ERES MI MADRASTRA (Imagina con Jimin - BTS)

Capítulo 3

— ¿Por qué estas parada al frente de mi cuarto? —Preguntó Jimin, logrando que T/N reaccionará luego de unos minutos de haberse quedado mirándole.—

— Estaba limpiando la casa, y el único lugar que me falta...es tu cuarto. —Respondí, gracias a Dios que mi voz sonó serena y para nada nerviosa, como en realidad me encontraba.—

— No dejaré que entres a mi cuarto. —Decía al ponerse enserio, reflejando su incomodidad con T/N. — ¿Por qué estas haciendo este tipo de cosas, eh? ¿Qué quieres lograr al haberte casado con mi padre? Se que tienes un plan, nunca haces algo sin pensarlo...

— Solo me enamoré, me casé y ahora quiero limpiar tu cuarto... Que de seguro debe estar echo un chiquero, siempre dejas todo tirado, cuando sabes que cada cosa tiene su lugar. —Dije sin darme cuenta, dejé en evidencia que lo conocía y debería fingir no conocerlo.—

— Ahora me conoces... —Susurró con una sonrisa irónica, para luego cerrar la puerta de su cuarto.— No quiero que invadas mi privacidad, esta bien que seas la esposa de mi padre pero eso no te derecho te invadir mi espacio personal.

— ¿Invadir? Tan solo quiero limpiar, no me gusta el desorden. —Di un suspiro al empezar a enfadarme, él siempre lograba hacerme enoja.—

— Ya deja de fingir ser la "buena esposa", ¿Crees que te ganarás mi aprobación cosas como el desayuno, limpiar la casa? Para mi solo estas fingiendo amar a mi padre, puedo verlo en tus ojos.

— No estoy fingiendo, pero no te negaré que quiero llevar la fiesta en paz con mi "hijastro". —Supe que aquella le dolió a Jimin, pero debo seguir.— Estoy admitiendo que quiero llevarme bien con los hijos de mi esposo...

— No eres más que una de las tantas esposas que tuvo mi padre, le encantan todo tipo de mujeres pero esta vez creo que eligió a una niña. —Aunque sabía que sus palabras eran hirientes, ella había empezado.—

— ¿Y qué? Tal vez esta vez de verdad se enamoró, de esta niña. —Sonreí para demostrarle que no estaba derrotada.—

— Entonces debería llamarte ¿Madre? No suena bien, ¿Madrastra, tal vez? Eso te queda mejor... Desde hoy eres mi madrastra. —Sonrió para demostrarle que no le dolieron sus palabras, pero ambos sabían que fue todo lo contrario.—

— Llámame como quieras, ahora sí ¿Puedes hacerte a un lado, para poder terminar mis labores? —Pregunté y él se puso a un lado, dando a entender que podía entrar.—

— Si entras a mi cuarto, no dejaré que salgas. —Susurró con una leve sonrisa pícara.—

— ¿Cómo? —Pregunté al abrir la puerta, mientras me daba la vuelta para verlo. Jimin se apoyó en la pared y comenzó a tocarse los labios, entendí aquella referencia—

— Que si entras a mi cuarto, yo no dejaré que salgas de allí. Me olvidaré que eres la esposa de mi padre, osea mi madrastra y te besaré...al final te haré mía nuevamente. —Sonrió ante el rostro pálido que había puesto T/N.— Pero depende de ti, aún estas a tiempo de arrepentirte ¿Entras o no?

— ¿Crees que caeré en tus amenazas? Siempre eres así, haces amenazas pero nunca cumples con tus palabras. —Disimuladamente mordí mi labio inferior, tenía un leve presentimiento de que algo malo podría pasar.—

— Deberías creer en mis palabras, pero bueno depende de ti ¿Qué harás? —Preguntó aún sonriente, amaba este tipo de situaciones donde ponía a T/N contra la pared.—

— No creo en tus palabras, voy a terminar con mi labor y tu seguirás haciendo tus cosas, ya no soy la chiquilla que conociste Park Jimin. —Entré al cuarto aún sintiendo mis piernas temblar, pero no debo bajar la guardia.—