La Heredera de Slytherin

Conociendo a los Slytherin

-¡Slytherin!-Gritó el sombrero, y mi recientemente anunciada casa explotó en victores. Tessa daba saltitos de la emoción mientras me señalaba un asciento al lado suyo.

-¡Lo hiciste, lo hiciste!-Gritó emocionada mi amiga. Le dediqué una sonrisa.

Seguimos viendo la seremonia de selección hasta que sólo quedaron tres niñas. Una de ellas era la hermana de la comadreja.

Anunciaron su nombre, y fué escogida para Gryffindor, bufé.

Las dos niñas que quedaron se miraron fulminantes y esperaron que las llamaran.

-¡Zabini Chantal!-Gritó McGonagall, y centré mi atención en la prima de Blaise que aún no conocía, era una niña bastante bonita con el cabello castaño muy claro y brilloso, casi rubio, y unos delicados ojos celestes.

-¡Slytherin!-Gritó el sombrero, la chica sonrió maliciosamente, y se dirigió hacia la mesa de Slytherin.

-¡Zabini Phoelipa!-Gritó McGonagall y me sobresalte. ¿Cómo...?

Entendí mi pregunta cuando ví la cara de la chica, era igual a Chantal. Son mellizas o gemelas, no lo sé.

A expeción de su hermana, Phoelipa tenía los ojos cafes y el pelo un poco más claro que ella, ya era rubio. Además de que llevaba unas gafas.

-¡Ravenclaw!-Gritó el sombrero, la chica sonrió radiante y corrió hacia su mesa.

La profesora retiró el sombrero y el tabureré, y Dumbledore se paró.

-A los nuevos, quiero darles la bienvenida a Hogwarts, y a los viejos bienvenidos otra vez-Dijo con su varita en su garganta-Antes de que nuestro delicioso banquete los deje aturdidos, demosle la bienvenida al nuevo profesor de Defensa Contra las Artes Osucras, el señor Gilderoy Lockhart-Se escucharon apluasos y suspiros por parte de las chicas, rodé los ojos asqueda-A los nuevos, dejenme decirles que el bosque prohibido, está prohibido para todos los estudiantes, y para los viejos, recuerdenlo. Los prefectos de cada casa se encargarán de darles sus horarios, y a los de primer año asignarles sus habitaciones. Para los que quieran hacer las pruebas de quiditch hablenlo con los capitanes de sus casas. Ahora sí, ¡a comer-Terminó de decir eso, y las mesas se llenaron se comida.

Delante de mí aparecio un pavo que debía pasar unos treinta kilos.

-Alguien comase ese pavo antes que me coma a mí-Dije espantada, todos rieron.

Ignoré al pavo, y me serví carne asada con patatas fritas, y al horno, con un poco de jugo de calabaza. Lo miré insegura, pues nunca había provado.

-Siempre hay una primera vez para todo-Dije y le dí un sorbo. No estaba mal.

-Que tal si nos presentamos-Dijo una chica bastante alta con el cabello... ¿verde? a todo el grupo, la miramos extrañados pero todos coincidimos con ella y empezó a hablar-Me llamó Leyla Goodman, mi estatus es sangre pura, soy metamorfaga, es por eso mi color de pelo. Pero en realidad tengo el cabello castaño y los ojos miel. Me gusta el frío, la noche, y me apasiona dibujar.

-Voy yo-Dijo un chico dos asientos atrás mío hacia el frente-Soy Brad Sigginman, mi estatus de sangre es pura, tengo el cabello castaño y los ojos grises. Amo el deporte, y los helados.

-Ahora yo-Dijo una chica más allá-Soy Amber Futher, tengo el cabello marrón y los ojos verdes, mi estatus de sangre es pura. Amo los hipogrifos, tengo uno en casa, y cualquier tipo de animal.

-Sigo yo-Dijo un chico tres asientos más que yo-Me llamó Jasper Pull pero me dicen Jass, tengo el cabello rubio y los ojos celestes claro, mi estatus de sangre es pura, obviamente, y amo el quiditch.