Caminemos hacia el futuro, juntas.

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Narra Lucia

Un mes ha pasado desde la última vez que la vi, no hemos hablado por ningún medio, la extraño, la anhelo, pero sabíamos que necesitábamos algo de espacio, y ambas hemos respetado esa decisión. Un día después de encontrar a Vanessa ingrese en un centro de rehabilitación, me dijeron que al principio era difícil, que tenía que resistirlo, y afortunadamente lo supere, aunque debo admitir que más de una vez quise mandar todo al carajo, pero necesitaba ser mejor, mejor para ella, mejor para mí.

Hoy es el día donde la volveré a ver, no por decisión propia, sino porque hoy teníamos que declarar en la comisaria, solo que esta vez, seria ante un juez.

Llegue 10 minutos antes de la cita acordada, y allí ya estaba ella. Con el corazón en la mano me acerque a Vanessa, ella al percatarse de mi presencia me miro, y fue como la primera vez que la vi, volví a sentir aquellas mariposas en el estómago, mi corazón latía rápidamente, mi garganta se secó, y una tonta sonrisa de enamorada se formó en mi rostro.

-Hola-Ella fue la primera en hablar, y de nuevo, su voz me cautivo. A comparación de la última vez que la vi, ahora no tenía la férula en el brazo.

-Hola-dije en un suspiro, se levantó y nos abrazamos. Cerré los ojos, disfrute del contacto de su cuerpo con el mío, inspire su aroma…era el mismo de siempre. Sería un milagro si ella no se percatara que mi corazón latía ferozmente. Nos separamos, y sorpresivamente ella levanto su mano y la coloco en mi pecho. Mi mirada choco con la suya, sus ojos…eran las cosas más bellas que había visto, y ahora, tenían un brillo completo, ahora mostraban vida, mostraban amor.

-Yo también te extrañe-dijo, con un tono rasposo, el cual me volvía loca. Sin poderlo resistir, junte nuestros labios. Ella me respondió al instante, nuevamente volvíamos a estar solas, en nuestro mundo, donde nadie nos podía hacer daño, donde nadie nos podía separar.

Alguien carraspeo y nos separamos, sin quitar la mirada una de la otra.

-Señoritas – ambas volteamos a ver al oficial, el cual no mostraba ninguna expresión en el rostro – síganme por favor – Ambas lo seguimos tomadas de la mano, nos llevó a una oficina, en la cual estaba un señor con traje sentado del otro lado del escritorio, en la esquina de la habitación, una secretaria en una máquina de escribir. Nos sentamos en las dos únicas sillas frente, al que supongo, es el juez. Justo cuando nos hemos sentados, el “juez” comienza a hablar.

-Buenas tardes señoritas, están aquí por el cargo de homicidio en segundo grado hacia…-hay dejo de hablar, se acercó a la hoja donde tenía la información del caso, la reviso detenidamente, su expresión era de desconcierto total – Al parecer no tenemos ninguna información del occiso, sin esta información el caso no puede ser procesado, pero aun así, necesitamos su declaración para hacer el papeleo correspondiente-

Vanessa comenzó con que el nombre del occiso era Maribel, o por lo menos así se hacía llamar, le conto como la acosaba, como me maltrato alguna vez, como la secuestro, como intento matarme en varias ocasiones, incluyendo la cabaña incendiada y la última vez, donde ella tuvo que disparar para salvarme. Yo me quede callada, no hable durante la declaratoria de Vanessa, simplemente asentía con la cabeza.

Al final nos dejaron ir sin más, ya que no había testigos, y no había ninguna información de Maribel, el caso era prácticamente imposible de procesar.    

Ese día había llevado mi coche, Vanessa había llegado en taxi, así que la invite a la playa, a lo que ella accedió.

El viaje fue tranquilo, ella coloco la música, y nos la pasamos cantando todo el camino. Ya estando en la playa, saque una toalla que estaba en el maletero, y nos sentamos en la arena, a contemplar como el sol caía en el horizonte.

-Vanessa – comencé a hablar – Quiero decirte muchas cosas, pero las resumiré en dos palabras – gire mi cuerpo para quedar frente a ella, le tome las manos, y levante mi vista para encontrarme con su mirada – “te amo”, amo tus ojos cuando me vez, amo tu voz, incluso cuando solo preguntas la hora, amo tus cejas, tu nariz, tus orejas, amo tu forma de ser, amo que me ames, amo cualquier expresión que realizas, amo absolutamente todo lo que haces, te amo Vanessa, hoy, mañana y siempre – Ella fue la que me rodeo el cuello con sus brazos y me besó. Lento, pero apasionado, suave, pero salvaje, tímido, pero atrevido, ese beso, era indescriptible, tenía todo, tanto que no se podía describir con palabras.

Cuando se separaron el sol ya no se veía en el horizonte, entonces Vanessa saco una cajita de su bolsa, la abrió y pude ver 2 anillos con el gravado de olas en cada uno.

-Tu, alguna vez hiciste esto mismo, y yo quisiera repetirlo, ya que ahora es un nuevo comienzo, solo que esta vez, no quiero que el anillo cuelgue en nuestro cuello, si no que quiero que lo portes en tu mano, no soportaría pensar que alguien se te acerque, quiero que sepan que ya tienes dueña, y que nunca más estarás disponible – ambas reímos, en este momento, era la mujer más feliz del mundo – Lucia, quieres ser mi novia? Por segunda vez? – En este momento ambas teníamos los ojos cristalinos, y esta fui yo la que me lance a sus labios.

Cuando nos separamos pude sentir como algunas lágrimas rebeldes se escapaban de mis ojos. Vanessa me las limpio con su pulgar.

-Supongo que eso es un si-dijo ella algo divertida.

-Es un por supuesto que si-nos dimos otro beso, más corto que el anterior, le tendí mi mano y me coloco el anillo, yo tome el otro y se lo coloque.

-Quiero un futuro contigo Lucia, me quiero casar contigo, pero no ahora, esperare, terminare una carrera, trabajare, comprare una casa para nosotras – me lo dijo con tanta ilusión, que tuve un flash, donde ambas estábamos arrugadas, en silla de ruedas, y con los anillos puestos.

-Solo con una condición, que todo lo ágamos juntas, ambas terminemos la carrera, ambas trabajemos, ambas compremos la casa, y, hasta podemos formar una familia – sonrió, con esa sonrisa que me hacía caer a sus pies.

-Entonces esta dicho, ahora caminemos hacia el futuro juntas -.          

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Es ahora donde me disculpo, perdon a todas aquellas personas que esperaron tanto tiempo, espero no desepcionarlos, y si quieren un capitulo mas "epilogo" solo manden un comentario pidiendolo, con uno que haya lo hare.

Feliz año nuevo!!

No dire que es amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora