ACTUALIZACIÓN LENTA.
A veces, no puedo contigo ¿Sabes, Atsumi?
Una mirada bastó para que dos almas se entrelazaran, podrían llamarle amor a primera vista, aunque ella se ha esforzado en refutar tal concepto, y él se ha esforzado en no volver a caer...
- ¿Crees que papá cuidó bien a Jumin?- preguntó Atsumi mientras veía por la ventana del bus que los llevaba de vuelta a Tokio.
- Se enamoró de él cuando lo vio, estoy seguro que ya son inseparables, como uña y mugre.- aseguró su novio.- aún no puedo creer que se llame Jumin.
- Un buen nombre para nuestro bebé puede ser Luciel.- le sonrió Atsumi, ganándose una mirada seria por parte del azabache.
- No lo llamaremos Luciel.- negó Kuroo.
- Eres muy cruel.- Atsumi hizo un puchero, enterneciendo totalmente a su novio.
Este solamente rió y se acerco a ella para besarla suavemente.
- Eres tan tierna.- Atsumi, a quien molestaba que la llamaran tierna, sólo sacó su lengua.
En un rápido movimiento Kuroo se acercó a ella y mordió su lengua.
- No hagas eso.- tapó su boca con su mano al momento que el azabache la soltó.
- No pude resistirme, lo siento mi amor.- le sonrió ampliamente el pelinegro.
- Ni pidi risistirmi.- se burló Atsumi.- te odio.
- Me amas.- restregó su cabeza contra el cuerpo de su novia, igual que un gato.
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El día de la semifinal había llegado, con los nervios a flor de piel, Atsumi era testigo de un nuevo partido contra Fukurōdani, peleando un lugar para el torneo nacional.
- ¡Sé que es un momento estresante para todos, pero ustedes pueden!- les dió ánimos Atsumi en el tiempo muerto que habían pedido, luego de que Kenma terminara de explicar la estrategia en contra de Bokuto.
- Eres tan amable Atsumi-chan, creo que lloraré.- le expresó Yaku antes de beber más agua.
El tiempo muerto acabó y el partido continuó.
- ¡Buen bloqueo!- gritó Lev cuando Kuroo logró bloquear a Bokuto, al cambiar posiciones con Kenma.
- Los bloqueos de Kuroo son tan satisfactorios.- hablo Atsumi.
- Era una de las razones por las que no podíamos dejar que se fuera.- rió el entrenador Nekomata a su lado.
La estrategia fluyó tal y como debía ser, parando a Bokuto y sus rectos asesinos, frustrandolo.
La emoción corrió por todo el cuerpo de Atsumi al momento en el que le tocaba sacar a Kuroo, verlo moverse tan naturalmente era demasiado para ella.
La emoción se detuvo cuando por culpa de Lev, perdieron la racha de puntos, logrando que el entrenador pidiera un tiempo.
- Kenma, cuento contigo para encargarte de Lev.- le pidió el entrenador Nekomata.
La cara de disgusto de Kenma se hizo presente instantáneamente, ¿en serio le estaba pidiendo es en este momento?
