La cuenta por fin llego a cero. La cuarta oleada comenzó, 20 minutos habían pasado desde que se inició el despegue y solo dos pilotos quedaban aún en lo alto. Fue un inicio silencioso, pero en un abrir y cerrar de ojos comenzó algo sin precedentes.
- ¿Láseres? –Se preguntó Astrid.
-Astrid ¡cuidado! –Dijo Nico 17.
-¡No eres suficiente para mí! –Susurro Marja desde su asiento, mientras observaba la nave de su alumna a la cual se aproximaba una lluvia de láseres desde todas direcciones.
-¡Es ahora, obsérvenme! –la oleada eran una serie de láseres que salían de diferentes direcciones, no seguían un patrón, podían venir del oeste, del norte, del sur, luego girar y regresar, parecía que tenían una secuencia, en toda la sala se comenzó a dibujar una red de rojas líneas horizontales y verticales, como si se tratara de eliminar rápidamente a todas las naves, si estos tocaban el punto débil, estarías fuera. Sin embargo, cuando todos veían en la pantalla como uno de estos se acercaba desde abajo a la nave de la joven, esta desapareció. Fue un parpadeo y en ese momento vieron la nave avanzar unos 3 a 4 metros, lo suficiente como para esquivar ese disparo y seguir en la competencia.
- ¡Que! –Dijo Marja mientras observaba incrédula como la joven estudiante había dado un salto dimensional de unos 4 metros. Suficiente y espléndido en su control.
Los gritos nacieron nuevamente, en la pantalla se podía ver el rostro de Astrid mientras luchaba un poco por esquivar los demás, no había otra forma, tenían que ser saltos dimensionales. La profesora también comenzó a saltar, la diferencia era notoria, la primeriza los esquivaba con metros de distancia, pero la maestra podía esquivarlos con centímetros de distancia, como si esperara que estuviera a quemarropa de ella, y en ese preciso momento, el salto se efectuaba para moverse unos centímetros hacia un lado, y entonces esquivarlo.
-¡Astrid, lograste saltar!, ¿estas bien? ¡escaneare tu cuerpo!
-Estoy bien, aunque todos estos saltos me están comenzando a marear.
-Tus signos vitales están bien, pero no podrás aguantar mucho tiempo así, el oxígeno empieza a acabarse en tus pulmones. Calculando...unos 12 saltos más y comenzara a fallar tu respiración.
-Tranquilo Nico 17, dime a cuanta distancia estamos de la VOR de Marja.
-Ella está en constante movimiento, su velocidad indica que para alcanzarla debemos dar un total de 16 saltos, además de predecir donde irá. Si uno de esos saltos va en dirección opuesta, comenzaría de nuevo el conteo. –Respondió Nico 17.
-Entonces me estás diciendo que si le acierto a su dirección en 16 ocasiones podré estar tan cerca de ella como para verla por el cristal.
-¡Efectivamente!, pero tu cuerpo solo aguantara 12 saltos, no puedes hacer los otros 4, si lo intentas te desmayarias, no funcionara, además, ¿para que quieres acercarte a ella?
-Gracias Nico 17, la he estado observando, su patrón de vuelo es constante, ella está volando en forma de un ocho o un infinito, asemeja el vuelo de una mosca, pero también ha cambiado su dirección repentinamente, eso depende de los cazas que la están siguiendo. Esto es como la clase de probabilidad en la preparatoria, que probabilidad hay de que su nave salte hacia el frente, atrás, derecha o izquierda. Cuatro opciones, luego las multiplicamos por la cantidad de saltos que puede hacer, puede hacer hasta tres saltos seguidos y a eso añadirle la distancia, siendo una experta podría saltar hasta unos 100 metros, más de lo que Yorkie salto y apuesto que no se desmayaría.
-¿Entonces que quieres hacer? por probabilidad es casi imposible que le sigas todos los saltos en 16 ocasiones, debemos pensar otra cosa.
-No, tu tranquilo, la he estado observando, le gusta presumir. Si puedo ver el láser que esté más cerca de ella, podré adivinar donde irá, solo se mueve un poco, así lo haremos. Nico 17, aumenta la visión en mi ojo derecho, quiero poder ver de cerca la nave de la maestra.
- ¿Pero tú no puedes concentrarte en dos puntos diferentes, que veras con el ojo izquierdo? –Pregunto el dron, sabía que le costaba ver en dos puntos.
-Nada, lo voy a tapar con mi camisa, si cierro un ojo podré concentrar toda mi atención con el otro. Al igual que la mira de un cazador a través del rifle que sostiene, pero para eso necesitaré tu ayuda.
-No entiendo, ¿como puedo ayudarte? –Preguntó Nico 17.
-Tendras que darme una ligera descarga eléctrica en una parte del cuerpo que provoque mi acto reflejo en el pie derecho, esto lo harás cuando un láser este cerca de dispararnos, así mi pie pisará el pedal y daremos el salto. Después de eso yo estaré viendo donde va la maestra y con eso controlare la dirección de la nave.
-Eso es fácil, el musculo poplíteo regula tu movimiento del pie y se encuentra en tu rodilla derecha. Ahí te daré la descarga.
-Así es, es una pequeña descarga, no quiero pisar demasiado el pedal. Depende de ti amigo, podemos lograrlo juntos.
-Entendido, entonces adelante. –Afirmó Nico 17. Astrid se quitó la playera del uniforme y se ató las mangas de tal forma que cubriera su ojo izquierdo, debajo traía un tank-top blanco con un collar de su natal Kona. La hora de la verdad había llegado. La moneda estaba en el aire y el tiempo diría todo lo demás.
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La saga de Alpha "Primigenio"
FantascienzaAlpha es la primera colonia espacial en el sistema solar. En el año 2230 dos grandes empresas una de Rusia y otra de USA consiguen crear lo que seria la primera escuela en el espacio. La historia comienza con Astrid como una estudiante que consigue...