la cabeza en un libro y veía una foto muy atentamente.
–¿Sirius?
–¡Harry! Vaya ¿eres fantasma o qué?
–No, pero...
–Estoy bien muchacho, tu tranquilo–responde Sirius.
–¿Que hacías?
–Nada, solo estaba viendo algunas fotos, no tengo nada que hacer y ya sabes que ¡odio estar encerrado!
–En el mundo muggle hay abogados ¿en el mágico no? Digo, uno podría pelear para que se demuestre tu inocencia–dijo Harry–. No cometiste nada de eso.
–¡Uf! La verdad aquí las cosas son diferentes, necesito pruebas y la rata se escapó.
–Es verdad, pero aún así, debe haber algo que se pueda hacer ¿que hiciste ese día, Sirius? ¿Donde estabas?
–Ay Harry, ya no tiene caso,
–¡Sí tiene! No es justo que estes aquí encerrado–dijo Harry molesto.
Sirius tenía que intentarlo.
Su padrino parecía pensarlo por unos segundos y luego, con una pesadez en la voz, respondió:
–Estaba con Madeline y bebe Blake.
–¿Qué?
–Dario estaba por llegar del trabajo, yo estaba nervioso por Lily y James y le hice una visita a Dario, en lo que esperaba, platicaba un rato con Madeline.
–¡Ahí esta la prueba Sirius!
–Harry, creen que mate a la estúpida rata–dijo derrotado.
–Pero podemos probar que no es así. Dumbledore tiene un pensadero, con eso ve sus recuerdos y si logramos volver a ese momento...puede que ahí se vea que no "mataste" a colagusano–dijo Harry pensando como un verdadero abogado del mundo mágico.
–Puede funcionar, pero me fui a emborrachar después de estar ahí y fue cuando todos los aurores llegaron a encarcelarme–dijo Sirius–, ya había recibido la noticia, por parte de Dario que Lily y James habían muerto.
–¿Sin pruebas? ¿Así nada mas te enviaron a Azkaban?
–Sí, porque en sus mentes había la prueba suficiente de que yo había hecho todo eso y no se molestaron en preguntar, no, no, son gente muy tonta Harry–dijo Sirius–. Dario no quiere por miedo a perder su carrera y...ella ya no está, Blake no tiene memoria de ese día, entonces estoy perdido Harry. Mi destino en vivir encerrado toda mi vida.
–No es cierto, Sirius, ya veras que todo se puede lograr. La verdad pronto saldrá a la luz–dijo Harry.

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