9. Mounstro

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Murderers... La esperanza es lo último que se pierde o eso, es lo dicen por ahí. Para nosotros esa palabra solo nos lleva a creer, que conseguiremos nuestra venganza.

~♔~


— ¿¡Quieres matarme!? ¿Qué diablos es eso? — Yoongi alza la voz contra Li Lou, molesto.

— Por supuesto que quiero matarte, pero las razones no son suficientes — volteó el rostro, para no verle—. Tienes suerte de esquivar eso.

— ¿Qué es eso? ¿Eres humana acaso? — cuestionarla fue la mejor opción que el chico encontró, para tener el control —. Ya que lo pienso, dijiste eso el día de la misión del orfanato. Mataste a un hombre de una patada en la cabeza.

— Recite un Mantra especial — se mostró indiferente —. Pero no tengo porqué darte explicaciones. Estoy cansada, por tu culpa tendré un moretón en el abdomen.

— ¿Te estas burlando de mí? Esto continua — se puso en posición el líder.

— Mira tu cara primero.

Li Lou toma un botellón de agua y sale del lugar caminando tranquilamente dándole la espalda a Yoongi, sin mirar atrás.

Él líder corre hacía un espejo y se mira el rostro. Tenía un enorme morado en el ojo izquierdo, y unas pequeñas gotas de sangre salían de su frente al lado izquierdo ¿A qué horas le hizo ese daño? El no sintió nada. Eso lo dejo aún más sorprendido.

— Ella es un monstruo, sí, eso es. — finge escalofríos.

En denifitiva, no dejaría que alguien viera que fue derrotado por una chica nueva que juró sacar a toda costa de su equipo. Tomando su chaqueta, camino rápido fuera de la sala y fue hasta sanación, para eliminar toda marca que le recordara la derrota.

Después de un par de horas, el chico volvió a su habitación sin un solo rasguño, como si el combate nunca hubiera sucedido.

Al entrar, vio a Li Lou en la segunda planta sentada en la cama, con las piernas cruzadas y las manos encima de las rodillas, en posición de yoga. Su cabello estaba húmedo, lo que indicaba que había tomado una reciente ducha.

Le pareció curioso verla en aquella posición, porque nunca la había visto hacerlo. Viendo sus labios moverse, se acercó a ella para entender lo que murmuraba.

— Om sat chit ananda parabrahma.
Porushotma paramatma....

— ¿Qué carajos estas murmurando? — retrocedió dos pasos el chico, confundido.

Ella no respondió y siguió murmurando lo que sea que fuera eso.

—  Sr hagavathi sameta
Sri bhagvathe namaha...

Por un momento, Yoongi pensó que el mismísimo diablo, estaba siendo invocado.

— ¡Oye! — gritó él.

Al ver que ni alzando la voz fue escuchado, fue hasta su cama, tomó un cojín y apuntó a la cara de Li Lou. Pero fue en vano, aunque dio en el blanco, ella no se detuvo, hasta que terminó su canto.

— ¿Se te ofrece algo Yoongi? — habló serena.

— ¿Qué estas murmurando?

— Es un canto para activar el mantra del poder.

— ¿Mantra del poder? Si quieres invocar una legión de demonios, ve a otro lugar, no hagas eso en mi habitación.

— Como active mi Khen trimantra hace un rato, la idea es liberar el poder para lograr el equilibrio de mi alma y que todo vuelva a la normalidad, que se selle de nuevo.

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