Amor con Odio

Capítulo 8-El secreto desvelado

-Lo que te voy a decir no va a ser... Agradable- me dijo Hugo.

Me acomodé en el sofá poniendo mi cabeza en su hombro.

-Te escucho- le dije cogiéndole la mano.

-Veras...

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(Flash back de Hugo)

Iba ya por la tarde noche camino a casa ,me había distraido ya que salí un poco más tarde de las clases particulares. Fui corriendo a casa cuando encontré todas las luces apagadas.

-Mm ,que raro ,aún no es hora de dormir ,¿Por qué no hay luz?

Entré a casa y me quité los zapatos dejando también la cartera en la entrada.

-¿Mamá?-no respondió.

-¿Papá?- tampoco respondió.

-¿Hermano?-pregunté ya preocupado pero este si respondió flojo arriba.

Subí las escaleras corriendo y encontré sangre por el pasillo.

-¿Qué...?- me paré al ver a mi hermano Eric tirado en el suelo sangrando por la cabeza y sobre todo por la pierna-¡Eric!

Me acerqué y me agaché junto a él ,había perdido mucha sangre y ya casi no tenía fuerzas ni para hablar.

-Hugo...

-Eric ¿Qué ha pasado?- dije llorando.

-Hugo ten- me dejo en la mano su collar de una llama de fuego- siempre estaré contigo...

-Eric... no...

-Hugo ,no te fies de nadie- empezó a toser sangre- no te fies de el traidor que ha hecho esto...

De repente dejó de toser y... de respirar. Cuando me di cuenta lo abracé y me eché a llorar. Recapacité en las palabras de mi hermano mayor de 8 años más que yo ,me puse su collar y caí en que tenía que encontrar a mis padres para contarles lo de Eric.

-¡Papá! ¡Mamá!- grité saliendo de la habitación donde se encontraba mi hermano.

Llegué al comedor ,abrí la puerta y me encontré a mis padres en el suelo... muertos.

-No... ¡No!- dije al verlos y después me percate en una sombra que había en la esquina de la sala.

Parecía un hombre de la edad de mi padre ,puede que un poco más mayor. Su figura me resultó muy familiar pero no le reconocí ,estaba demasiado oscuro.

Eché a correr mientras lloraba negando lo que acababa de pasar cuando me caí y me desmayé.

Desperté en el hospital ,no había sido ningún sueño. Mi tio Mario estaba sentado junto a mí y me contó que un hombre mientras estaba yo en clases entró en casa y asesinó a mis padres y después a mi hermano.

Desde entonces vivo con mi tio ,no se preocupa mucho por mí ,siempre está de juerga y a parte casi nunca le ha importado lo que haga ,aunque alguna que otra cosa si.

(Fin del flash back de Hugo)

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-Yo... lo siento mucho Hugo ,no tenía ni idea-le dije perpleja a lo que me había contado, si lo hubiera sabido antes...

-No te preocupes-me dedicó una sonrisa falsa tocándose el collar de su hermano aún puesto desde entonces- a mi madre le cortaron el cuello ,a mi padre le apuñalaron dos veces en el pecho y a mi hermano le clavaron un cuchillo en la pierna y perdió demasiada sangre como para sobrevivir, tuve suerte de salir ileso... Me dijeron tras enterrar a mi familia que era el único superviviente de mi familia, por lo tanto heredaría el dinero de la empresa de policía de mi padre que ha pasado de generación en generación.

Mis ojos buscaban los suyos, pero no los encontraba, desde que me empezó a contar lo que le pasó se mantuvo rígido, mirando al suelo mientras que sus brazos descansaban en sus piernas y se mantenía echado hacia alante en el sofá.

-Sé que estoy bien ahora ,por tí. No voy a permitir perderte Amelia... No a tí, lo pasé tan mal que lo pagué con la persona que me gustaba y con la que se portaba tan bien con todo el mundo, con la que menos se lo merecía, lo siento Amelia- me cogió de la mano incorporándose buscando mi perdón, y como no dárselo...

-Tranquilo, estás perdonado, gracias por contármelo.

En ese momento vi como su mirada dejó de ser triste, pesada... Se veía una chispa de luz en su mirada, como si yo le hubiese dado, no sé cómo, un motivo por el que seguir adelante.

-Por cierto , sobre el asesino de tu familia...-dije con cuidado en cada palabra.

-Cerraron el caso al no encontrar más pruebas.

- Lo siento...

-No te preocupes... El pasado pasado es, no se puede cambiar.

-¿Y por qué no me pediste salir antes de irte?

-Por mi estúpido orgullo

-Ah... ya lo entiendo todo...- todos los puzzles en mi cabeza empezaron a encajar, era comprensible que se mantuviera rígido hasta el final conmigo.

-Son las ocho ,debería volver a casa, aún tengo que hacer la lista de los nuevos soldados ,adiós mi flor-me besó.

-Adiós- dije sonriendo.

-¿Nos vemos mañana en noche buena?- su cara parecía la del Hugo del que yo me había enamorado tiempo atrás, se notaba ya cambiado desde que llegó pero el hablar del tema conmigo y sincerarse le ayudó a quitarse un peso de encima, la tensión que

-Claro- le dije sonriéndole con ternura

Cuando se fue me acosté en la cama pensando en todo lo que habíamos hablado y en lo que le pasó... en cómo se debió sentir. Y si...eran las ocho ,temprano para estar durmiendo , pero el cansancio pudo conmigo y está vez pude dormir.