Instintos Salvajes

FRACCIÓN 34

Estaba a punto de salir corriendo tras ella cuando...

Oh Legoshi ahí estás, perdón por la tardanza.

Juno acababa de llegar al parque.

Me quedé ahí estático un gran vacío en mis adentros.

No te preocupes que bueno que llegas. Fue lo único que atine a decir.

El resto de la tarde me pareció interminable y sin sentido, mientras recorriamos el centro comercial en busca de ropa y artículos para bebé yo no podía mantenerme concentrado ni siquiera fingir interés o emoción únicamente podía pensar en mi amada Haru, en el beso que nos dimos y en sus palabras. Siempre te amaré, pero no podemos estar juntos.

Cuando al fin regresamos a Cherryton con un montón de bolsas llenas de compras ya estaba oscureciendo, así que acompañé apresuradamente a Juno a su dormitorio y luego corrí a contarle todo lo sucedido a Jack.

Tal como lo esperaba mi querido amigo después de escuchar con atención mi emocionado relato se dedicó a sermonearme y reprocharme por no dejar en paz a Haru, además me dejo muy en claro que lo sucedido en vez emocionarla sólo le hacía más daño y que yo era un inconsciente, insensible y egoísta.

Aún no sé porqué le sigo confiando todo si ya sé que terminaré regañado por él, tal vez sea porque es mi mejor amigo y a pesar de que sus palabras no me gusten en el fondo se que tiene razón.

Quizá Haru también esté en lo correcto y ambos debemos ir por caminos diferentes con distintas personas y dejar atrás toda nuestra historia...

Todo esto dio vueltas en mi cabeza por mucho tiempo y una parte de mi me decía que había que aceptarlo, pero otra se negaba rotundamente y me exigía buscar a Haru y acercarme a ella pues sin duda alguna es y siempre será el amor de mi vida.

Obviamente decidí hacer caso a mi parte irracional y egoísta y tal vez Jack me mate por eso pero estoy dispuesto a correr ese riesgo con tal de recuperar a Haru.

Ya había pasado más de un mes después de nuestro encuentro en el parque y yo no podía seguir de brazos cruzados al lado de Juno así que decidí ir en su búsqueda.

Una o dos veces a la semana lograba escapar de Juno, las clases o los ensayos de teatro e iba a pasar la tarde al parque, ya que al no saber la dirección de Haru o el nombre de su universidad esa era mi única opción, sin embargo ya llevaba así dos semanas y no había tenido éxito así que ya comenzaba a desesperarme.

Era un jueves por la tarde, yo estaba sentado en una banca cercana al modesto kiosco del parque y leía un libro o al menos eso parecía, pues de hecho me dedicaba a mirar atentamente a todo el que cruzaba el parque o pasaba ahí cerca, casi anochecia así que decidí esperar sólo unos minutos y marcharme.

De pronto vi al otro lado de la acera un pequeño grupo de jóvenes que paseaban despreocupadamente y pensé que tal vez mi conejita estaría con ellos así que me levanté para acercarme.

Repentinamente frente a mi cayeron un montón de libros y una chica quedó de rodillas en el suelo.

¿Te encuentras bien?, por favor déjame ayudarte. Dije recogiendo sus libros y ofreciéndole mi mano para levantarse.

Oye Tam ¿estás bien? Te dije que no corrieras cargando todo eso o tendrías un accidente... otra vez tu. Dijo molesta mientras yo la miraba extrañado y devolvía los libros a la otra chica.

Es ese chico de nuevo. Dijo la accidentada poniéndose sus gafas.

Hola Haru, que gusto verte y que coincida. Afirmé.

Yo no lo creo Legoshi, vámonos Tam ya es tarde. Dijo jalando a su amiga para irse.

Espera por favor Haru necesito que hablemos no te vayas. Dije tomándola del hombro.

Si me niego no me voy a deshacer de ti cierto. Gruño molesta.

Por favor Tam adelantatey dile a Ray que no tardo por favor. La chica sólo asintió y se fue.

Y bien Legoshi seguirás atormentandome con el "hubiera" o ahora que más. Dijo mirándome de frente.

Descuida no lo haré, sólo quiero que repitas lo de la última vez. Suplique.

¿Que cosa?

Que me amas y siempre lo harás.

Veo que recuerdas bien mis palabras no sé porqué tengo que repetirlas y si sólo era eso adiós. Dicho eso me dio la espalda.

Acaso tienes prisa por llegar con ese tal Ray. Dije deteniendola de nuevo.

Tal vez, pero eso es algo que a ti no te importa.

Si me importa y mucho, Haru ya lo decidí no estoy dispuesto a dejarte ir y menos cuando sé que tu me amas, lo he decidido y en cuanto a Juno, claro que voy a reconocer a sus cachorros, ellos tendrán un padre pero eso no significa que yo deba tener una relación con ella.

Estoy dispuesto a luchar por ti y hacer todo lo posible porque me perdones todo el daño que te hice no quiero dejarte por nada ni nadie y no me importa si el mundo se nos viene encima estoy dispuesto a soportar todo por estar junto a ti. Finalice y ella volvió a mirarme.

Legoshi, espero que esta vez no olvides tus palabras porque será la última oportunidad que tendrás, sí vuelves a romper mi corazón te juro que no me vuelves a ver en tu vida.