Historias Slytherpuff

Tormenta

Pedazo del capitulo que tenia aquí antes c: 

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Existen ciertos fenómenos naturales que en algún momento hemos sido o seremos capaces de apreciar; como muchos, las tormentas también forman parte de aquella lista. Sin duda es solo algo natural que tarde o temprano pasara. Por ende, nos acostumbramos y aprendemos a vivir con ellas. Incluso aprendes a reconocer las señales de que pronto el clima cambiara. Un ejemplo seria como cuando las nubes oscuras poco a poco se van forman en el cielo, y débilmente se colocan encima del sol tapando así todo el esplendor que emite.

No solo existe esa advertencia, pues al igual que todo en esta vida, los desastres antes de ocurrir dan pequeñas señales con un mismo patrón, ya sean notorias o no, ya sea que seamos capaces de verlos o no: Los vientos fuertes, las conductas inusuales de ciertos seres vivos, los silencios prolongados y aquellas lluvias constantes que traen consigo. Todo ello indican que en cualquier momento se avecinara una tormenta la cual arrasará con todo. Realmente no es como si importara si te das cuenta o no, al final, la tempestad vendrá y no habrá nada que pueda evitarlo.

Tal vez por ello es que sean tan odiadas o temidas, ya que si eres lo suficientemente listo o intuitivo para aprender a identificar esas señales antes que todo pase, el constante sentimiento de que tarde o temprano todo se tornara oscuro es sin duda abrumador.

Escuchar los lejanos truenos avisando de que pronto se acabara el día soleado, sin duda asusta. No importa que tan pequeña o rápida sea la tempestad, y tampoco si te enteraste mucho antes. El ver como todo poco a poco se va volviendo oscuro en un aviso de que llegara la tempestad es aterrador... Te aterra el hecho de no puedes hacer nada más que observar cómo se va formando la catástrofe, como esta se prepara para anunciar su llegada y fomentar el desastre y pánico al igual de como lo haría una tormenta.

El aguacero que se aproxima y no viene solo, es atemorizante, saber que consigo trae esas líneas de luz las cuales se hacen paso entre la oscuridad para impactar en cualquier superficie, provoca que el mundo entre en pánico volviéndolo aún más desastroso. En el momento de que esas dos nubes llenas de cargas eléctricas choquen entre sí, y conviertan todo en un campo de batalla soltando así toda tipo de sentimientos; desesperación, miedo, enojo, envidia, desagrado, preocupación... todo ello termina siendo esparcido una vez la tormenta pase de ser simplemente eso, y se vuelva una tormenta eléctrica.

Aunque, es curioso... a pesar de que, en esas situaciones en donde la mayoría de las personas viven solamente por la desesperación y el deseo de no morir, hay quienes, aun si todos estén sumidos en el egoísmo y en el bienestar de sí mismos, siguen preocupándose por los demás, mostrando consigo una sonrisa en el rostro capaz de calmar incluso a los que están a punto de ser arrasados por la lluvia. Parece ser como si en su mente no importara que tan fuerte sea la lluvia, que tan intenso este el viento o incluso cuantos rayos caigan... No importa todo lo que se interponga o cuanto estén perdiendo, ellos son capaces de conservar la calma, como si nada estuviera pasando.

Allen se pregunta cómo es que lo hacen esas personas... como a pesar de ver que todo a su alrededor este siendo arrasado, ellos sigan con una sonrisa. Todavía duda si realmente es así, o si es que no quieren mostrar la desesperación que traen dentro de ellos.

El blanquecino rostro del rubio se le vino a la mente cuando pensó en ello; siempre con una sonrisa a pesar de todo, apuesta a que incluso si todo se está quemando a su alrededor, seguiría preocupándose por él, antes que por sí mismo.

Se rasco la cabeza con duda. ¿Cómo es que Arthur era capaz de ser así? A diferencia de él que siempre necesitaba algo externo para mostrar frente a otros una emoción que no sea agresiva, el tejón siempre se comportaba tranquilo, positivo siendo el con todos, sin ninguna duda de sus acciones o con miedo de lo que pasaba a su alrededor. No sabía si era una dicha el ser así, o una maldición.