𝕱𝖊𝖊𝖑𝖎𝖓𝖌𝖘 || Merodeadores [pausada]

- XXXI - Baile de Navidad 3/5

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𝑀𝑦 ℎ𝑒𝑎𝑟𝑡 𝑤𝑎𝑠 𝒔𝒉𝒂𝒕𝒕𝒆𝒓𝒆𝒅 𝑏𝑦 𝑎 𝑔𝑢𝑦 𝑖'𝑣𝑒 𝒏𝒆𝒗𝒆𝒓 𝒅𝒂𝒕𝒆𝒅

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No había mucha gente en la sala común, seguramente los alumnos estarían en el gran comedor o por los pasillos.
De todas formas James ya estaba allí, seguramente los demás ya estarían con sus parejas en otro lugar.

El miope se veía muy bien en negro, se podía decir de que estaba más atractivo de lo normal. Pude apreciar de que su cabello estaba mínimamente peinado, y eso es todo lo que podíamos aconseguir.

Me acerqué al azabache con una sonrisa. Note un montón de miradas en mi espalda, pero en ningún momento me importó.

La expresión de James era para enmarcarla. Su rostro reflejaba la sorpresa y admiración, pero su sonrisa era orgullosa.

Gracias a los tacones, al pararme a su lado prácticamente era tan alta como él, hecho que me hizo sonreír.

-Que guapo Jamie, el negro te sienta- dije soltando una carcajada mientras le acomodaba las gafas con suavidad.
El chico se unió a mis risas y me giño el ojo coqueto.

-Tu no te quedas atrás Aphrodita- me respondió burlon mientras jugaba con el anillo en mi mano. El chico estaba nervioso, pude notarlo por los movimientos nerviosos que hacía involuntariamente.

Le sonreí dulce para calmarle, el chico me la devolvió al notar mi propósito.
-Lo haras bien Jamie, Lily no sabe lo que se pierde al no querer ir contigo- le anime poniendo una mano en su hombro de forma cariñosa.

El chico asintió decidió, cambiando su sonrisa dulce por su característica expresión traviesa y su sonrisa malévola de por defecto.

Pase mis manos por su cabello con intención de peinarselo. El chico al ver mi acción río.
-Es un caso imposible, no te esfuerces Ren- me dijo subiendo sus manos a su cabeza lentamente para apartar las mías.

Por más que peinaba una zona esta volvía a su desorden natural en lo que tardaba en pestañear. Aparte sus manos frustrada.
-Esto ya es algo personal Potter- masculle.

Al final lo dejé correr, de todas formas James no se veía mal con el cabello de esa forma. Me uní a sus risas y bajé mis manos de nuevo.