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¿Realmente debería contarles mi historia?

Soy Jeon JungKook, un teniente retirado de las fuerzas armadas surcoreanas.

Mi vida iba de maravilla, entré a la militar a los dieciséis por lo que no me fue tan difícil unirme al ejército.

Todo realmente estaba bien, los años de guerra habían pasado por lo que casi todo en el ejército estaba tranquilo.

Todo en mi vida estaba completamente estable, ganaba bien por lo que mi economía estaba totalmente bien, mi tiempo sabía distribuirlo muy bien, sabía que no siempre podía ser parte de la armada por lo que decidí poner un pequeño café en donde, cuando tenía tiempo, trabajaba... Tampoco faltaba diversión en mi vida pues como dije antes, mi tiempo estaba bien distribuido.

Fui con el presidente de Corea en ese tiempo Lee HoiChang a Japón por algunos problemas políticos los cuales no sé pues solo me llevó como protección.

Mi estadía en Japón fue de una semana pues, según el presidente, las soluciones entre los dos países aún no quedaban claros.

Todo quedó listo en Japón por lo que por fin era tiempo de regresar a Corea, mis superiores me dieron días libres por el simple hecho de yo haber acompañado a dicha persona al país. En esos días me dediqué al mantenimiento de mi casa.

Salía a comprar todo lo que necesitaría para comer, cuando a medio camino lo vi.

Vi a aquel pequeño ángel, esa pequeña personita que en ese momento no sabía que sería lo más importante que tendría en mi vida.

— Tabien me falta café... Leche... Huevos... Jabón para trastes... — Susurré para mi mismo mientras veía mi lista de compras. — Listo.

Tomé mis llaves y la lista para después caminar hacia la puerta y salir de casa para dirigirme al mercado.

Caminaba tranquilamente por la calle mientras sentía como la paz inundaba mi ser, miraba al alrededor mío percatandome de varias cosas.

Unos minutos después de caminar mi vista se posó en un lindo chico, yo me consideraba heterosexual pues siempre me había sentido atraído hacia las mujeres pero también sabía reconocer la belleza de los hombres.

Al parecer mi vista y mi caminar se detuvieron en el mismo lugar pues supuse que se había dado cuenta de mi. Probablemente me quedé mirándolo por un largo rato.

Sonrió. Esa hermosa sonrisa se hizo presente en su linda cara, reaccioné cuando me dí cuenta de que me había quedado petrificado ante él.

La temperatura de mi rostro se elevó a niveles en los que nunca había estado, no sabía qué me pasaba realmente estaba muy nervioso.

Bajé mi mirada y seguí mi camino pasando de largo pues no quería verlo de nuevo, no quería volver a sentir lo que sentí hace unos momentos.

No estaba concentrado, ese chico seguía apareciendo en mi mente sin motivo aparente dejándome totalmente ido.

Al llegar al mercado fui inmediatamente a comprar las cosas que antes había escrito en la pequeña nota que traía en el bolsillo de mi pantalón. Las compras fueron éxitosas y fui de camino a casa con cinco bolsas de plástico donde cargaba todo.

Cuando estuve en el mismo lugar donde lo vi por primera vez, lo busqué, parecía que me hubiera hechizado pues eso solo me pasaba con chicas, aunque... Esos labios carnosos, las mejillas un poco abultadas, el pequeño y esbelto cuerpo no hacían una mala combinación.

No tuve suerte, me perdí en mis pensamientos y dejé de buscarlo pues analizaba las partes de su cuerpo como si fuera una táctica de batalla en mi cabeza.

Salí de mis pensamientos al darme cuenta de que estaba demasiado concentrado en él así que decidí seguir mi camino hacia mi casa.

No soy homosexual, realmente no lo soy, sé que soy heterosexual, me gustan mucho las mujeres, pero éste chico tiene algo que me llamó mucho la atención, aún no sé qué es.

Él seguía en mi mente, seguía rondandome la cabeza tantas veces que ni siquiera me percate de cuando llegué a mi casa.

Pude distraerme un poco de él pues tendría que limpiar, ordenar y cocinar mi comida... Fue un día realmente activo por lo que no me costó demasiado no pensar en otras cosas que no fuera mi casa.

Al día siguiente tendría que ir a la cafetería que había montado unos meses atrás en el centro de la ciudad por lo que también sería un día un tanto ocupado.

Seguí ordenando la despensa que había comprado hace unos minutos en la alacena que anteriormente había aseado.

Al terminar de limpiar completamente la cocina fui a limpiar lo que faltaba del piso de abajo pues después iría al piso de arriba a hacer la misma acción.

El hecho de pasar tanto tiempo fuera de casa apenas me dejaba ensuciarla un poco, realmente no era mucho qué limpiar por lo anteriormente dicho. Sólo unos minutos después terminaría por completo con el piso inferior.

Las canciones que pasaban en la radio me hacían muchísimo menos pesada la limpieza pues me distraía un poco cantando un poco.

Terminé después de aproximadamente veinte minutos y me dirigí a las escaleras para también limpiar todo el polvo que existiera en ellas. No tardé mucho pues cuando me di cuenta ya me encontraba en el segundo piso.

Bajé las escaleras para descansar un poco y leer el periódico, encontré un montón de cosas, entre ellas algunas catastróficas otras excelentes para el país y algunas otras sin relevancia. También encontré la noticia de que el conflicto con Japón había sido arreglado, no necesitaba que me lo contarán, yo estaba ahí... Bueno, realmente no sabía qué era lo que se había arreglado así que debería leerlo.

Después de sentirme otra vez bien decidí seguir con el piso de arriba, no era mucho qué hacer realmente. Después de unos minutos terminé y bajé a cocinar lo que comería.

🕰️⌛

Espero que les haya gustado el primer capitulo 👉👈

No sabía cómo iniciarla realmente, pero aquí está jijiji

Lxs leeré en el próximo capítulo, realmente espero que les haya gustado.

Éste es el inicio oficial de algo que será grande, confío en eso 🤭

Por favor mantengan saludable a su familia y también manténganse saludables ustedes, cumplan con todas las reglas sanitarias por su bien.

나는 그들을 너무 많이 사랑해요. 💕✨

HIS TIMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora