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Miro el reloj, sintiendo la manera en que mi corazón se descontrola cuando este marca las 12. Trago duro, y siento la manera en que mis manos tiemblan un poco. ¿La razón? Es oficialmente 12 de Mayo del 2026. Oficialmente he regresado a la fecha donde todo esto comenzó, y no sé qué diablos hacer al respecto.Sé que en esta vida nueva, las cosas nunca pasan de la misma manera dos veces, pero hay cosas... ciertas cosas que no cambian del todo. Hay cosas que como el accidente que iba a tener Temo cuando lo salve, que son parecidas, pero no iguales. Así que sí, estoy un poco asustado.
Giro sobre la cama, para encontrarme con Temo completamente dormido, tan bonito como siempre. Nunca tuve alguna duda de que lo que quería ver al despertar era él, pero todavía lo quiero todo el tiempo, y todos los días, por lo que el hecho de que exista una posibilidad de que no lo tenga, hace que me duela el pecho del miedo. Lucho contra eso todos los días, lucho contra los pensamientos negativos que de vez en cuando se apropian de mí. Sobre todo hoy.
Temo se remueve un poco, frunciendo el ceño, y eso siempre me sorprende, pues es como si pudiera sentir lo que siento cuando lo estoy sintiendo. Es extraño. Alargo mi brazo para taparlo mejor, y acercarlo un poco más de pasó a mi cuerpo. Afuera hace frío, últimamente ha estado demasiado gris el clima, pero está bien. Mientras que en Julio no este de esta manera, todo está bien, pues en ese mes es nuestra boda.
Sonrió y trato de concertarme en ese pensamiento, en vez de tener miedo a mirar el reloj cada cinco segundos. Es muy emocionante casarme con Temo nuevamente, sé que prácticamente ya lo habíamos hecho, pero eso lo hace aún más hermoso, pues esta es una de las ventajas de que nos dieran años adicionales de vida. Podemos hacer cosas que ya habíamos hecho, pero de una diferente manera.
Nuestras familias como tal se lo tomaron de una buena manera, simplemente se sorprendieron un poco, pues para ellas, solo llevamos unos meses conociéndonos, aunque prácticamente llevemos más de una vida estando juntos, y viviendo cosas juntos. Tuvimos que mostrarles que nos amábamos lo suficiente para que aceptaran que éramos el uno para el otro. No fue algo realmente difícil, tenemos la química. Definitivamente la tenemos, y esa nunca se perderá. Tal vez fue un poco difícil y divertido pasar por las miradas inquisitivas de los López, pues para ellos Temo llevaba apenas un mes y cacho cuando nos comprometimos. Fue gracioso, cuando nos casamos en nuestra vieja vida llevábamos años como novios y Pancho aun así lloro.
Por parte de la abuela de Temo, simplemente negó levemente con la cabeza, y después nos abrazó, deseándonos realmente lo mejor, y pidiéndonos que nos cuidáramos, y nos amaramos, pues estábamos poniendo básicamente todo en juego al elegir estar juntos. Pero no necesita decirlo, ambos estamos conscientes de ello, y estamos aprendiendo a vivir con ello.
—¿Todavía no te duermes, Ari? —pregunta de repente Temo, haciendo que me note que ha abierto los ojos, y ahora está mirándome con una sonrisa suave.
—No tengo mucho sueño. —respondo, con una sonrisa pequeña.
Temo se queda en silencio un momento, simplemente mirándome. Sé que él esta consiente que día es, y sé también que está tratando de actuar como si nada para no asustarme más de lo que ya estoy, y lo agradezco, pero definitivamente nada puede quitarme el pensamiento de que puedo perderlo de la mente por el momento.
O bueno, eso pienso hasta que Temo sonríe completamente sonrojado, antes de incorporarse un poco, y acercarse a mí, hasta que coloca sus manos sobre mi pecho, y se sienta sobre mi regazo, quitándome el aire.
—Okay, espero que entonces no tengas muchas ganas de dormir esta noche. —dice, y puedo notar en sus mejillas completamente sonrojadas lo mucho que le ha costado decir aquello, por lo que no tardo en tomarlo de las mejillas y acercarlo para besarlo con toda la pasión y todo el amor que hay dentro de mí.
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Welcome to our new life || Aristemo. [Terminada]
Fanfiction-¿Crees en la magia, Aristotéles? El aire en mis pulmones se dreno por completo de mi cuerpo al escuchar esa pregunta. La respuesta llegó más rápido que la primera vez que la escuché, así que no dude en responder. -Solo en la tuya... -susurre. -S...