-Nunca me dijiste que era tan sexy. -Susurra Fiona cuando Jamie se sienta en el único lugar vacío en la primera fila, en diagonal a ellas.
-Diu. -La mirada de Salomé es de repulsión. -Que asco.
- ¿Entonces no te importa si le hablo un par de veces? -Fiona forma un rulo con su dedo sobre un mechón de pelo que cae en su rostro.
-Él es el enemigo, Fio.
-El traidor es el enemigo.
- ¡Silencio! -Grita la profesora Gillies y continúa escribiendo números en la pizarra blanca.
Fiona vuelve a concentrarse en intentar entender lo que la profesora Gillies quiere decir con todos esos números y símbolos desparramados en la pizarra. Su cuaderno es casi una copia perfecta, aunque solo entienda la mitad de lo que escribe.
Salomé en vez de escribir números, comienza dibujando garabatos en un costado de su cuaderno. Al principio son solo líneas curvadas, luego distingue una gran S entre las curvas. La marca con firmeza hasta que ve otras dos letras. Una X y una O. Encierra las tres letras en un triángulo dejando la S encima de todo y sobresaliendo del triángulo.
Cuando hace el ultimo trazo vuelve a escuchar la explicación de la profesora Gillies, pero al mismo tiempo siente una mirada sobre ella. Sobre su pelo marrón repleto de pequeños rulos, en la piel morena de su mano sobre su rostro. Al levantar la vista se cruza con los únicos ojos marrones que la observan.
Jamie le sonríe con diversión. Salomé bufa y decide copiar los números de la pizarra.
Play music (opcional)
- ¡Aliento de perro! -Alguien grita al final del salón.
El rechinar de la silla que se arrastra por el suelo casi es tan fuerte como la voz del chico. Esta parado en la última fila mirando fijo a la directora Gillies que se gira hacia él, pero dudando de lo que sus oídos escucharon.
- ¿Qué dijiste? -Ella lentamente se acerca y sube los escalones.
- ¡A... Aliento de... de Perro! -Vuelve a gritar, pero tartamudeando. La profesora Gillies camina más rápido con humo saliendo de sus orejas. - ¡Aliento de perro!
Antes de que la directora llegue hasta el chico, este se sube a su mesa y corre saltando sobre las mesas hacia la pizarra. Salomé logra ver a Thomas con rostro confundido, pero una ligera sonrisa se forma en sus labios cuando el chico llega a la pizarra.
- ¡Ven aquí!
Antes de que la profesora logre atraparlo, el chico dibuja un símbolo en la pizarra. Tres letras encerradas en un triángulo. El dibuja casi brillaba y hablaba por si solo. Sin saberlo todos en el salón entendían lo que significaba.
Stop music (opcional)
- ¿Crees que sea el traidor? -Pregunta Salomé cuando la profesora se lleva arrastrando al chico.
- ¿Por el dibujo? -Fiona ríe a su lado.
-Es como si dijera que es del sótano. -Hace un pausa, espera una respuesta, pero a Fiona le duele la panza de tanto reírse. - ¿De qué te ríes?
-Fue solo un reto, Salo. -Contesta al fin suspirando, haciendo que el aire vuelve a su cuerpo. -Yo le dije que lo hiciera. No lo del dibujo, pero si lo demás.
-Fiona. -Salomé habla seria. -Los retos deben quedar en el sótano. Ya lo sabes.
- ¿No lo entiendes? -Espero una respuesta que no llega. -Esta podría ser la nueva bebida.
- ¿Reemplazar la bebida por retos fuera del sótano?
-Exacto. -Fiona sonríe con los ojos llenos de emoción. -Imagínate todos los retos que podríamos hacer. ¡Sera genial!
- ¿Qué será genial? -Ambas se giran hacia el intruso.
-Creo que nadie nos presentó. -Dice Fiona extendiéndole la mano con mirada seductora. -Soy Fiona.
-Jamie. -Dice estrechándole la mano con una sonrisa de costado.
Su mirada baja hacia el cuaderno de Salomé. A penas ve el símbolo antes de que lo cierre.
- ¿Qué significa?
- ¿Qué cosa? -Pregunta Fiona fingiendo ingenuidad.
-El símbolo. -Jamie abre el cuaderno de Salomé y deja a la vista el dibujo. -Tiene que ver con la fiesta. ¿Cierto?
-Mejor ve a sentarte antes de que vuelva la profesora Gillies. -Dice Salomé cerrando el cuaderno.
Jamie se aleja, pero no camina hacia su escritorio. Sino que se para en el primer escalón de la primera fila para observarlos a todos.
- ¿Alguien de aquí sabe que significa ese símbolo? -Pregunta en voz alta señalando la pizarra.
Aunque Salomé calculaba que dos personas más además de ella sabían que significaba ese símbolo en el salón, todos se rieron de Jamie. Tuvo una liguera esperanza de que el traidor se levantara para decirle el significado, pero nadie lo hizo. Solo había dos opciones: No estaba presente o era lo suficiente inteligente para mantener lo boca callada cuando debía.
- ¡Cierra el culo y siéntate, chico nuevo! -Grita una alumna y estallan otra vez las risas.
Jamie le dedica una mirada amenazante a Salomé y vuelve a su asiento justo antes de que la profesora Gillies entre al salón. Da un pequeño discurso sobre comportamiento mientras borra el símbolo.
-Si sigue así el traidor podría reclutarlo o algo. -Susurra Fiona leyendo la mente de Salomé, como casi siempre. -Hay que decirles a los chicos si quieres que el sótano este a salvo. Porque es lo que quieres. ¿Cierto?
-Claro que sí. -Cruzan miradas preocupadas.
-Hay que decirles todo, Salo. -Sus palabras casi le sacan el aire de los pulmones. Pero responde con resignación.
-Bien.
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Cambiando Las Reglas Del Juego [Pausa]
Novela JuvenilUna historia situada en alguna parte de Buenos Aires, Argentina, sobre una chica que termina en un internado para menores.