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[KSW]

Desperté algo adolorido, probablemente por dormir en la misma posición toda la noche, pero es que simplemente Haknyeon estaba pegado a mí como un koala. Y a pesar de que todo me dolía, me sentía feliz de tenerlo durmiendo a mi lado.

No había que ser un genio para darme cuenta que Haknyeon en verdad me atraía, ¿cuándo ocurrió? No tengo idea y tampoco tenía ganas de descubrirlo por ahora, lo único que sí me preocupa es algo con nombre y apellido.

Choi Chanhee.

Haknyeon probablemente no sabía que Chanhee y yo hemos estado teniendo algunas citas, salimos algunas veces al mes ya sea que él lo proponga o yo; comenzaba a sentirme interesado por ese lindo omega de cabello rosa, eso fue hasta que él chico que estaba a mi lado durmiendo volvió a aparecer en mi vida.

Y es que parecía que mi lobo no quería a nadie más que a él, sólo a él, ya que cuando estaba con Chanhee esa parte de mí se sentía incómoda o en el mejor de los casos era como si desapareciera, por ello me encuentro en una horrible confusión, no quería lastimar a Chanhee y tampoco quiero hacerme ilusiones con Haknyeon.

Ah, y yo que había dicho que no me volvería a emparejar con nadie después de Soyeon.

Suspiré mirando el reloj de la pared, aún era temprano como para levantarme e ir a trabajar, apenas había dormido unas tres horas así que con cuidado de no despertarle me acomodé para abrazarlo mejor. Él se removió un poco pero siguió durmiendo y quería reírme gracias a su ceño fruncido mientras dormía, comencé a ceder ante el sueño y en menos de lo que imaginé, ya estaba en brazos de morfeo.

Después de un rato mi despertador sonó, lo odié por unos instantes para después apagarlo y tener que moverme de la cómoda posición en la que me encontraba.

Me levanté con toda la pereza del mundo, intentando no despertar a mi mayor, cosa que me fue imposible ya que comenzó a removerse por toda la cama quedando enredado entre las cobijas.

Fue gracioso y tierno al mismo tiempo, después de esa escena decidí meterme a bañar a pesar de que el agua a esta hora estuviera fría, no tenía ganas de luchar con el calentador, fue una ducha rápida, para después comenzar a vestirme con el debido uniforme de mi trabajo, salí del baño secando mi cabello con la toalla y me di cuenta de que el chico aún seguía dormido.

Me dirigí hacia la cocina para buscar algo que comer, tomé un jugo que estaba en el refrigerador y galletas, tenía demasiada flojera para hacer algo de comer.

No sabía si despertar al omega que aún dormía plácidamente o dejarlo dormir y escribirle una nota. Las dos sonaban tentadoras.

Terminé mi "desayuno" y regresé a la habitación encontrándome con una escena bastante peculiar... Y tierna me atrevería a decir.

Haknyeon ya estaba despierto, tenía todo el cabello hecho una maraña en su frente, estaba sentado viendo a la nada mientras hacía un puchero, además de que tenía el ceño fruncido.

Fuera impulso de ir y abrazarlo como si no hubiera un mañana; me recargue en el marco de la puerta aún admirandolo, se veía confundido, muy confundido. Probablemente no recuerde mucho.

Comenzó a observar el cuarto, como si no creyera que estuviera allí. Parecía un niño pequeño cuando llega a un lugar nuevo que le parece interesante; continuó hasta posar su mirada en mí y sí, se sonrojó.

El Chico de los Puercos [SunHak;The Boyz] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora