capítulo 24

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Sentía un frío aire correr por mis piernas erizando mi piel. Me moví incómoda tapandome mas con las sabanas, pero no ayudaba. Abrí los ojos de golpe recprdando donde estaba. Dios, había escapado de casa y lo peor, que no tenía ni idea de en que vecindario estaba. Miré a mi alrededor, el cuarto era mas grande de lo que había imaginado. Aunque no le había prestado mucha atención anoche. Sali de la cama y miré hacia la puerta, estaba entreabiertq y una sombra se escabullo saliendo rápido. Puse los ojos en blanco, seguramente era Zayn. De pronto mia mejillas ardieron al recordar lo que estuvimos a punto de hacer. Me levanté llendo hacia una puerta que estaba en la otra esquina de la habitación. Obviamente era el baño.

Sali del baño encontrandome con mi remera sobre la cama.

En la sala todo parecía estar ordenado, había un silencio mortal excepto por que se escuchaba el trafico desde la ventana abierta. En la cocina había una taza de cafe sobre la mesada junto a unos bizcochos resien horneados que su olor me hacía gruñir mi estomago por hambre. Zayn no estaba, bien, mejor que no estuviese por que no quería enfrentarme a él, no despues de lo que había pasado ayer.

Tome mi mochila debatiendome en si beber el cafe o no. Hice un gran esfuerzo por abrir la puerta y salir de allí.

Bien ahora estaba peor que antes, no tenía donde ir y con un estómago que me pedía a gritos comida. Tal cez debí tomarme el cafe. Aparte todo pensamiento que me llevará hacia Zayn, no volvería, me sentía demasiafo avergonzada por creer que tal vez yo le gustaba, pero en realidad solo queria un buen polvo como toda una zorra. Bien, yo no era igual a todas esas zorras.

Consegui un taxi en una esquina y le di la ubica dirección que estaba segura que mi madre no me buscaría. No queria ir con el, pero era lo último que me quedaba.

El viaje se me huzo largo y parecía que nunca iba a acabarse. Justo en un semáforo en rojo el taxi se detuvo, mire desprevenida hacía la ventana donde la misma camioneta gris se puso al lado nuestro. Los vidrios estaban bajos y pude ver la cara del conductor. Me quede boquiabierta, era Harry. Usaba unos grandes antejos negros pero el mismo, su cabello rizado, sus labios. Hablaba con una chica a la que no pude verle la cara por que en cuanto el semáforo se puso en amarillo el arranco a toda velocidad evitando a los autos que iban a una velocidad menor.

Me quede asombrada, había sido el quien casi nos choca anoche? Seguramente si, no creó que haya mas coincidencias. La misma camioneta, pero por que haría Harry algo asi, solo para enfurecer a Zayn? Y el lo sabía, estaba segura, por eso quiso perseguirlo olvidando que yo me encontraba con él en el auto.

Llegué a mi destinó pagándole al taxista. Acomode un poco mi cabello para verme mas presentable y toque la puerta después de tomar una bocanada de aire. Esperé unos minutos antes de que la puerta se abriera y la madre de Liam me mirará algo confundida. Mis nervios aumentaron cuando su papa salió a ver poniéndose detras de su esposa.

- Beth, que haces aqui?- su madre fue la primera en hablar y parecía algo confundida

- perdón, solo quería hablar con Liam- dije tratando de no tartamuedear, mostre una timida sonrisa y su padre asintió retirándose

- claro, pasa- dijo dándome lugar para que entrase. Me sentí otra vez incómoda por estar en una casa tan lujosa, mi ropa no sería la apropiada para estar en un lugar asi. Y su madre se había dado cuenta por que no dejaba de mirarme de arriba a abajo.

- Liam bajará en un minuto- dijo saliendo por una gran puerta blanca. Su padre se sentó en el sillon de tela y tomó un diario para leerlo. Suponía que eso era lo que estaba haciendo antes de que llegará. Mire las escaleras esperando con ansiedad que Liam bajará. Estaba parada en medio de la sala, con la atenta mirada del padre sobre mi. El silencio era mortal y estuve a punto de irme si no fuera por que Liam bajo corriendo las escaleras sorprendido por verme.

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