Murderers

10. Emociones.

Murderers... Se le llama Shadow a la división de los informantes. Ellos se encargan de ser los que conductores de todas las misiones. Shadows está conformado por niños huérfanos que no pasan la edad de ocho años y son protegidos a la hora de pasar la información a Blood Shield. Por lo general, solo un Murderers sabe la conformación de esta división, ya que es una regla, no revelar esta información. 

~♔~ 

Li Lou condujo al límite de velocidad de vuelta a la base militar, pero cuando llegaron allí, ya no estaba ni el presidente, ni su equipo. Tuvieron que regresar al Sur e ir directo a la casa Azul.

Al llegar allí, Yoongi y Yong Suk la esperaban con los brazos cruzados y un semblante serio. La chica tragó saliva, antes de despedirse de Dae-hyun y salir del auto para ir a su encuentro. Se acercó con paso sigiloso.

— De vuelta a Blood Shield, ahora — ordena Yoongi con voz fría.

Ella obedece sin decir alguna palabra. Sabía que había cometido un gran error al no mantener el contacto por tantas horas y mucho más, si se estaba cuidando la seguridad del hijo del presidente.

Ese pequeño despeje en el miradero, le iba a costar caro y esta vez, no tendría nada que discutirle al líder.

Cuando llegaron a Blood Shield, Yoongi camino a la sala de juntas indicando que Li Lou lo siguiera. Una vez dentro, soltó un gran suspiro y se transformó.

—¿Dónde estabas? —trató de controlar su ira. 

—Con el hijo del presidente —evadió ella.

—No te pregunté con quién, te pregunté dónde.

Li Lou suspiro antes de hablar.

—En un mirador. Me distraje... un poco.  —jugó con sus dedos, esperando el grito.   

—¿Te distraiste? —soltó con burla— ¡¿Cómo puedes distraerte en una misión que requiere tu atención?! 

El repentino grito de Yoongi hizo sobresaltar a la chica, quién agachó la cabeza, reconociendo su error.

—Lo siento —habló casi inaudible. 

—Siéntelo más —respondió aún más enojado— ¿Por esto querías que te dejará pelear? Para que te montaras en un auto y condujeras por la ciudad por encima de la velocidad permitida ¡Con el hijo del presidente! Arriesgando su vida —Li Lou quería hacerse bolita, mientras recibía el regaño del líder—. Y por si no te pareció poco, no mantuviste contacto con tu equipo, en plena misión y más con el Norte. Pudieron ser atacados y no lograríamos saberlo hasta que la señorita recordara que tiene un teléfono.   

—Líder, en serio lo siento. Tienes razón, me deje llevar por el momento y olvide mi deber —mordió su labio—. Me equivoqué. 

—Fuera de mi vista —señaló la puerta—, no quiero verte. Fuera.

Li Lou asintió casi corriendo a la salida. Cuando cruzó la puerta se encontró con su hermano, que esperaba paciente a que ellos terminarán. Ella lo vio cansada, ya sabía que se equivocó y lo aceptaba, pero le bastaba con el sermón del líder.

Camino dándole la espalda, pero él la siguió y le detuvo, obligándola a mirarlo. Ella lo vio dispuesta a hablar, pero él lo hizo primero.

—El abuelo quiere verte —dijo Suk.   

—¿Que? ¿Ya se enteró? —abrió los ojos sorprendida.   

—No, no sabe nada. Dijeron que necesitaba un favor tuyo.

La chica soltó el aire que retuvo al pensar que el director ya se había enterado de su burrada. Temió por las consecuencias graves que podían traerle por ceder a la tentación de Dae-hyun.

Caminando con desgano, fue hasta la oficina del director y pidió permiso para entrar. Su abuelo la recibió contento, abrazándola por poder verla. Li Lou creyó conveniente ocultar ese pequeño detalle de unos minutos antes y mejor, escuchar de manera clara el favor que necesitaba su abuelo.

Se sintió aliviada al saber que él estaría de viaje por cuatro días y que necesitaba que ella se quedará en su casa por ese tiempo y organizará algunos de sus documentos. Sintió que esa era una gran oportunidad para que todo estuviera más en calma, total, Yoongi no quería ni verla.

Aceptó gustosa, el favor.