Capítulo 20-Accidente

762 52 1
                                    

Desperté algo cansada, eran las nueve y cuarto de la mañana, Hugo no estaba a mi lado durmiendo pero si que dejó una carta.

- - - - - -

Fui a casa de mi tio, volveré sobre las diez o puede que más tarde porque también tengo que ir a la comisaría a contar todo lo que mi tio ha hecho. Te quiero.       
                                                       Hugo.

- - - - - -

Me levanté de la cama con los ojos medio cerrados y desganada. Cojí del frigorífico mi bote de zumo de naranja y pegé cuatro tragos, no tenía mucha hambre así que solo tomé eso.

Me vestí y mientras me peinaba me fijé en el reloj, las nueve y media. Fui al comedor y me asomé por la ventana, estaba empezando a amanecer, deduje que hacía un poco de viento tras ver por la ventana las hojas de los árboles moverse, no había nadie en la calle.

De repente empezó a sonar mi móvil desde mi habitación, fui corriendo a por él y ví que era Ana la que me llamaba.

-Dime Ana.

-Amelia he visto a Hugo entrar a la comisaria, me contó todo lo que pasó y lo que descubristes.

-¿Y qué haces tú tan temprano por la calle?

-Iba de camino al trabajo cuando me lo encontré entrando a comisaría, dijo que fue a casa de su tio para hablar con él pero no estaba y decidió ir directo a la comisaría.

-Lo sé.

-Me alegro de que esté bien.

-Ya, y yo- dije saliendo lento de mi habitación hasta poder ver que la puerta de mi casa estaba abierta y entornada.

-¿Oye?¿Amelia?

-Está la puerta abierta.

-¿Qué?

-Álguien ha entrado a mi casa Ana...

-Vale, a ver Amelia, tranquila, aviso a Jaime corriendo y vamos para allá, protégete.

-No cuelges por favor- dije nerviosa, pero para entonces ya había colgado.

Me dirigí despacio a la cocina para cojer algo que sirviera para defenderme como algún cuchillo, tijeras,...

Cuando estuve a punto de entrar a la cocina por detrás me agarró una persona amenazándome con un cuchillo en el cuello. Solté un chillido corto de asombro.

-¿Quién eres?- dije sin moverme.

-¿Tú quién crees querida?

-Mario...

-Premio para la doctora- dijo sarcástico- que también es investigadora por lo que ví ayer cuando salistes de comisaría tan tarde...

En ese momento sentí preocupación, preocupación de que tras ver eso podía matarme fácilmente. Solo deseaba que Jaime o Hugo llegasen.

-¿Cómo pudiste matar a tu propio hermano y a su familia?

-Quería la empresa de la familia Garcia, me convertiría en el hombre más rico del mundo.

-¿Matando a tu familia?

-¿Cómo si no?- dijo con una sonrisa perversa en su rostro.

-¿Te acuerdas de cuando me prguntaste cómo llamaría yo a las personas capaces de matar a su propia familia?

-Si.

-Pues eres un desequilibrado mental.

Cuando dije aquello le pisé el pie haciendo que soltara el cuchillo y poder escabullirme. Me metí corriendo a mi habitación cerrando con llave. Me entró pánico y empezé a llorar. Cojí el móvil que estaba encima de mi escritorio y marqué el número de Hugo. Tras ver que no respondía me puse aún más nerviosa mientras que Mario golpeaba la puerta diciendo que le abriera la puerta. No sabía que hacer.

-Cuando Hugo te trajo a mi casa algo me decía que me traerías problemas, y así ha sido- dijo golpeando todavía la puerta.

-¡Pues cuando te conocí algo me dijo que no me fiara de tí!- dije chillándole.

Busqué por los cajones corriendo y encontré unas tijeras. Tenía que salir de la casa corriendo así que me armé de valor y cuando consiguió hechar la puerta abajo le clavé las tijeras en el hombro. Chilló y empezó a sangrar cuando fui corriendo hacia la puerta, pero me alcanzó cuando estuve a punto de abrir la puerta y me pegó varias veces hasta que conseguí irme gateando hacia la puerta cuando le dí en la entrepierna, pero me cojió del pie y tiró hacia él. Me levantó y me empujó al suelo, pero no se dió cuenta de que estaba la mesa y me golpeé en la cabeza haciendo que empezara a sangrar cada vez más hasta desmayarme y quedarme inconsciente.

Amor con OdioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora