Mí Misión-Cameron Boyce- (Completa)

Capítulo 33

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CAPÍTULO TREINTA Y TRES

Lo correcto

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   El auto llegó a toda velocidad parando al lado de la pareja. La puerta del copiloto se abrió un segundo antes de que el motor se apagará por completo, de está salió una chica castaña muy preocupada.

-¿Están los dos bien?- Se apresuro a preguntar, Emma asintió.

-¿¡No se les ocurrió al menos llamarme?!- Casi grito alterado el joven de pelo negro- No sé, como un mensaje diciendo "Oye, James. ¿Sábes? Saldremos a enfrentar a un peligro hombre que podría matarnos en un segundo, y que en unos años provocará el fin del mundo"- En su tono de voz raro se notaba la ironía- ¿Sáben lo estúpido que fue ir ustedes solos a enfrentarlo?- Cuestionó.

-Teníamos todo controlado, se supone que era nuestro destino luchar contra èl- Defendió Emma. 

 -Si, pero no ahora y menos sin entrenamiento- Dijo apretando los puños, en claro signo de ira- Está no es solo su guerra, tampoco la de los Scarfins, sino la de todo ser vivo que quiera un futuro para este planeta- Todo quedó en un momento de tensión.

-Aun así, es posible de que lo hayamos logrado- Dijo la chica- No estoy segura, pero al lanzar el rayo y que volará para estrellarse contra la casa, no reapareció, no hubo más movimiento-.

- Hay que revisar el perímetro, no es posible que todo sea así de fácil- Le llevo la contra, muy seguro- La reencarnación de un antiguo no es algo que se vence con un simple rayo de osito cariñosito- Emma se quedó un poco confundida por lo último.

   El pelinegro se dirigió de nuevo a la puerta del conductor y saco algo de debajo del asiento, para guardarlo en su pantalón. Mientras Maya se dedicó a preguntar a la pareja sino tenían heridas.

-Tengo una leve molestía en el hombro, pero sorprendentemente la herida no se abrió- Mencionó Emma.

-Bueno, iré a revisar el lugar- Informó James.

-Te acompañaré- Emma lo siguió.

-Yo también- Dijo Cameron.

-No, tu quédate aquí, cuida a Maya y descansa un poco- Cameron quiso cuestionar la orden de Emma, pero la mirada de está lo dejo callado.

-Esta bien-

-Lleven sus celulares por si pasa algo-Intervino Maya.

- Mucho que nos ayudará- Ironizó James- Si Fermín aparece lo espantarle con el flash, y luego haremos un vivo- Murmuró. Maya frunció en ceño por su mal comportamiento.

   Maya y Cameron se sentaron en los asientos traseros mientras que los otros dos chicos se adentrában entre los árboles.

-Ustedes no saben lo peligroso que fue venir solos- Reclamó nuevamente el chico.

-Ya lo dejaste claro con tu discurso- Lo corto Emma- No teníamos otra opción, Kelly dijo que era el momento de enfrentarlo-

    El silencio reino, ninguno quiso agradar más. Emma pensaba que no podía culparse, era algo que debía hacer, mientras que James, en el fondo sabía que la chica tenía razón, su destino no era algo que él pudiera cambiar, pero al recibir la llamada se preocupó por el bienestar de la chica, aunque le cueste admitirlo.