Lying School

4

Gane

- ¡Kate! - Gritó William saliendo del salón - Espera, Kate.

- Ni te me acerques - conteste alejándome.

- Kate, no lo estás pensando bien, esto nos beneficia. - habló sosteniendo mi hombro.

- ¡Que no me toques! - grite aventándole la mano - No, no me beneficia y ni se te ocurra dar tu opinión Porque sabes bien que a ti no te van a andar humillado. - grite.

- Khatleen, escúchame. - habló jalándome.

- Exactamente por eso me pongo así , ¿quién te crees para jalarme? ...Will es que no voy a permitir,ni loca que tú y tus putos amigos me hagan ese tipo de cosas. - conteste soltándome. - Púdrete Castle y todos ustedes  - Grite levantando el dedo medio hacia el portón y el otro hacia William.

- Señorita, nombre y salón por favor para permitirle la salida.

Voltee a ver al guardia, ¿de cuando acá alguien me podía prohibir la salida? Este día no puede ser peor. Regrese mi cara al frente y conteste.

- Kathleen de la Course, salon A2, ábreme.

- Señorita de la Course, no tenemos permitido dejar salir a nadie de su salón...-

- ¿Que tengo 10 años? a-bre-me. ¿Quieres que te despidan? No creo, entonces ábreme que ya me quiero largar.

- Kathleen...

- Ah, hola ¿que pasó? ¿Ya cambiaron de opinión? - pregunte viendo a mi padre acercándose.

- Kate-

- Solo dime, ¿ya cambiaron de opinión? - pregunte - Asi rápido para ya no perder más mi tiempo.

- Kate, ¡por Dios!-

- Le puedes decir que me abra, no soporto mas este día - hable sacando mis lentes de sol y colocándomelos.

- Kate, entra el salón, escucha todo y te dejo salir. - propuso.

- ¿Enserio no vas a hacer que me abra? - grite - Joder, ¡cada día te vuelves mas insoportable! - caminé hacia el salón. - Gracias por nada.

- Kathleen, ¡Dios santo! - gritó desde atrás.

- Mucho dinero y lujos pero tienen una mentalidad de mierda - hable viendo a los padres de mis amigos.

- Señ-

- Volví- grite entrando al salón - No me vayan a mandar al rincón ¿si? - hable sarcástica sentándome - Solo regrese por qué no me dejaban salir, no se emocionen.

- Kathleen, ya acabamos la clase de ese tema, pasaremos ahora a lo que ocuparé para la clase, saca tu cuaderno y anota. - habló el profesor guapo.

- ¿Cuaderno? - reí - ¿Estamos en primaria o que?

- Respetó, señorita. Anote en donde quiera, pero anote. - contestó.

- ¡Ay, ya mátenme por favor!. - suspiré mientras veía aún a todos los padres fuera del salón.

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- Díganme, ¿qué vamos a hacer? - pregunte chupando mi paleta sentada en la barra de la cocina de la casa de una amiga.

- Kate, mira todo es tan fácil como fingir. - comentó Will.

- ¿Cómo un orgasmo? - rio Lehi. - Soy buenísima entonces.

- Exacto, solo finjan. ¡Un año que demostremos que todo sale bien con los maestros y listo!

- ¿Si? ¡Y cuando se nos pase! A ver, no puedo fingir contestarle bien a un profesor todo el tiempo, algún día se me va a salir decir algo que no y ¿luego?

- No, no. -

- No, saben que no tiene nada bueno por donde ver esta situación, ¡aún quedan las calificaciones! Por Dios como están de acuerdo nuestros padres, es inimaginable. - suspiré.

- No me la creo, no sé qué haremos. - habló otra chica.

- ¡Mierda! No, no me voy a dejar, su maldito nuevo "programa de educación" me viene valiendo, si ustedes se rehusan a "castigarnos" no puede pasar gran cosa.

- Nos cambian al otro salón.- comentó Chris levantando los hombros.

- Pero, no pueden cambiar a todos - refute.

- Pero a algunos si.

- No, no mientras nos rehusemos, ¡Dios no es tan complicado! Seguimos siendo igual y ellos no tendrán otra más que acceder, si los cambian de salón solo regresan al salón.  - hable desesperada.

- Kate, creo que esta vez nos tocará hacer caso... - Levantó los hombros Will.

- ¿Enserio? - voltee a ver a todos quiénes asintieron - No, que poca. - conteste volteándome y alejándome de ellos.

- No espera - gritarón.

- No se que mentalidad les hayan metido, pero lo que está haciendo la escuela ¡ESTÁ MAL! Y si nadie va a reclamar pues quédense y jodanse entre ustedes. - dije desesperada - Yo no, pero esta vez solo pelearé por mi.

Salí furiosa de su casa, dirigiéndome a la mía, con un enojo que sentía, nunca terminaría. No es posible, no tenia el apoyo de nadie, nadie me ayudaba a salir de esta maldita situación.

Estacione mi carro y entré a mi casa, voltee a la sala y estaban mis padres sentados, caminé con la intención de reclamarles y mientras me acercaba la imagen de la directora estaba ahí.

Sin pensarlo dos veces me acerqué a ellos, enojada y con decisión les dije:

- Tienen dos opciones, o me quitan ese programa rápido o hago público que el su Instituto está promoviendo el machismo y...la violencia estudiantil y contra la mujer - reafírmenme - Y para que vean que no soy tan mala, solo quiero que a mi se me trate como antes, a mis compañeros no les dije que haré, así que solo quiero ese trato para mi, gracias y los veo mañana. - salí victoriosa

¿Quién gano? Como siempre yo.