𝐀𝐦𝐨𝐫 𝐅𝐢𝐧𝐠𝐢𝐝𝐨 ~ 𝐎𝐢𝐤𝐚𝐰𝐚 𝐓𝐨𝐨𝐫𝐮

9- Iwaizumi Hajime.

Días después~.

(T/N).

Él timbre resonó dando por terminado el horario escolar, estiré ambas manos al cielo mientras que un bostezo salía de mis labios.

- Tenemos entrenamiento - Hablé mientras guardaba los útiles escolares.

- Lo sé... ¿Crees que las de primero estarán listas para él Inter-High?

Entre mis cosas del bolso vi la carta, la había cambiado de sobre ya que él otro estaba abierto, decir que estaba segura en decirle mis sentimientos a Hajime-san era una total mentira ¿Como reaccionaria? ¿Se enojaría? ¿Y si me aceptaba? Dios, si me aceptaba ¿Que pasaría? Sigo siendo la "novia" de Oikawa, al menos por unos días más será así y aunque Tooru me dio su apoyo en todo, mis pensamientos volaban.

- ¡(T/N)! - Nanami y Futaba gritaron mi nombre.

- ¿Mm? ¿Por qué gritan?

- Estas en las nubes.

- Si, últimamente te quedas mucho en tus pensamientos ¿Estas bien?

- Claro, no es nada - Las tres salimos del salón esquivando algunos estudiantes y profesores, me di vuelta fijando mi vista en el siguiente salón, muchas personas salían, pero ninguna cabellera conocida para mi - Las veo en el gimnasio.

- Bueno - Respondieron no muy convencidas.

Caminé en dirección al salón de Oikawa y Hajime al llegar quedé en el umbral de la puerta esperando la salida de todos los estudiantes, cuando ya no quedaba casi nadie entré, el aula era iluminada por la luz del sol y casi en la mitad de los pupitres estaba sentado Oikawa en su mesa, como estaba a su espalda no me veía, pero se notaba que estaba con audífonos.

Me dirigí donde él a paso lento para no hacer ruido, una vez estuve más cerca me asomé por su cabeza mirando él celular, en él había un partido de un equipo argentino contra otro Japones.

Argentina iba ganando por unos dos puntos y raramente él vídeo mostraba mucho al armador de ese equipo - ¿Mm? - Lento lleve una mano al auricular derecho de Oikawa para sacárselo, él notó mi presencia casi al instante.

- (T/N)-chan.

- ¿Te gusta ese jugador?

- Es realmente bueno.

- Para que tú lo digas debe ser cierto - Tooru sonrió ante eso - No todos pueden ser alabados por el gran rey.

- ¿Has estado hablando con el chibi-chan de Karasuno?

- Yo no.

Oikawa despegó su vista del celular para mirarme a mí, tenía una leve sonrisa en sus labios y sus ojos estaban levemente curvados.

- No es que me moleste, pero ¿Por qué mi linda novia está en mi salón?

- Las clases terminaron Oikawa - Asombrado Tooru miró hacia los lados captando que solo nosotros dos establos en el aula - ¿Enserio no te habías dado cuenta?

- No me fijé en la hora - Respondió levantándose de su pupitre - ¿E Iwa-chan?

- No lo sé, cuando llegue estabas solo aquí.

- ¿Y entraste sin más? Que traviesa linda novia, solo estamos nosotros dos - Oikawa sonrió aun más de lado acercándose peligrosamente a mí.

Desde esa vez en él paradero su cercanía me ponía realmente nerviosa - C-Calla idiota - Para impedir que se acercara aún más golpeé con fuerza su hombro.

- ¡(T/N)-chan eso dolió! - Tooru hizo un leve puchero mientras se tomaba el brazo.

- ¡Te lo mereces!