El Chico de los Puercos [SunHak;The Boyz]

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;Especial Navideño día 4

Advertencia: !smut!

[Normal]

Sunwoo seguía en shock al momento en que Haknyeon se sentó en sus piernas para volverlo a besar, claro, eso no lo esperaría del mismo chico que le dio una patada en las bolas cuando intentó llegar a más.

—Espera, espera, espera, espera, espera —comenzó a decir Sunwoo una vez se separaron a tomar aire y Haknyeon lo miró con duda—. Alto.

Sunwoo estaba del color de su cabello, no sabía si por los besos, la vergüenza o porque empezaba a hacer calor de un momento a otro.

«¿Por qué cuando si tengo ganas no me deja hacer nada?» pensó Haknyeon haciendo un puchero inconscientemente, cosa que Sunwoo notó.

Hubo un silencio bastante incómodo entre los dos, la tensión podía cortarse con un cuchillo.

Haknyeon había estado bastante nervioso en todo ese tiempo respecto a ese tema, era cierto, Haknyeon ya tuvo una pareja antes y no era un tonto respecto a ese tema.

Solo tenía miedo, al igual que Sunwoo.

De parte de Haknyeon, aún tenía unos cuantos resagos acerca de lo ocurrido hace un par de años con su primera relación. Desde entonces se había cerrado a todo y a todos, no estaba interesado en tener a alguien. No para que le hiciera lo mismo.

Mientras Sunwoo estaba nervioso, porque en su primera vez recibió la gran noticia de que iba a tener un hijo. Era un trauma que jamás iba a superar.

Haknyeon era experimentado, sí. Sunwoo, no.

Y por eso el menor empezaba a estar nervioso por eso, Haknyeon se dio cuenta porque veía a todos lados menos a él.

El omega decidió abrazarlo, aún estando sentado encima de él, escondió la cara en la curvatura de su cuello aspirando mejor su aroma.

—T-tu, ¿estás listo para eso? —habló Sunwoo pasando la mano por su espalda una y otra vez. El omega suspiró provocándole cosquillas.

«Sinceramente no» pensó con temor a decirlo, sería la tercera vez que lo rechaza. Mierda, se sentía como un adolescente hormonal a punto de tener su primera vez.

—Yo... —intentó decir algo pero la inseguridad le ganó.

—¿Tú?

—Yo... Tengo miedo aún —lo soltó de una y Sunwoo se relajó al escuchar eso. Asintió varias veces comprendiendolo.

Porque el tampoco estaba listo, no aún.

Decidió darle un beso en la frente al omega para que entendiera que no importaba, qué él iba a esperar hasta que ambos estuvieran listos.

Porque Sunwoo no quería obligarle a nada, no quería provocarle el mismo miedo de cuando lo acorraló contra el refrigerador, porque él pudo ver ese pavor en la mirada del omega e inclusive su olor transmitía eso, miedo.

Haknyeon se acomodó mejor en el regazo del alfa estirando sus piernas a través del largo sillón y recargandose en el hombro de Sunwoo, quién no se movió mucho.

Haknyeon cuando menos se dio cuenta, el sueño empezó a vencerle quedándose así en esa posición, Sunwoo lo notó y decidió cargarlo con cuidado para dejarlo en su cuarto, cerró la puerta con cuidado y decidió comer algo, ya que solamente tenía un par de galletas en su estómago.