Runaway (2)

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Advertencia.

Este capítulo contiene Yuri, si no te gusta, puedes irte.

...

Bien, Lydia se estaba volviendo una experta en mentir ya que en esos últimos días al regresar de sus clases siempre salía con Anna y le decía a su padre que estaba practicando con una compañera de clase, por supuesto él lo creía.

Se comenzaron a conocer y por alguna razón en las pocas veces que Victoria estaba con ellas, ya no la insultaba tanto.

Era agradable tener amigas.

—¿Tienes un hermano? — Preguntó la pelirroja acostada en el césped junto a las otras dos mientras miraban el cielo nocturno.

—Si, pero su nivel musical es más bajo que el mío —Presumió la rubia haciendo que rodara los ojos la pelirroja.

— Me imagino a tu hermano como tú, que asco, espero nunca encontrarmelo en mi vida — Se estremeció.

—Ja, no se compara a mi —.

— ¿Ves? Por esas cosas no tienes más amigos — Señaló Victoria levantándose y sacudiéndose la tierra sin cuidado — Como sea, tengo que irme, mi maldito hermano quiere que llegue antes de que los estúpidos que nos "cuidan" llamen a la policía —.

Anna se despidió de la mano mientras que Lydia le sacó la lengua y Victoria respondió levantando el dedo medio.

—Lydia —La de cabello azul se giró hacía la rubia que estaba junto a ella y sus rostros quedaron casi rozándose.

—¿Qué sucede? — Con el tiempo Lydia se acostumbró a esa cercanía.

—¿Quieres ir a mi casa? —.

Esa pregunta sorprendió a la chica de clase alta ya que no se esperó eso, así que sólo asintió levemente aún procesando las cosas.

Anna la tomó de la mano levantándola con ella y caminando hacía su motocicleta, ahí es en donde las dos se subieron se dirigieron a casa de la cabello azul.

Al llegar, Lydia la detalló, era una casa de dos pisos, simple y sin detalles, eso la desconcertó ya que las casas que tenían dos plantas sólo eran para gente con dinero en esos barrios. Anna una vez le explicó que sus padres nunca estaban en casa así que vivía prácticamente sola.

Lydia no supo cuando sucedió pero antes de darse cuenta, ya estaba contra la pared siendo besada por la otra chica, una mano dentro de su blusa y otra en su cadera. Mientras que ella sujetaba el cabello de Anna y tocaba su trasero.

Al reaccionar ya estaba sudando y jadeando el nombre de Anna, así que sólo se limitó a sonreír y dejarse llevar. Se sentía completa, más en paz.

Podía decir que se sentía querida y deseada por alguien.

Más tarde cuando Lydia se vestía y Anna se quedaba acostada en su cama sin ropa, la motociclista la atrajo de nuevo a ella.

— Creo que me enamoré de ti — Anna no era de expresar sentimientos pero quería hacerle saber que no sólo era esa noche.

Lydia le sonrió y giró los ojos.

— Era de esperarse —Le dió un beso corto en los labios y se volvió a levantar tomando su bolso — Nos vemos en la noche —.

Por otra parte Lydia era más difícil con los sentimientos y sin decir otra cosa, salió de la habitación lista para volver a su vida.

...

We're Not Gonna Take It.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora