LEY DE CAUSA Y EFECTO II.

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Erik caminaba apresurado por el largo piso de vinilo, estaba por terminar su turno doble en el hospital, ser cirujano de emergencias era un trabajo duro y agotador. Se sentía exhausto y solo deseaba llegar a casa a descansar. El sonido de las sirenas le hicieron saber que llegaría un nuevo paciente, miró la hora en el reloj de pared y suspiró, su turno había terminado y su compañero Azazel atendería a quien llegará.

La camilla entró apresuradamente llevada por cuatro paramédicos y el se quitó del camino para no estorbar, había sangre, mucha sangre encima de ese hombre y los paramédicos gritaban para que el médico de turno lo auxiliará. Emma corrió directo hacia Erik,

-Azazel no aparece, necesitas a atender a ese hombre, - Erik asintió y se acercó rápido a los hombres que lo mantenían con vida. Pidió el parte médico mientras se colocaba cubrebocas y guantes,

-Desconocido, hombres caucásico, 30 años aproximadamente, múltiples heridas de arma blanca en tórax, espalda y brazos, contusiones en pecho y tórax, aparenté intento de violación,

Hasta entonces Erik se acercó a ver al hombre que estaba entre la vida y la muerte, casi se ahoga con el sollozó que suprimió y tragó de modo audible,

-Lo conozco, - los paramédicos lo vieron desconcertados, -Su nombre es Charles Xavier.

Erik hizo todo lo humano posible para salvar a Xavier. Fueron necesarias varias transfusiones, múltiples suturas y una cirugía minuciosa para controlar el sangrado interno. Estaba en coma inducido y esperaban que un milagro lo salvará.

Erik permanecía ido en su oficina después de la locura de haber arrebatado la vida de Charles de las manos de la muerte. Emma entró a su oficina con un expediente,

-Buscamos algún dato de tu paciente,

-¡Ya no es mi paciente Frost!,

-Encontramos un expediente suyo en la base de datos, es de hace unos doce años. Hay algunos datos importantes que deberías considerar para cuando lo despierten del coma. Buscamos datos de su familia pero nadie responde. Al parecer eres la única persona que lo conoce,

-Solo lo vi un par de veces hace mas de doce años Emma, estudiábamos en el mismo instituto, - Emma hizo un leve mohín antes de hablar,

-Te dejaré una copia del expediente original, por si deseas leerlo. Puedes llevarlo a casa contigo,

-Déjalo en el escritorio. Ahora debo irme, Peter y Wanda deben estar muriendo de hambre, - Emma sonrió,

-¡Erik y sus gatos!, - dijo con ironía la enfermera,

-Son lo único que me queda de mamá,

-Lo sé. Ahora corre a atender a esos pobres animales, - ella salió sonriendo del consultorio y Erik casi detrás de ella, no sin antes haber guardado el expediente dentro de su mochila.

Llegó a casa llenó de cansancio, alimento a sus gatos siameses, y después tomó una ducha caliente, recordaba a todo momento el rostro de Charles. Seguía igual de hermoso, a pesar de la extrema palidez de su rostro y toda esa sangre que cubría su maltratado cuerpo. Lo habían golpeado, apuñalado y habían intentado violarlo. El sentía odiarlo por lo que le había hecho en el pasado, pero no creía justo que lo hubiesen dejado casi moribundo tirado a su suerte en ese frío callejón. Recordó con dolor la burla de los estudiantes del instituto y las palabras que salían como dagas de la maliciosa y bella boca de Charles, de lo arrogante e hijo de puta que se veía al evidenciarlo frente aquellos desconocidos. La última agua que dejó caer sobre su cuerpo en la ducha, fue helada, quería con aquello lograr disipar a Charles de sus pensamientos.

Se vistió con un chándal de algodón negro y fue directo a su habitación, antes de acostarse a dormir recordó el expediente, fue por el y lo observó detenidamente antes de empezar a leerlo. Se recostó y abrió la carpeta, Peter y Wanda se acurrucaron a su costado y empezó a leer. No podía creer los datos que ahí estaban escritos, muchos menos las fechas y horas, todo indicaba que Charles había sido atropellado el mismo día en que se suscitó el grotesco evento en donde se había burlado de él, volvió a corroborar los datos escritos y cerró la carpeta con violencia.

Erik había querido incontables veces toparse con Charles para partirle la cara por lo que le había hecho, pero la suerte nunca había estado de su lado, ya que desde ese día hasta la fecha jamás lo había visto de nuevo. Abrió de nuevo el expediente, la hora de ingreso de Xavier a la sala de emergencia había sido una hora después del circo montado por el y por Sebastian. Leyó y releyó, y aún no podía creer lo que sus ojos veían,

Dx. Traumatismo craneoencefálico con amnesia permanente y ceguera cortical.


Erik cerró los ojos con fuerza y apretó el puente de su nariz, el de verdad no odiaba a Charles y jamás hubiese querido que algo tan terrible le sucediera.

Dejó el expediente a un lado y cerró los ojos con fuerza, y sin quererlo, lloró. Charles no había sido bueno con él, había sido una completa basura y aún así pensaba que el karma, había llegado demasiado pronto a su vida y de una forma tan cruda. Solo pedía que aquella lección tan dura, hubiese servido de algo.

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