ACTUALIZACIÓN LENTA.
A veces, no puedo contigo ¿Sabes, Atsumi?
Una mirada bastó para que dos almas se entrelazaran, podrían llamarle amor a primera vista, aunque ella se ha esforzado en refutar tal concepto, y él se ha esforzado en no volver a caer...
- Creo que deberías perforarte la oreja, se te vería muy bien.- habló Atsumi, mientras caminaba de la mano con su novio, mientras este con la otra mano, sostenía las bolsas con ropa en su interior.
- Creo que tienes razón.- le dió la razón.
- Yo también he querido perforarme hace un tiempo.- Asahi habló a un lado de los dos.
- Perforemonos juntos.- lo miró Kuroo, con su mirada gatuna de siempre.- ¿Qué opinas Kenma?
Miró a su otro lado, donde el peli teñido debía estar, pero este no se encontraba ahí.
- ¿Kenma?- miró hacía atrás buscando a su amigo.
- ¿Otra vez?- preguntó Atsumi, mirando a todos lados.
La desesperaba cuando Kenma se perdía, ese indefenso chico ¿dónde podía estar? Sus ojos ya comenzaban a aguarse, cuando Asahi levantó la voz.
- ¡Ahí está!- apuntó un poco más atrás al ver el inigualable pelo, con aspecto de pudín, de Kenma.
Atsumi soltó la mano de Kuroo, que había mantenido con fuerza y se dirigió hasta donde su amigo se encontraba.
- ¿Puedes dejar de perderte?- lo abrazó, sin importar que a él no le gustara mucho el contacto físico.
- Lo intentaré.- habló suavemente, devolviendo el abrazo, para que su amiga se calmara.
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- ¿Cuánto tiempo dolerá esto?- preguntó Asahi, acariciando su oreja, mientras caminaban todos juntos a casa.
- Según la chica, les dolerá solo por hoy, quizá mañana.- recordó Atsumi.
- ¿Se ven bien, verdad pequeña?- Kuroo presumió que había hecho tres perforaciones en su oreja derecha.
- Sí, te ves hermoso.- le dió la razón Atsumi, mientras veía como su hermoso novio, modelaba su oreja recién perforada.
- No sé como aguantas tres veces el dolor, apenas puedo con uno.- Asahi posaba su fría mano en su oreja.
- A mi no me duele.- habló Kenma, quién tenía su cabello atado y se podía ver su nueva perforación.
- Me impresionó que accedieras a hacerlo.- confesó la chica.
- ¿Papá aún no llega a casa?- preguntó Asahi mientras veía la hora en su celular.
- No, ¿quieren pasar un rato?- preguntó Atsumi, estando a pasos de su casa.
- ¡Claro!- respondió entusiasmado Kuroo, mientras Kenma solamente levantaba los hombros.
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