my boyfriend, my zombie.

Capítulo 13

Han salía apresurado del colegio, hoy supuestamente iba a salir con sus amigos, pero se negó con una excusa que obviamente era falsa, quería ir donde MinHo para disculparse, porque de nuevo había pasado una semana y no pudo ir por los malditos exámenes.

Entró a su casa, comió, se cambió y salió hacia el bosque, caminó por todo ese camino que tenía que recorrer y cuando llegó tocó la puerta aunque sabía que estaba abierta, pero no podía ingresar así porque sí.

A los minutos abrió MinHo, quien tenía una mirada seria y un poco intimidante.

—Él está arriba —se hace a un lado.

JiSung ingresó y volteó a verlo.

—MinHo...

—Nosotros no tenemos nada de que hablar, a él no le puedo negar a juntarse contigo.

JiSung suspiró y se fue escaleras arriba.

Tocó la puerta y fue recibido por un feliz ChangBin.

—¡JiSung! —lo abrazó.— Pasa pasa, tenemos mucho que contar.

JiSung se adentró a la habitación y se sentó en la cama del mayor.

—Te traje esto, también traje para MinHo, pero creo que aún no me perdona

—Gracias Sung —agarró el tazón donde había comida.— Extrañaba comer esto ya no me acostumbro a comer animales que cazamos.

—Lo siento por no venir —apenado.

—No te preocupes —susurra.

—¿Sucedió algo?

—Sung ¿Tú crees que alguien se enamore de mi?

—Sí, eres muy simpático ChangBin y el que no lo vea, pues está muy ciego.

—Sung ¿Sabes que somos?

Han negó—: MinHo me comentó que no eran personas, pero no sé que quiso decir con eso.

La puerta principal se escuchó cerrarse.

—Deberías hablar con él.

—No lo sé Binnie, él está molesto —se encoge de hombros.

—Anda ve —animó, quería ver a sus amigos felices.

JiSung se paró y salió de la habitación con un "hasta luego" y siguió a MinHo.

—¡MinHo!

—¡Vete! —grito molesto mientras quitaba algunas plantas de su camino.

—No me puedes ignorar siempre —agarra su brazo.— Deja de ser inmaduro.

—Sí puedo, solo por ChangBin no lo hago.

—Ni si quiera sabes que quiere ChangBin, mírame MinHo.

Lo volteó a ver y conectaron miradas por un momento.

—Tengo que contarte algo —suspiró y se sentó en un tronco.

Han se sentó en silencio.

—¿Te acuerdas cuando te dije que no éramos humanos? Pues somos una especie diferente.

—¿Especie? —confundido.

El mayor suspiró.

—Somos zombies... —susurró.— Por eso te dije que nuestra amistad tenía que ser secreta.

JiSung se quedó en silencio.

—¿Me comerás el cerebro? —hace un puchero.

El mayor río y negó

—Preferimos no comer humanos, por eso preferimos cazar u otra cosa.

—¿Y ChangBin?

El mayor suspiró nuevamente.

—Hay una leyenda, verás nosotros el mismo día de que cumplamos 18 tenemos la oportunidad de volvernos humanos, dejamos de ser zombies cuando alguien nos da un beso, un beso de amor de verdad, hay algunos que lo cumplen y otros que no, los que no pues se vuelven zombies para siempre —hizo una pausa— no quiero que ChangBin se ilusione mucho con eso, no quiero que después sufra solo porque no llegó a enamorarse, sé que él quiere convertirse en humano, pero no sé si alguien pueda a llegar algo por él ya que él no sale mucho de la cabaña.

—Ey MinHo, tranquilo, podemos hacer algo

—¿Qué cosa? —curioso.

—El lunes pueden venir conmigo, les presentaré a mis amigos —sonríe.

—¡¿Qué?! No, ni loco

—Vamos MinHo, quizás alguien se enamore de ChangBin ¿No crees? Pero no irás con eso.

—¿Qué tiene mi ropa? —se mira por completo.

—¿Hay ropa en esa cabaña?

—Sí, de un hombre, de una mujer y de un bebé.

—¿Un bebé? —confundido.

—Ni idea —alza los hombros.

—¿Okay? Dame las del hombre, veré que puedo hacer, mañana vendré a tomar sus tallas.

—¿Qué? —confundido.

—Nada MinHo —lo abraza— perdóname.

—Está bien, no pasa nada —corresponde.

Se separaron y se quedaron viendo por un rato, hasta que comenzaron a acercarse, pero MinHo reaccionó.

—Vamos donde ChangBin, debe estar preocupado -habló Han con un sonrojo.

—Sí, está bien, vamos —nervioso.

—MinHo una pregunta.

—Dime —comenzaron a caminar.

—¿Hay más de tus especies? —lo mira.

—Sí, pero solo hay pocos que son como yo, o sea pueden hablar, comprender y eso, los demás son zombies por así decirlo completos.

El menor asintió y siguieron caminando hasta que llegaron a casa, dónde estaba ChangBin jugando con algunos juegos que Han les había dado de su infancia.

—¿Y? ¿Hicieron las pases? —alza una ceja.

Ambos asistieron.

ChangBin comenzó a dar saltitos.

—Y el lunes iremos con Hannie a conocer a sus amigos.

—¡¿En serio?! —sus ojos se iluminaron.

—Sí, pero necesita esa ropa del hombre, la que nos ponemos.

—¡Yo los traigo!

Se fue corriendo a buscar las prendas y cuando las encontró bajó y se las dio a JiSung.

—Bueno, ya me voy, gracias, mañana vendré de nuevo a medir sus tallas.

Los mayores asistieron y Han se fue con un hasta mañana.

Lo que Han y MinHo no sabían es que alguien había escuchado toda su conversación en el bosque.