Dear Five | Number Five | [#1] {PAUSADA}

24. Have a good day

Disparos por parte de La Encargada y sustos por parte de la pobre Gloria, que había quedado petrificada en el suelo por el susto de la situación. Pero llegó un momento en el que pudo recobrar la razón y poder llegar a moverse un poco, más que de costumbre, hasta llegar a enderezarse.

Dos disparos errados y sin suerte fueron provocados por La Encargada que no lograba atinar a ninguno. No podía dejar que Cinco se la llevará. El podría ser un empleado más e incluso puede haber cambiado la línea del tiempo, pero se estaba cambiando algo mucho más valioso. Su hija.

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— ¡No lo se! ¿De acuerdo, Lila?—respondía por décima vez en cinco minutos Dot.

— ¡No mientas dijiste que hace un rato hablaste con ella! —seguía gritando Lila detrás de ella.

— Solo le dije que tenía que meditar algunas cosas —dice mientras camina a paso rápido por los pasillos, cada vez más cerca de las sala de tubos.

— ¡¿Que mierda le dijiste Dot?! —ahora esta más cerca de la mujer por lo que llega a tomarla del brazo y darla vuelta—  ¡Dime!

— ¡Prometí hablar con ella siempre y cuando de mí no saliera nada, y eso es lo que va a pasar! —escupe mirando serena a Lila— Ahora déjame que me haces daño —quita su brazo de manera brusca y asoma su cabeza a la sala de tubos.

Así como asoma su cabeza la vuelve a quitar una vez que puede ver a la mujer de cabello blanco apuntando con un arma a un punto el cual Dot desconocía. La Encargada puede ver cómo alguien se acerca por lo que apunta preocupada, pero aparta la vista cuando ve que se trata de una simple empleada.

La muchacha apreta el botón de seguridad para que empiecen a registrar el área. Ella sabía perfectamente de quién se trataba, pero hizo una promesa con Megan, y Lila sería la última en enterarse.

(« = alarma de seguridad)

«Seguridad.»

Lila, que se había quedado unos metros atrás por la respuesta de Dot, apresura el paso cuando ve que Herb y un hombre más se acercan un poco más corriendo a donde estaba ella. Una vez todos juntos, los cuatro chocan entre sí haciendo que Dot estalle de desesperación.

— ¡Soy Dot! —grita alarmada con las manos en alto y todos, incluso Lila, se hacen para atrás.

«Seguridad a la sala de tubos.»

— ¿Que sucede? —grita Lila mientras se destapa los oídos y se suelta de los brazos de Herb.

— Tu madre está iniciando un tiroteo hacia alguien —enuncia Dot mientras hecha un mirada a la sala y ayuda a levantarse a Gloria.

«Violación de seguridad.»

— ¿Contra quién? Es Megan ¿No es así? Déjame pasar —Lila trata de entrar, pero el brazo de Dot la frena.

— ¡Tu no irás a ningún lado, mierda! Es muy peligroso.

— Es mí hermana, idiota. Necesito estar con ella. ¡Así que déjame entrar carajo o tendré que entrar de otra manera!

— Herb —Dot habla en un tono bajo— Házlo.

Acto seguido, Herb le coloca rápidamente una pulsera idéntica a la de Megan para evitar que haga algo estúpido. No querían llegar a eso, pero era necesario. Después, el segundo hombre la carga en uno de sus hombros y empieza a caminar mientras Lila agoniza.

— ¡No por favor! —grita desgarrando sus cuerdas vocales —¡No le hagan daño! —es como si no tuviera voz, pero hace su intento para que se escuche— ¡Es lo único que me queda, por favor! —su cara refleja agonía y tristeza mientras las lágrimas caen por sus ojos— ¡Tengo que decirle que lo siento!—