Capítulo 21 "Tristeza de un solo día"

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- ¿Qué querías decirme Carter?

-Estuve pensando lo que me dijiste hoy, cuando no te conocía y por el contrario de eso te acercaste a mi, he decidido aceptar tu propuesta, me convenciste.

- ¡De verdad! ¡Wow!, me has hecho la más feliz en Alpha, de verdad que no te arrepentirás de estar conmigo lindo.

-Si, al menos tu eres feliz, a mí me hicieron mierda hace un rato.

- ¿Quién es? Que te hizo, nadie se mete con mi niño bonito.

-Sí, es una niña estúpida, no vale la pena ni decir su nombre, fue una pérdida de tiempo haber ido hacia esa cafetería.

-De que hablas, cual cafetería...

-No tiene importancia, lo único bueno fue que me ayudo a decidirme a estar contigo, cuando digas empezamos, solo quería darte la noticia en privado, aquí aun no conozco a nadie, pero contigo me basta.

-Creo que es suficiente. –Dijo Nico 17 mientras cortaba la señal de voz.

Astrid había escuchado todo, estaba todavía sin moverse, inerte ahí de pie, las manos le temblaban un poco y los ojos los tenía ligeramente llorosos, se sentía muy confundida, no podía creer lo que estaba escuchando, ¿acaso Carter sentía algo por ella?, de ser así, ¿lo olvido todo en un día?, no sabía que sentir, solo quería irse de ahí, tan lejos como pueda.

-No te dije que cortaras la transmisión, se supone que me obedeces.

-Astrid, después de eso ella lo abrazo y salieron caminando por donde vinieron, no dijeron más. –Después de eso la joven solo salió del vacío salón y se dirigió a su habitación.

Después de regresar a su habitación con los ánimos bajos, solo quedaba esperar a que la hora del almuerzo llegara, Astrid siempre había sido una devoradora vegetariana, pero ahora ni si quiera eso podía animarla en ese momento, se sentía rara, no triste, ni feliz, solo rara. La sensación era igual a cuando vas a comprar algo al supermercado, pero cuando llegas no hay ese objeto que tanto anhelabas, solo hay otros similares, pero de sabor diferente, sabias que podías comprarlo, pero no era lo mismo, no era lo que esperabas obtener. El hambre estaba haciendo que sus ejemplos en la mente sean de vegetales en el supermercado, no tomo mucho, se levantó de la cama y repaso unas palabras en su cabeza, no podía afectarle demasiado, ella no estaba ahí para sentir algo por un chico, tenía que esforzarse, estudiar, salir adelante y devolver ese dinero a sus padres, no podía perder su tiempo.

-Pero que tonta. –Ríe. –Como pude permitirme sentirme rara por un rato. –Ríe. –Quien se cree ese Carter, por mi mejor, lamento lo de su madre, pero yo tengo mi propia meta, por mí que le vaya muy bien, ya no me interesa. –Decía en voz alta en su habitación, como hablando consigo misma, nadie podía escucharla reír por haberse permitido sentirse así, para ella ese sentimiento no puede existir, no es su meta, ella vino a ser la mejor en su clase y eso estaba dispuesta a ser.

-Entonces, veamos que hay para comer aquí en este congelador que nos dejaron.

Cada habitación tenía su propio congelador y su propio acelerador, el acelerador era el siguiente invento del horno de microondas de los años 2000, este podía calentar y acelerar el crecimiento o tiempo de cocción de los platillos que quisieras comer. Por ejemplo, poner una semilla de plátano y en unos minutos tener un plátano maduro, luego introducir un grano de maíz y tener la mazorca completa, no toda comida podía acelerarse, por lo general eran semillas y frutas u vegetales, pero en el espacio la mayoría de la comida venia en semillas, así que este invento encajaba a la perfección para cada estudiante.

Después de escoger un sobre que contenía semillas de arándano que podía acelerar su proceso y convertirlas en arándanos, introdujo el sobre en el acelerador que tenía una forma circular en la base y un domo de cristal en su parte superior, para que pudieras ver el proceso, fue en cuestión de un minuto que todas las semillas comenzaron a eclosionar en pequeños frutos y como si fuera obra del arte mágico todo estaba listo para comerse, pero la verdad se trataba de la más pura y real ciencia moderna.

La saga de Alpha "Primigenio"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora