– Jo, pero miren nada más a quienes tenemos aquí...Es Junkyu.
– Sí que se han tomado su tiempo, ¿eh?
Como siempre, el corazón me da un vuelco al verlo. De verdad, ¿cómo podría acostumbrarme a él?
Hoy hace muy buen tiempo y la temperatura no es demasiado fría, así que lleva una cazadora abierta con una camiseta debajo, esta vez del Capitán América, con la estrella bien grande sobre el pecho.
Un pecho que me encanta tocar, un pecho que me encanta acariciar. Un pecho sobre el que me encanta apoyar la cabeza para dormirme, y escuchar el latido de su corazón, y...
Pero Yoonbin está justo a mi lado, así que detengo mis pensamientos antes de que vayan demasiado lejos.
– ¿Qué haces tú aquí? –pregunto con sorpresa.
– Yo también te quiero –replica Junkyu, poniendo los ojos en blanco.
– Hey, Junkyu, ¿qué tal? –dice Bin, acercándose a él para darle un abrazo.
– Oye, espera. ¿De qué se conocen ustedes dos?
– Tu madre –responden a la vez.
– Digamos que nos ha ayudado un poco para darte una sorpresita –añade Junkyu, encogiéndose de hombre.
Los dos me están mirando muy sonrientes, disfrutando claramente de mi evidente desconcierto.
– Encantado de conocerte, por cierto –le dice Yoonbin–. Me gusta tu camiseta.
– No entiendo nada –digo, cada vez más confuso.
Junkyu me mira conteniendo la risa.
– ¿Es que no sabes qué día es hoy?
– Creo que no lo sabe –le susurra Bin, lo bastante alto como para que yo también pueda oírlo.
Los dos ponen los ojos en blanco.
– Eh... ¿domingo?
Junkyu se echa a reír con esa risa que me provoca un aleteo en el estómago.
– Hoy es catorce de febrero, Mashi.
Durante un instante, sus palabras no tienen ningún sentido. Pero, entonces, algo hace click en mi cabeza y comprendo qué es lo que quiere decir.
Catorce de febrero.
El día de San Valentín.
El día de los enamorados.
– Mierda.
– ¿No te habías dado cuenta?
– ¡No!
– Anda que... –dice Yoonbin entre risas, negando con la cabeza.
Enrojezco un poco.
– Oye, que tampoco es mi culpa –trato de defenderme–. Es la primera vez que tengo novio, así que nunca lo había celebrado.
– Pues ya sabes lo que toca ahora, ¿no?
– ¿Vamos a celebrarlo? –pregunto con una sonrisa, mirándolo a los dos.
– Pues claro. –responde Kim.
Mi sonrisa se ensancha todavía más.
– Van a celebrarlo ustedes dos –especifica Yoonbin–. Estoy seguro de que a los dos le encantaría compartir su amor conmigo, pero créanme cuando les digo que no estoy interesado. –Me echo a reír, y entonces Bin me abraza para despedirse y me susurra al oído–: Por favor te lo pido; usa protección. Soy demasiado joven para ser tío.

ESTÁS LEYENDO
影┆𝚜𝚑𝚊𝚍𝚘𝚠 ; 𝚖𝚊𝚜𝚑𝚒𝚔𝚢𝚞
Fanfiction¿𝑇𝑜𝑑𝑎𝑠 𝑒𝑠𝑎𝑠 𝑝𝑒𝑙𝑖́𝑐𝑢𝑙𝑎𝑠 𝑦 𝑠𝑒𝑟𝑖𝑒𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑡𝑒 𝑐𝑢𝑒𝑛𝑡𝑎𝑛 𝑙𝑜 𝑚𝑎𝑟𝑎𝑣𝑖𝑙𝑙𝑜𝑠𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠 𝑠𝑒𝑟 𝑔𝑎𝑦, 𝑣𝑖𝑣𝑖𝑟 𝑟𝑜𝑑𝑒𝑎𝑑𝑜 𝑑𝑒 𝑐𝑜𝑚𝑝𝑎𝑛̃𝑒𝑟𝑜𝑠 𝒉𝑒𝑡𝑒𝑟𝑜𝑠 𝑚𝑜𝑑𝑒𝑟𝑛𝑜𝑠 𝑒𝑛 𝑒𝑙 𝑖𝑛𝑠𝑡𝑖𝑡𝑢�...